Ahorro energ¨¦tico

? ( ... ) Las tensiones creadas internacionalmente en el campo de la energ¨ªa por las crecientes alzas de los precios del petr¨®leo, tienen en nuestro pa¨ªs expresiones dram¨¢ticas, porque nuestra dependencia del oro negro se ha ido haciendo cada vez m¨¢s fuerte, hasta llegar a l¨ªmites insoportables para nuestra depauperada econom¨ªa. Hoy ya no nos es posible resistir m¨¢s y hemos de rendirnos a la evidencia de nuestra incapacidad para mantener los altos ¨ªndices de consumo de petr¨®leo que se han venido registrando en los ¨²ltimos cinco a?os ( ... )La situaci¨®n ha llegado a tal extremo que, no s¨®lo nos vemos forzados a renunciar a que siga creciendo nuestro consumo de petr¨®leo, sino que -lo que es mucho m¨¢s duro y nos exigir¨¢ costosos sacrificios- hemos de reducirlo considerablemente. ( ... )

Pa¨ªses mucho m¨¢s poderosos que el nuestro y hasta con m¨¢s recursos energ¨¦ticos, incluso de petr¨®leo, han reaccionado con admirable firmeza para introducir en sus planes de consumo de energ¨ªa una dr¨¢stica reducci¨®n de productos petrol¨ªferos mediante programas de ahorro y el aprovechamiento creciente de otras fuentes alternativas. En la misma medida en que haya de irse reduciendo el consumo de petr¨®leo ha de ir increment¨¢ndose la aplicaci¨®n de otros recursos, porque de lo que se trata no es de renunciar a la expansi¨®n de la econom¨ªa, sino de que esta expansi¨®n se siga apoyando de modo fundamental en algo tan costoso y progresivamente tan escaso como el petr¨®leo. )?

26 de julio