La vanguardia en la Banda Municipal
Con ocasi¨®n de la exposici¨®n antol¨®gica de la Academia Espa?ola de Bellas Artes en Roma, que se celebra en el edificio de la Biblioteca Nacional, la Banda Municipal madrile?a confeccion¨® un programa dedicado a obras de nueve autores, todos ellos premios de Roma. La misma agrupaci¨®n tiene en sus filas a dos antiguos residentes en la capital italiana: Carmelo Bernaola y Jes¨²s Villa Rojo. Hay que advertir que a uno y a otro el premio y la consiguiente estancia de trabajo en el centro que hoy dirige Sope?a les fue, m¨¢s que beneficiosa, determinante de su evoluci¨®n ulterior.Mois¨¦s Davia, titular de la corporaci¨®n madrile?a, dirigi¨® p¨¢ginas de Cleto Zabala (Viva el rumbo), Bret¨®n (La verbena) y Ruperto Chap¨ª (La revoltosa), las tres del repertorio m¨¢s habitual.
Junto a ellas pudimos escuchar el Poema hel¨¦nico, de Francisco Cal¨¦s Pina, de tan fuerte textura sinf¨®nica como f¨¢cil inspiraci¨®n mel¨®dica; una Marcha triunfal, un tanto meyerberiana, de Francisco Esbr¨ª, que fuera -como Cal¨¦s- disc¨ªpulo de Emilio Serrano; Tres danzas valencianas, de Amando Blanquer, explotaci¨®n personal del folklore de su pa¨ªs, Valencia, representativas de una est¨¦tica que luego ha evolucionado notablemente hacia expresiones de modernidad; unos fragmentos de La ni?a de plata y oro, ballet de Jos¨¦ Mu?oz Molleda, directamente andalucista, ¨¢gil de ideas y de tratamiento.
En los medios populares del Centro Cultural de la Villa irrumpi¨® la denominada ?vanguardia?, con dos obras alusivas de Villa Rojo y Bernaola. La del primero -Entrada, encargo de RNE, en homenaje a Juan del Enzina- considera alg¨²n material del creador de nuestro teatro musical, para extraer de ¨¦l consecuencias estructurales hasta lograr un mundo est¨¢tico y espacial de sonoridades calculadas y relacionadas con matem¨¢tica exactitud. Bernaola, en su Entrada, parte de un motivo de pasodoble original que reaparece en el centro y al final de la pieza.
El resto, de gran belleza, consiste en un aprovechamiento de las caracter¨ªsticas de la banda, a fin de dar con resultados expresivos ricamente coloreados. Ambos autores dirigieron sus partituras, y Davia, el resto del programa, recibido por el p¨²blico con inter¨¦s y agrado. La penetraci¨®n de la vanguardia en el medio m¨¢s popular de la m¨²sica madrile?a puede ser, m¨¢s que an¨¦cdota, la iniciaci¨®n de un proceso conciliador entre la m¨²sica tenida por dif¨ªcil y el gran p¨²blico.
Babelia
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