El congreso del PSOE aprob¨® la gesti¨®n de la ejecutiva

El XXVIII Congreso del Partido Socialista Obrero Espa?ol aprob¨® anoche la gesti¨®n de su comisi¨®n ejecutiva, con el 68% de votos a favor, el 10% en contra y el 21% de abstenciones, adem¨¢s de un 1% de ausentes. La votaci¨®n sobre la gesti¨®n culmin¨® una tensa jornada, que se inici¨® con la derrota de la candidatura oficiosa a la presidencia del congreso y continu¨® con una dura sesi¨®n de cr¨ªtica a la comisi¨®n ejecutiva, desarrollada a puerta cerrada, tras la cual se produjo la votaci¨®n final.

Los delegados, m¨¢s de un millar, dejaron patente desde el primer momento su mayoritario deseo de que no se suprima la definici¨®n marxista del PSOE y aplaudieron fuertemente cuanta menci¨®n se hizo a Carlos Marx. Enrique Tierno Galv¨¢n, alcalde de Madrid y presidente de honor del partido, cosech¨® grandes aplausos al afirmar que el PSOE no debe abandonar ning¨²n aspecto ideol¨®gico.La elecci¨®n de la mesa constituy¨® la primera prueba para la ejecutiva. Gregorio Peces-Barba, candidato oficioso, fue derrotado sucesivamente como candidato a la presidencia y a la vicepresidencia del congreso. El se?or Peces-Barba interpret¨® esta derrota como un rechazo personal y a su gesti¨®n en el grupo parlamentario. Los delegados eligieron a Jos¨¦ Federico de Carvajal, ex presidente de la Comisi¨®n Constitucional del Senado y de convicciones marxistas.

Felipe Gonz¨¢lez, con voz firme y pausada, pronunci¨® un discurso de hora y media de duraci¨®n y pidi¨® que el XXVIII Congreso del PSOE asuma con esp¨ªritu cr¨ªtico la experiencia marxista y la de todos los socialistas. Levant¨® aplausos ¨²nicamente cuando cit¨® a Pablo Iglesias y a Marx y cuando pidi¨® menos verbalismo y m¨¢s profundidad en el cambio.

El consenso, los fallos en la democracia interna y la acumulaci¨®n de cargos en manos de pocas personas constituyeron los puntos m¨¢s tratados durante el debate de la gesti¨®n de la ejecutiva, as¨ª como un ataque a los funcionarios del partido como ?bur¨®cratas a sueldo? y varias expresiones de desconfianza hacia el n¨²mero dos, Alfonso Guerra, quien a su vez contest¨® diciendo que es insoportable la crisis de credibilidad en la organizaci¨®n.

Felipe Gonz¨¢lez tuvo que emplearse a fondo en su discurso final a los delegados, previo a la votaci¨®n, y consigui¨® arrancar varias ovaciones. Anteriormente hablaron Javier Solana, Luis G¨®mez Llorente y Alfonso Guerra, en el mismo sentido. Los comentarios de numerosos delegados, a la vista de las votaciones, se centraron en la caracter¨ªstica de ?voto, de castigo? que parecen revestir los pronunciamientos en contra y muchas de las abstenciones; no obstante, varias delegaciones suavizaron a ¨²ltima hora sus posiciones. En general, la impresi¨®n es que Felipe Gonz¨¢lez ha conseguido salvar la situaci¨®n. P¨¢ginas 11 a 14