Estreno mundial del "Stabat Mater" de Bocherini

En la iglesia del Real Colegio del Corpus Christi, de Valencia, ha tenido lugar el estreno mundial de la obra de Luigi Bocherini Stabat Mater, bajo el patrocinio de la Caja de Ahorros de Valencia, con la colaboraci¨®n de la orquesta de c¨¢mara La Folia, de Milhouse (Francia),que dirige el valenciano Miguel de la Fuente.La casa discogr¨¢fica francesa Arion est¨¢ llevando a cabo la b¨²squeda de partituras nunca estrenadas que puedan tener un inter¨¦s dentro del contexto actual. Esta partitura fue encontrada en la biblioteca del conservatorio de Par¨ªs por el director Miguel de la Fuente, de formaci¨®n en los conservatorios de Valencia y Madrid , y actualmente profesor de viol¨ªn en la Musikschule, de Reinach (Basilea), la citada casa discogr¨¢fica le encarg¨® la grabaci¨®n de esta obra que saldr¨¢ al mercado discogr¨¢fico durante este mes de junio.

Bocherini escribi¨® una primera versi¨®n en 1781 para soprano, cello y orquesta de cuerda, modificada posteriormente en 1800 para dos sopranos, tenor y orquesta de cuerda, que es la versi¨®n ahora estrenada. La partitura est¨¢ dedicada a Lucian Bonaparte, que por entonces estaba de embajador en Espa?a, siendo editada en nuestro pa¨ªs. Actualmente existen tres manuscritos de la obra, uno en el Conservatorio de Par¨ªs, otro en la Biblioteca Nacional de Par¨ªs y un tercero en el Monasterio de Montserrat.

La obra en s¨ª es excesivamente larga, no siendo de lo mejor de Bocherini, gran compositor de m¨²sica de c¨¢mara; no obstante, posee momentos de extraordinaria belleza, como dos d¨²os entre las dos sopranos, algunas arias de las sopranos y el am¨¦n final. El tratamiento dado por el compositor a la voz es muy bueno, resultando una tesitura bastante c¨®moda y bien resuelta vocalmente. La m¨²sica de Bocherini, que generalmente mantiene un tono optimista, en esta obra sabe hacer buen uso de los estereotipos dram¨¢ticos, resultando su car¨¢cter dram¨¢tico totalmente convincente.

Actuaron como solistas la soprano Mar¨ªa Angeles Peters, que posee una voz muy bella, joven y llena de frescura; el registro medio le suena muy bien, pero en el agudo se le nota algo el timbre nasal, y depende de la vocal con la que trabaje para que esta nasalizaci¨®n sea m¨¢s o menos evidente.

Como segunda soprano intervino Carmen Mart¨ªnez, con timbre algo apagado y bien diferenciado en el plano solista, pero que, al fusionarse en el tr¨ªo, su voz se difumina, resultando dificil su identificaci¨®n. El tenor Santiago Sansaloni tuvo una clara intenci¨®n de fraseo que mientras la tesitura le era c¨®moda conservaba un buen timbre l¨ªrico, presentando alg¨²n peque?o problema de cambio.

La orquesta, por su parte, realiz¨® una versi¨®n lineal con alg¨²n peque?o desajuste entre ella y los cantantes, y dentro de ella misma, que quiz¨¢ se podr¨ªa atribuir a la premura en su preparaci¨®n. Completaban el programa en su primera parte extractos del ballet L'Alcidian de Lully, para trompetas, percusi¨®n y cuerda; el concierto para orquesta de cuerda en La mayor, de Vivaldi, y el Divertimento para orquesta de cuerda en Fa mayor, de Mozart. En la interpretaci¨®n de estas obras, la orquesta demostr¨® buen sonido, empaste y afinaci¨®n, quiz¨¢ el continuo se o¨ªa demasiado, pero esto es atribuible a su situaci¨®n y a las caracter¨ªsticas ac¨²sticas del lugar; el fraseo estil¨ªstico no siempre estuvo presente, pero cuando lo estuvo fue muy apropiado, siendo, en un conjunto, una orquesta de c¨¢mara m¨¢s que aceptable y con grandes posibilidades.

Como dato curioso diremos que, a pesar de que la casa grabadora Arion presenta la obra como primera grabaci¨®n mundial, ha llegado a nuestras manos una grabaci¨®n de esta misma obra realizada en 1974, en Estados Unidos, por The Musical Heritage Society Inc., de Nueva York. Versi¨®n interpretada por la orquesta de c¨¢mara Genovesa, dirigida por Ivan Polidori, en la que act¨²an como solistas Carmen Vilalta, Rita Auvinen y Giorgio Marelli.