"Yo he abortado voluntariamente", declaran mil trescientas mujeres
?Yo he abortado voluntariamente. ? As¨ª lo declaran, en un documento dirigido a la opini¨®n p¨²blica, m¨¢s de 1.300 mujeres, entre las que figuran conocidas actrices, cantantes, m¨¦dicas, abogadas, pol¨ªticas, profesoras, escritoras y periodistas. Las firmantes se?alan que ante el juicio de oncemujeres en Bilbao el pr¨®ximo d¨ªa 26, por haber interrumpido su embarazo, ?conscientes de las consecuencias y de las repercusiones penales que nos pueda reportar?, han decidido declarar p¨²blicamente que ellas tambi¨¦n han abortado de forma voluntaria.
El escrito alude tambi¨¦n a las recientes detenciones de Sarda?ola por el mismo motivo y exige la amnist¨ªa de todas las mujeres y hombres encausados por aborto, la inmediata libertad sin fianza de los detenidos por esta causa y un cambio de la legislaci¨®n que contemple el derecho al aborto libre y gratuito.La iniciativa de recogida de firmas naci¨® en Barcelona, y en menos de 72 horas las organizadoras consiguieron la solidaridad de 1.357 mujeres residentes en todo el territorio nacional. La recogida de firmas proseguir¨¢ en los pr¨®ximos d¨ªas, aunque el comunicado ya fue hecho p¨²blico ayer.
Con la declaraci¨®n expresa de haber abortado, las firmantes ponen de manifiesto un hecho, a su juicio, escandaloso: ninguna de las 1.300 firmantes puede ser procesada ni detenida si declara que abort¨® en Londres, en Arnsterdam o en cualquier capital europea en la que la interrupci¨®n del embarazo est¨¦ despenalizada, porque la jurisdicci¨®n penal espa?ola alcanza, l¨®gicamente, s¨®lo a hechos sucedidos en el territorio nacional, en cuyo supuesto, al ser un delito perseguible de oficio, la autoridad judicial -y concretamente, el ministerio fiscal- deber¨¢ solicitar la incoaci¨®n de las actuaciones judiciales pertinentes para su esclarecimiento. ?Resulta evidente que la justicia espa?ola est¨¢ condenando a mujeres por el solo hecho de no haber tenido las 40.000 pesetas que cuesta abortar en Gran Breta?a, por ejemplo. ?
Iniciativa similar en Francia
Una iniciativa semejante fue adoptada en su d¨ªa en Francia, donde los movimientos feministas provocaron un esc¨¢ndalo al publicar en la prensa-un comunicado an¨¢logo, encabezado por la escritora Simone de Beauvoir y la actriz Rommy Schneider. Finalmente, el Gobierno franc¨¦s acept¨® modificar su legislaci¨®n y regular la pr¨¢ctica del aborto. El proyecto de ley fue elaborado y defendido por la actual presidenta del Parlamento Europeo y entonces ministra para la Salud, Simone Veil.La situaci¨®n legal del aborto en el resto del mundo es la siguiente: un 36% de los pa¨ªses autorizan el aborto por mera solicitud; un 24% lo admite por razones sociales; un 16% lo autoriza s¨®lo por razones eugen¨¦sicas, m¨¦dicas y humanitarias; un 13%, en el caso de que la vida de la madre est¨¦ en peligro, y s¨®lo en un 8% es completamente ilegal.
Recientemente, la Comisi¨®n de Codificaci¨®n del Ministerio de Justicia estudi¨® el tratamiento que el C¨®digo Penal espa?ol concede a las pr¨¢cticas abortivas. Uno de los miembros de la Comisi¨®n, el catedr¨¢tico de Derecho Penal Enrique Gimbernat, propuso que se despenalizara, pero su voto fue ¨²nico. Uni¨®n de Centro Democr¨¢tico (UCD) replic¨® inmediatamente que el Gobierno no contemplaba siquiera tal posibilidad.
Trescientos mil abortos anuales
Aunque resulta imposible obtener cifras fidedignas sobre el n¨²mero de abortos que realizan en Espa?a a lo largo de un a?o, se estima que podr¨ªa rondar los 300.000. Gracias a un informe publicado por el Gobierno de Gran Breta?a, se sabe que, en 1977, 10.000 espa?olas viajaron a Londres para interrumpir su embarazo y que esa cifra supuso un 69% de incremento sobre el n¨²mero de espa?olas que abort¨® en Inglaterra durante 1976. A ra¨ªz de la publicaci¨®n de estos datos, grupos feministas iniciaron una campa?a y obtuvieron el apoyo p¨²blico de doscientas personalidades del mundo de las artes y las letras, la medicina y la pol¨ªtica.De los partidos pol¨ªticos espa?oles, Alianza Popular y UCD se han mostrado contrarios no ya a su regulaci¨®n, sino tan siquiera a su despenalizaci¨®n, aunque sectores del partido centrista estiman que tal vez ser¨ªa posible regularlo para casos extremos de peligro de muerte para la madre, o de violaci¨®n.
En la izquierda parlamentaria s¨®lo el Partido Comunista de Espa?a (PCE) mantuvo en su programa electoral la necesidad de regular ?la interrupci¨®n del embarazo bajo control m¨¦dico y en los t¨¦rminos que marque la ley?. El Partido Socialista Obrero Espa?ol parte de una posici¨®n inicial favorable a la legalizaci¨®n del aborto, pero en su ¨²ltimo programa electoral no figuraba la menor alusi¨®n al tema.
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