El Ayuntamiento de Barcelona estudia posibles acciones por las irregularidades en el Metro
El Ayuntamiento de Barcelona remiti¨® los doce vol¨²menes que integran la auditor¨ªa del Metro de la Ciudad Condal a los servicios jur¨ªdicos del propio Ayuntamiento. Estos servicios deber¨¢n dar su opini¨®n sobre la forma de obrar en el terreno legal. Concretamente, habr¨¢n de dictaminar si encuentran materia para remitir la auditor¨ªa al ministerio fiscal o incluso presentar una querella criminal.
Otra posible actuaci¨®n -seg¨²n fuentes responsables- ser¨ªa el solicitar de antiguos altos cargos de la compa?¨ªa. la devoluci¨®n de parte de los haberes percibidos durante sus mandatos. En el centro de este tema, las fuentes sit¨²an a Miguel Cabre Llistosella, quien fue director general del Metro y tambi¨¦n de los autobuses municipales bajo el mandato del alcalde franquista Jos¨¦ Mar¨ªa de Porcioles.El sueldo anual percibido por ambas funciones, por Miguel Cabre, en 1976, fue de 7.400.000 pesetas. Las fuentes consideran que posiblemente hubiese tenido que percibir ¨²nicamente el sueldo correspondiente a una de las dos funciones, es decir, aproximadamente la mitad de lo percibido. Sobre este particular, el Ayuntamiento y el consejo de administraci¨®n del Metro deber¨¢n pronunciarse en los pr¨®ximos d¨ªas.
Curiosamente, Miguel Cabre acumulaba dichas funciones en el terreno del transporte p¨²blico con la de presidente del sal¨®n internacional del autom¨®vil de Barcelona, instituci¨®n que est¨¢ b¨¢sicamente al servicio del autom¨®vil como veh¨ªculo de transporte privado. Al ser cesado Cabre por Soc¨ªas, acept¨® una jubilaci¨®n que representa s¨®lo una cuarta parte de lo que le correspond¨ªa seg¨²n un id¨ªlico contrato suscrito con el Ayuntamiento, cuando ¨¦ste era encabezado por Porcioles.
Otro punto de inter¨¦s es la apancion en la colocaci¨®n de por lo menos una emisi¨®n de obligaciones del Metro -por importe de 2.000 millones de pesetas-, de Emilio Alberto Hap Dubois, quien pertenec¨ªa ¨²nicamente a la compa?¨ªa de autobuses. Hap, de ongen vietnamita, y actualmente c¨®nsul honorario de Campuchea, en Barcelona, fue cesado fulminantemente bajo el alcalde Socias. Actualmente su contrato de prestaci¨®n de servicios es objeto de una demanda de nulidad presentada por el municipio, a trav¨¦s del bufete del profesor Rafael Jim¨¦nez de Parga.
En la auditor¨ªa, el nombre de Hap va unido al de un intermediario financiero llamado Diego Reyes Silva, as¨ª como a una financiera denominada Intra Am¨¦rica Funding Limited, con sede en las islas Bahamas. A todo ello, hay que sumar el sorprendente conjunto de relaciones establecidas entre el Metro barcelon¨¦s y,el Banco Atl¨¢ntico.
La auditor¨ªa acredita tambi¨¦n una serie de relaciones con empresas que utilizaban, de formas diversas (publicitariamente o con servicios), las estaciones de Metro. Todas estas relaciones, seg¨²n el concejal ahora responsable del tema, estar¨¢n sujetas a revisi¨®n. En este apartado figura en la auditor¨ªa un contrato arrendando la concesi¨®n de las m¨¢quinas de pesar personas, existentes en numelrosas estaciones, a la compa?¨ªa Davi y Cia, SL, que aparece representada por la gerente de esta empresa privada, la se?ora Montsenrat Tarragona Corbell¨¢, esposa del que fue alcalde de Barcelona, Joaqu¨ªn Viola, ambos asesinados por un comando terrorista. La fecha de este contrato es noviembre de 1962, es decir, cuando el alcalde de Barcelona era a¨²n Porcioles. En un primer an¨¢lisis, el contenido del contrato no destaca de los restantes de car¨¢cter similar, ni muestra condiciones dignas de especial menci¨®n. La falta de transparencia en la contrataci¨®n de las concesiones, fruto de la falta de informaci¨®n p¨²blica y del uso de la contrataci¨®n directa, as¨ª como la pr¨®rroga sistem¨¢tica de los contratos de concesi¨®n, son el denominador de la pol¨ªtica seguida por el Metro barcelon¨¦s.
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