Navarra y Euskadi

?(...) No corresponde a la l¨®gica jur¨ªdica ni constitucional el privar a Navarra del derecho de decir refrendariamente "s¨ª" o "no" al Estatuto que le ser¨¢ propuesto, y que, si bien representar¨¢ para las provincias vascongadas una reforma, para Navarra significar¨¢ exactamente lo mismo que para cualquiera de las provincias catalanas el Estatuto de Catalu?a. Carece de significaci¨®n l¨®gica el que el diputado Arzallus afirme en el Congreso que el primer refer¨¦ndum, el de la manifestaci¨®n de una voluntad de adhesi¨®n, es lo principal, pero que el segundo es para los navarros una cuesti¨®n meramente formal. Al contrario: el segundo refer¨¦ndum, el que determina la voluntad popular sobre el Estatuto en concreto, es el decisivo, y del derecho a decir a este "s¨ª" o "no" no han sido privadas ni las provincias que fueron eximidas de la primera consulta, como son las catalanas, las gallegas y tambi¨¦n las vascas.Pero la l¨®gica pol¨ªtica tampoco queda bien parada con esta pretensi¨®n del PNV. En efecto: ?qu¨¦ clase de pacificaci¨®n puede esperarse de una incorporaci¨®n de Navarra a Euskadi contra la voluntad manifestada expl¨ªcitamente por el pueblo navarro? ?Cabe semejanza mayor con cualquier anexi¨®n de tipo imperialista? ?Creen los nacionalistas vascos que conseguir¨ªan alguna clase de equilibrio entre la oposici¨®n a sus tesis desde el terrorismo marxista-leninista y la oposici¨®n desde una ¨®ptica de navarrismo que llamaremos espa?olista para entendernos? (...)?

5 de diciembre