Los agricultores podr¨¢n vender directamente en los puestos municipales de los mercados

La anunciada colaboraci¨®n entre el Fondo de Ordenaci¨®n y Regulaci¨®n de Precios y Productos Agrarios (FORPPA) y el Ayuntamiento de Madrid va a intentar colocar en el mercado madrile?o de la alimentaci¨®n una serie de productos agrarios producidos por diversas cooperativas, evitando la aparici¨®n de los intermediarios. Con esta operaci¨®n, tanto el organismo de la Administraci¨®n central -el FORPPA depende del Ministerio de Agricultura-, como el propio Ayuntamiento esperan conseguir una sensible reducci¨®n en los precios al consumo de los productos agrarios

El Ayuntamiento de Madrid dispone, en cada mercado municipal de distrito y en aquellos mercados que sin ser municipales necesitan de una concesi¨®n de la Corporaci¨®n, de una serie de puestos llamados de reserva, destinados, en principio, a que sean los propios agricultores los que vendan sus productos directamente a los consumidores. Estos puestos, por los que habr¨ªa de pagarse una muy baja tasa, permanecen, sin embargo, en su gran mayor¨ªa, sin ser ocupados.Adem¨¢s, en los mercados de distrito y en las galer¨ªas de alimentaci¨®n existen una serie de puestos normales que, por las razones que sean, permanecen libres, sin que nadie los alquile. Esos dos tipos de puestos en los mercados, los de reserva no ocupados y los libres, van a ser puestos a disposici¨®n del FORPPA por parte del Ayuntamiento, una vez haya sido puesto al d¨ªa un inventario de todos ellos.

El organismo ministerial, a su vez, los ofertar¨¢ a cooperativas de agricultores que, por reunir unas determinadas caracter¨ªsticas, puedan ser homologadas para este fin por el FORPPA. La concesi¨®n de estos puestos se har¨¢ por una doble autorizaci¨®n -la del FORPPA y la del Ayuntamiento-, para propiciar que, en un momento dado, tanto una parte como la otra puedan rescindir la contrataci¨®n de los puestos, en el caso de que el fin para el que fueron alquilados no fuera cumplido por los agricultores. Adem¨¢s, la ocupaci¨®n de los puestos no se har¨¢ en forma gratuita, sino que cada cooperativa que acceda a venir a Madrid para vender sus productos directamente habr¨¢ de pagar estrictamente todos los c¨¢nones previstos, si bien en el caso de los puestos de reserva ¨¦stos son menores.

La principal caracter¨ªstica que deber¨¢n cumplir las cooperativas que vengan a Madrid a vender sus productos ser¨¢ la de poder ofertar, en cada estaci¨®n del a?o, productos propios de la misma. Es decir, no se trata de que, en un momento dado, una cooperativa ofrezca al consumidor un solo producto estacional -por ejemplo, en verano, los melones-, sino que su capacidad de producci¨®n abarque diversos productos a lo largo de todo el a?o.

Reducci¨®n en el precio

Evidentemente, si las cooperativas de agricultores, gracias a este sistema, pueden hacer llegar a Madrid sus productos, evitando todos los escalones intermedios de la cadena de comercializaci¨®n -los conocidos intermediarios-, el precio al que pueden ser ofrecidos los productos a los consumidores ser¨¢ mucho menor del que vienen pagando hasta ahora.Para el FORPPA y para el Ayuntamiento, en el momento en que existan en la ciudad una serie de puestos que ofrezcan un determinado producto mucho m¨¢s barato -gracias a este nuevo canal paralelo de abastecimiento-, los canales normales de comercializaci¨®n -distribuidores, mayoristas, mercados centrales habr¨¢n de reducir sus precios, dentro de una pura teor¨ªa de competencia en la ley de la oferta y la demanda.

Adem¨¢s, algunas cooperativas con una elevada capacidad de producci¨®n podr¨¢n acceder no ya a vender sus productos directamente al consumidor en los mercados de distrito, sino tambi¨¦n a convertirse en mayoristas y realizar sus ofertas en el mercado central a los detallistas madrile?os. Tambi¨¦n en este caso la reducci¨®n en el precio ser¨¢ notable, por la misma raz¨®n que antes: se evitan los intermediarios que, hasta ahora, colocan la producci¨®n agr¨ªcola en la ciudad.

D¨ªas dedicados a un producto

Tanto en el caso de la venta directa en los mercados de distrito como en el de la venta a los detallistas en el mercado central ser¨¢n las cooperativas de agricultores con una gran capacidad de producci¨®n (y, por supuesto, de cobertura de todo el ciclo anual) las que tengan acceso a este nuevo sistema de venta que el FORPPA y el Ayuntamiento pretenden poner en marcha. Quedan excluidos, por tanto, los peque?os agricultores con una menor producci¨®n que, en raz¨®n directa, no pueden atender una demanda como la que produce Madrid.Sin embargo, estos peque?os agricultores tendr¨¢n tambi¨¦n su oportunidad de acceder a la venta directa en la ciudad: en el momento en que se haya producido un excedente excesivo de un determinado producto, el Ayuntamiento, dentro de su colaboraci¨®n con el Ministerio de Agricultura, organizar¨¢ un d¨ªa monogr¨¢fico de ese determinado producto excedente. En ese momento, los agricultores que tengan en su poder ese determinado producto excedente podr¨¢n venderlo por las calles de la ciudad, siempre bajo el control municipal.

Esta venta callejera de productos agr¨ªcolas excedentarios est¨¢ en relaci¨®n directa con la ordenanza que el Ayuntamiento est¨¢ preparando para regular la venta ambulante y que tanta pol¨¦mica suscit¨® entre los comerciantes establecidos. Sin embargo, esos d¨ªas monogr¨¢ficos no supondr¨¢n una venta incontrolada, sino que lo ser¨¢ siempre bajo el control sanitario y fiscal del Ayuntamiento. Su ¨²nica intenci¨®n estar¨¢, pues, en regular los precios que rijan con respecto a un determinado producto, de la misma forma que la venta directa de los productos agr¨ªcolas en los mercados de distrito.

Toda esta campa?a, nacida de la colaboraci¨®n propuesta entre el FORPPA y el Ayuntamiento s¨®lo tiene una intenci¨®n: reducir los precios que el madrile?o tiene que pagar por los productos alimenticios, independientemente del que cobren los agricultores; es decir, evitar los intermediarios, que hacen encarecer ese producto.

Carne barata

Pero al margen de los productos puramente agr¨ªcolas, a¨²n queda otra faceta en la que se proponen colaborar el FORPPA y el Ayuntamiento. Se trata de la carne.La colaboraci¨®n en este campo se basa en un hecho bien simple: el Matadero Municipal de Madrid tiene unos excedentes de sacrificio con muy dif¨ªcil salida comercial. Esos excedentes ser¨¢n comprados por el FORPPA, en el momento en que se encuentren un precio bajo, para, en el momento en que la carne comprada aumente de precio, sacarla al mercado al mismo precio que reg¨ªa cuando fue adquirida en el Matadero Municipal.