Desmentido un supuesto plan masivo de fuga en la c¨¢rcel de Carabanchel

El director de la prisi¨®n provincial de Carabanchel, Eusebio Hern¨¢ndez Rueda, desminti¨® ayer a EL PAIS la noticia del un intento de fuga colectiva en dicho centro penitenciario, que hab¨ªa sido difundida d¨ªas atr¨¢s por alg¨²n medio informativo de la capital. El se?or Hern¨¢ndez Rueda reconoci¨® que en el interior de la prisi¨®n hab¨ªa sido incautada una cuerda y que hab¨ªa sido hallado un barrote, si bien ?tales hallazgos s¨®lo pueden relacionarse con alg¨²n intento aislado de huida; nunca con una evasi¨®n multitudinaria?.

La noticia desmentida por el se?or Hern¨¢ndez Rueda apuntaba la preparaci¨®n de una fuga de un elevado n¨²mero de los reclusos en la c¨¢rcel de Carabanchel, donde actualmente est¨¢n confinados 983 hombres. Seg¨²n recordaba el propio director, las primeras informaciones denunciaban un plan de fuga a trav¨¦s de la red de alcantarillado del barrio de La China. ?Nosotros nunca consideramos que una fuga de ese tipo pudiera consumarse en este centro, dadas las caracter¨ªsticas del centro y de la red por eso no concedimos un cr¨¦dito excesivo a las afirmaciones. Sin embargo, y por si la noticia pudiera ser parcialmente cierta, extremamos nuestras medidas de seguridad.?El centro penitenciario de Carabanchel est¨¢ sometido habitualmente a una doble acci¨®n de vigilancia; en el interior, por parte de la dotaci¨®n de funcionarios, y en el exterior, a cargo de unidades de la Guardia Civil. La operaci¨®n de fuga que se anunciaba en d¨ªas pasados exig¨ªa, adem¨¢s de una larga y complej¨ªsima preparaci¨®n por parte de los reclusos y un apoyo desde el exterior, la participaci¨®n de una unidad de vigilancia especial en los trabajos de detecci¨®n de galer¨ªas o de otros procedimientos de huida.

En palabras del director de la c¨¢rcel de Carabanchel, ?todos esos trabajos de b¨²squeda fueron infructuosos. Se limitaron a corroborar que el intento de fuga a trav¨¦s de la red de alcantarillado era como hab¨ªamos supuesto quienes conocemos las interioridades del centro. Por lo que respecta a los trabajos de detecci¨®n dentro de las instalaciones, descubrimos un barrote y una soga de doce metros de largo, confeccionada con tiras de manta. Evidentemente, estos efectos denunciaban un intento de fuga, pero un intento individual, nunca una evasi¨®n colectiva en los t¨¦rminos en que se apuntaba en las noticias. Hay que a?adir que el hallazgo de la soga y el barrote tampoco es un hecho alarmante en s¨ª mismo; en una prisi¨®n como ¨¦sta, tales descubrimientos son bastante frecuentes?.