Se agudiza la oposici¨®n al desmantelamiento de Ensidesa en Mieres

Los trabajadores de Ensidesa-Mieres han intensificado sus acciones de protesta contra el desmantelamiento de la factor¨ªa, en v¨ªsperas de la huelga de veinticuatro horas convocada para el pr¨®ximo jueves, que afectar¨¢ a todas las instalaciones asturianas de la empresa sider¨²rgica nacional. En los ¨²ltimos d¨ªas se suceden concentraciones en Mieres y desde ayer los trabajadores de esta planta mantienen hasta el mi¨¦rcoles una huelga de dos horas diarias.La direcci¨®n de la empresa ha manifestado ya el traslado de los 720 productores de la plantilla.

Hace d¨ªas, la Corporaci¨®n municipal de Mieres acord¨® rechazar rotundamente el plan del Ministerio de Industria y Energ¨ªa relativo al desmantelamiento de las instalaciones obsoletas de Ensidesa en este municipio. El pasado lunes, representantes de la direcci¨®n anunciaron al comit¨¦ de empresa algunas variantes en relaci¨®n al planteamiento inicial, consistentes fundamentalmente en el traslado de los 720 trabajadores de la factor¨ªa mierense a la planta de Veri?a (Gij¨®n) y el establecimiento en Mieres de trescientos puestos de trabajo promovidos por Ensidesa, pero que no pertenecer¨ªan necesariamente a la empresa sider¨²rgica, sino a otra de titularidad jur¨ªdica distinta. Este nuevo enfoque del problema ha sido considerado a¨²n m¨¢s regresivo que el anterior por los trabajadores, quienes exigen que los puestos no sean inferiores a los que desaparecen con el cierre de la factor¨ªa y que adem¨¢s sean de propiedad p¨²blica. El Ministerio de Industria entiende que la bater¨ªa ha agotado su vida t¨¦cnica y que, en consecuencia, su parada no debe posponerse al pr¨®ximo mes de septiembre. El tren de chapa, instalaci¨®n obsoleta ligada a las posibilidades del mercado de este producto, ser¨¢ cerrado dentro de este mismo a?o. Para llevar a cabo esta operaci¨®n, Industria garantiza el puesto a los 720 trabajadores, que ser¨¢n trasladados, y se compromete a organizar el suelo industrial de la antigua f¨¢brica de Mieres, a montar un taller de reparaci¨®n de vagones y material m¨®vil, que dar¨¢ empleo a 131 trabajadores para marzo de 1980, y a crear un taller de reparaciones generales, con 170 puestos de trabajo, para junio de 1981. Ser¨¢n promovidas adem¨¢s dos empresas con participaci¨®n privada (recargues de soldadura y preparaci¨®n de aceite), que aportar¨¢n 75 puestos de trabajo. La inversi¨®n prevista para estos proyectos asciende a unos mil millones de pesetas.

Mieres, municipio de la cuenca del Caudal, en la zona central de Asturias, fue, con altibajos, una de las zonas m¨¢s pr¨®speras del pa¨ªs desde la segunda mitad del siglo pasado hasta la puesta en marcha del plan de estabilizaci¨®n en 1959. El desarrollo del sector hullero durante el ¨²ltimo tercio del siglo pasado y su poder de atracci¨®n de la industria sider¨²rgica transformaron radicalmente Mieres, que pas¨® de ser una villa campesina a una sociedad urbana e industrial con fuerte incremento demogr¨¢fico. La f¨¢brica de Mieres, que ahora va a ser totalmente desmantelada, fue la primera de Espa?a en quemar carb¨®n de coque en sus hornos, en el a?o 1848. El envejecimiento de sus instalaciones, la progresiva descapitalizaci¨®n, la competencia del acero europeo y la constituci¨®n de Uninsa en Gij¨®n desplazaron definitivamente la actividad sider¨²rgica e industrial del tri¨¢ngulo Oviedo-Mieres-La Felguera al tri¨¢ngulo Oviedo-Gij¨®n-Avil¨¦s.