Direcci¨®n y trabajadores de Aceros de Llodio presentan al Gobierno un plan de saneamiento
El director general de Aceros de Llodio, SA, junto con dos miembros del comit¨¦ de empresa, entreg¨® a la vicepresidencia del Gobierno para Asuntos Econ¨®micos y a la Direcci¨®n General de Industrias Siderometal¨²rgicas el texto del ?documento de intenciones ?exigido por el Gobierno para la concesi¨®n de un cr¨¦dito oficial de seiscientos millones de pesetas.
A¨²n no est¨¢ concretado con cargo a qu¨¦ concepto se har¨¢ la entrega por el Gobierno, aunque se cree que el dinero podr¨ªa salir del plan de ayuda a la siderurgia no integral, con las garant¨ªas por parte de la empresa de las entregas que debe hacer el Gobierno en concepto de cr¨¦dito a la exportaci¨®n (unos trescientos millones) y por las inversiones realizadas hasta ahora en la empresa dentro de la primera parte del plan de acci¨®n concertada (se han gastado 1.600 millones y el cr¨¦dito por este concepto ser¨ªa el 40% de esa cantidad: cuatrocientos millones).La elaboraci¨®n del documento -denominado ?de intenciones? por el Gobierno- comenz¨® con una propuesta de la direcci¨®n de la empresa, que fue contestada con una contrapropuesta del comit¨¦ la semana pasada. ?Despu¨¦s de ser discutida la contrapropuesta?, seg¨²n nota del comit¨¦, la direcci¨®n acept¨® las variaciones propuestas por los trabajadores. Esta versi¨®n del documento fue puesta a votaci¨®n de la plantilla el pasado martes. Votaron el 75 % de los 1.890 trabajadores, y fueron votos favorables al texto propuesto el 80%. Una cuarta parte de la plantilla (555 obreros) no estaba en la f¨¢brica, debido a la regulaci¨®n de jornada.
Ninguna de las partes ha accedido a hacer p¨²blico el documento antes de que sea conocido por los ministros responsables; pero se sabe que consta de nueve puntos, en los que, adem¨¢s de las condiciones de productividad, se concede una posibilidad de subida salarial del 11 % (a finales de a?o debe negociarse un nuevo convenio), se asegura la defensa de los puestos de trabajo actuales y se otorgan una serie de derechos sociales.
El contenido de las garant¨ªas econ¨®micas podr¨ªa ser, de acuerdo con las previsiones recientes que ha dado a conocer la empresa, que sin contar con la amortizaci¨®n de los cr¨¦ditos necesarios para las inversiones hechas a partir de julio, el balance de la empresa comienza a generar capacidad de autofinanciaci¨®n. De mantenerse esta tendencia de recuperaci¨®n, se cree que se cumplir¨¢n las previsiones para 1979, de aumentar en un 25% la productividad por hora trabajada, y comenzar a conseguir beneficios o al menos no tener resultados negativos a partir de 1980.
Estas perspectivas de productividad -conseguidas con el funcionamiento del nuevo equipo y la reducci¨®n de jornada- deben ir acompa?adas de un sostenimiento del mercado y de la ayuda financiera del Gobierno. Parece que la aportaci¨®n de cr¨¦dito bancario, a pesar de que algunos paquetes de acciones est¨¦n controlados por bancos, es dif¨ªcil y sus precios no son soportables para la empresa. Se esperan nuevas ayudas de las cajas de ahorro de Bilbao y Vitoria. De cualquier forma, el cr¨¦dito del Gobierno se considera la ¨²ltima posibilidad de poder financiar el plan de saneamiento.
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