Mineros y rehenes abandonaron su encierro en el pozo "Julia", de Antracitas de Fabero

A las cinco de la madrugada de ayer finaliz¨® el encierro de los mineros del pozo Julia, que manten¨ªan como rehenes a cuatro t¨¦cnicos de Antracitas de Fabero y de la Jefatura Provincial de Minas. Los trabajadores han aceptado la promesa de la Administraci¨®n de hacer efectivos a partir de ma?ana los salarios de abril y mayo con cargo al Fondo de Garant¨ªa Salarial, saldando as¨ª la totalidad de las deudas de la empresa para con los trabajadores (la mensualidad de marzo comenz¨® a pagarse hace dos d¨ªas). Han finalizado tambi¨¦n los encierros de solidaridad que se manten¨ªan desde el comienzo de la semana en varias explotaciones de la zona pertenecientes a Antracitas de Gaiztarro y a la Minero Sider¨²rgica de Ponferrada.

Los mineros abandonaron el pozo Julia sin que se produjera ning¨²n tipo de incidentes, dejando en libertad a los cuatro detenidos y facultativos de minas y dirigi¨¦ndose inmediatamente despu¨¦s a sus casas. El estado de salud de unos y otros es bueno, seg¨²n una fuente de CCOO, que a?adi¨® que no se esperaba ning¨²n tipo de acciones judiciales contra los trabajadores por parte de la empresa y del Gobierno Civil. El trato recibido por los rehenes ha sido igualmente bueno, seg¨²n las mismas fuentes.Se espera que a partir de hoy vuelva la normalidad a la totalidad de las minas del Bierzo, tras el pago de los salarios correspondientes al pasado mes de mayo, que se har¨¢n efectivos con los ochocientos millones de pesetas recientemente transferidos por Endesa a las empresas mineras. Tanto la patronal como las centrales sindicales consideran que la soluci¨®n dada al conflicto no es sino un ?parche? provisional que s¨®lo contribuye a retrasar el problema hasta que dentro de un mes tengan que pagarse los salarios de junio. La Administraci¨®n, por su parte, ha prometido que en este per¨ªodo de tiempo ofrecer¨¢ una soluci¨®n definitiva a los impagos de Endesa, propietaria de la central t¨¦rmica de Compostilla, que todav¨ªa adeuda a las minas otros 2.000 millones de pesetas.

Empresarios y trabajadores han acusado al Gobierno de no haber valorado suficientemente el problema, empujando a los mineros hacia posturas radicales y desoyendo las protestas de unos y otros. Todas las partes coinciden en valorar negativamente el hecho de que la Administraci¨®n haya tenido que actuar apresuradamente ante el secuestro de los t¨¦cnicos antes citados, cuando las mismas soluciones podr¨ªan haberse adoptado hace ya varias semanas.

Por su parte, las centrales sindicales mayoritarias, CCOO y UGT, parecen haber recuperado el control de la situaci¨®n tras acusar en los primeros momentos a ?grupos minoritarios? no identificados de intentar radicalizar el conflicto. Hay que recordar al respecto que durante una rueda de prensa celebrada a ra¨ªz de un enfrentamiento entre los mineros y la Guardia Civil en el t¨¦rmino municipal de Vega de Espinareda, localidad pr¨®xima a Fabero, tanto CCOO como UGT dijeron no apoyar el secuestro de los cuatro ingenieros y facultativos de minas, aunque tampoco lo condenaron expl¨ªcitamente para evitar la ruptura con los trabajadores.