Cuatro sectores del PSC-PSOE han constituido coordinadoras propias

El poder real en el seno del PSC-PSOE se basa en la existencia de cuatro comisiones coordinadoras, creadas al margen de los procedimientos estatutarios, seg¨²n informaron a EL PAIS miembros de cada una de ellas. Las fuentes coincidieron en destacar que el poder y los debates reales pasaban por estas coordinadoras, ante las cuales la direcci¨®n del partido se siente impotente. A las reuniones de, por lo menos, tres de estas coordinadoras asisten miembros de la comisi¨®n ejecutiva del PSC-PSOE, ¨®rgano m¨¢ximo del partido.

Las coordinadoras son las siguientes. Una denominada ?del ex PSOE y UGT?, integrada, como indica su nombre, por antiguos altos cargos de la te¨®ricamente disuelta federaci¨®n socialista catalana del PSOE, as¨ª como miembros de la direcci¨®n de la UGT catalana, procedentes tambi¨¦n de aquella federaci¨®n. Los nombres de los adscritos a esta coordinadora, entre los que figuran miembros de la actual ejecutiva socialista catalana, fueron detallados a este diario. Esta coordinadora es totalmente dominante en el terreno sindical y en los sectores obreros del partido; publica unos trabajos denominados ?documentos socialistas?, de los cuales han aparecido por lo menos dos, en los que se ataca duramente al ?grupo Obiols?.

La segunda coordinadora se aglutina en torno al diputado Josep M. (Raimon) Obiols y los antiguos ?frontistas? del tambi¨¦n te¨®ricamente disuelto PSC-C (Ferreiro y Sala, esencialmente). Recibe el nombre de coordinadora ?obiolista? o del ex PSC-C. Su fuerza es importante entre la millitancia barcelonesa del partido. Con las recientes sanciones en el seno (le la UGT se ha quedado sin ninguna fuerza en medios obreros.

La tercera coordinadora es la del denominado ?sector cr¨ªtico del PSOE?. Esta es la ¨²nica que tiene una clara equivalencia, e incluso integraci¨®n, a nivel estatal, con el denominado ?sector cr¨ªtico" del PSOE, derrotado en el ¨²ltimo congreso. Se re¨²ne todos los mi¨¦rcoles. Su fuerza es muy inferior a la de las dos coordinadoras ya rese?adas y se halla en los sectores obreros del Bajo Llobregat, pero la posibilidad de pactos con unos u otros la sit¨²a en posici¨®n privilegiada. Tiene un ¨²nico representante en la ejecutiva socialista. Esta tendencia hizo ayer un documento en el que afirma: ?Nos encontramos dentro de una crisis interna, tanto en el sindicato como en el partido?. A lo que agrega. ?En la actual coyuntura todos hemos de reconocer nuestros errores, no haber dado participaci¨®n a la base, no haber dado cauce a las ilusiones de amplias capas de los trabajadores. ?

La cuarta coordinadora es la menos importante, pero el hecho de pactar con Obiols y sus seguidores en momentos clave permiti¨® victorias de aqu¨¦llos. As¨ª sucedi¨® en la conferencia destinada a elegir los delegados al congreso estatal del PSOE y en la elecci¨®n de la ejecutiva de Barcelona del PSC-PSOE. Recibe el nombre de coordinadora de ?los cr¨ªticos del PSC-C?. La forman antiguos militantes de extrema izquierda, agrupados en torno a Diego F¨¢bregas, ex secretario general del partido extraparlamentario Organizaci¨®n de la Izquierda Comunista (OIC). Su fuerza, muy limitada al n¨²cleo urbano de Barcelona, parte del fuerte grado de actividad personal de sus escasos miembros.

Ultimamente se ha dado adem¨¢s un proceso de b¨²squeda de pactos entre las coordinadoras, con el fin de imponer los criterios que pod¨ªan resultar de los pactos a las dem¨¢s fracciones del partido. As¨ª, el lunes de la semana pasada tuvo efecto una reuni¨®n de seis miembros de la coordinadora de los cr¨ªticos del PSOE con los obiolistas. La finalidad era intentar lanzar una ofensiva en contra de la. coordinadora del PSOE-UGT. Se acord¨® otra reuni¨®n de representantes de ambas coordinadoras para el pr¨®ximo viernes.

Pero, al conocer estas posibilidades de pacto, miembros de la coordinadora del ex PSOE-UGT se apresuraron a buscar una reuni¨®n con los cr¨ªticos del PSOE, que se materializar¨¢ en breve.

Revent¨®s, al margen

Al margen de todo este complicado mundo de coordinadoras se sit¨²a, en primer lugar, Joan Revent¨®s, pero tambi¨¦n todos los altos cargos del PSC-PSOE procedentes del PSC-C (Narcis Serra, Ernest Lluch, Eduardo Mart¨ªn y Lluis Armet, entre otros), pero con la importante excepci¨®n de Obiols, cuyos seguidores son ya figuras menos relevantes del ex PSC-C, si bien cuenta con tres miembros de la ejecutiva (Jove, Sala y Ferreiro).

Los antiguos dirigentes del PSC-C, que se sit¨²an al lado de Revent¨®s y al margen del conflicto, ven, en, algunos casos, con poco disimulada satisfacci¨®n que Obiols se vaya adentrando en un callej¨®n sin salida, en unos momentos en que el posible acceso de Revent¨®s a la presidencia de la Generalidad obligue a designar un nuevo secretario general. Compa?ero y colaborador director de Revent¨®s desde los tiempos de las luchas universitarias, Obiols estuvo mejor situado que nadie para sustituirle, pero ahora no posee ni la m¨¢s remota posibilidad, mientras que incluso su relaci¨®n personal con Revent¨®s ha quedado debilitada. La gran acusaci¨®n de la que es objeto Obiols es la de haber generado un proceso de mayor¨ªas y minor¨ªas que, como se ve, ha puesto al partido al borde de la divisi¨®n total en, por lo menos, los dos colectivos b¨¢sicos de cuya fusi¨®n naci¨®, el PSOE catal¨¢n y el PSC-C. Adem¨¢s, ?si al socialismo catal¨¢n lo representara Obiols, la UGT de Catalu?a dejar¨ªa de ser un sindicato socialista?, afirm¨® a este diario un dirigente de esta central.

La ¨²nica posibilidad de evitar una derrota del sector obiolista es una intervenci¨®n directa de Felipe Gonz¨¢lez y la direcci¨®n estatal del PSOE. Esta posibilidad -en la que cre¨ªan firmemente los obiolistas consultados ayer por este diario- aparec¨ªa anoche como poco posible. Las mayores probabilidades apuntaban hacia la marginaci¨®n pol¨ªtica de Obiols y una recomposici¨®n del equilibrio unitario que dio lugar al nacimiento del partido, con el inmediato abandono del peligroso juego de enfrentar minor¨ªas y mayor¨ªas en el seno de un partido a¨²n demasiado joven para algo tan peligroso. Por otro lado, la proximidad de las elecciones al Parlamento catal¨¢n obliga a tomar, si a¨²n existe, el camino del pacto.