Mosc¨² no negociar¨¢ "desde posiciones de fuerza"

Oficialmente la Uni¨®n Sovi¨¦tica parece decidida a no mantener conversaciones de desarme despu¨¦s de la decisi¨®n de algunos pa¨ªses de la OTAN de modernizar su armamento nuclear. ?No habr¨¢ negociaciones desde una base de fuerza?, ha escrito ayer el director de la agencia oficial Tass, Segueri Lossey. Sin, embargo, esta postura se presenta confusa para los observadores occidentales, y no existen dudas de que se arbitrar¨¢ alguna f¨®rmula para la negociaci¨®n posterior, seg¨²n interpretamos la pasada semana despu¨¦s de leer el comunicado de los ministros de Asuntos Exteriores del Pacto de Varsovia.Como ocurre habitualmente, la reacci¨®n sovi¨¦tica a la reuni¨®n de Bruselas se ha hecho esperar. Es ahora cuando comienzan a publicarse notas, art¨ªculos y puede desprenderse alguna opini¨®n. T¨ªmidamente, un comentarista de la agencia de noticias dec¨ªa hace unas horas que ?Estados Unidos ha mandado y los menores han obedecido?, y resaltaba la coincidencia de que Carter anunciara el aumento de los gastos militares norteamericanos.

Para Pravda de ayer, la decisi¨®n de la capital belga ha ?demostrado cambios serios? y se especula con los problemas que en estos momentos mantienen los vecinos de la Rep¨²blica Federal de Alemania en relaci¨®n con su aliado. Demag¨®gicamente se hacen citas a ?la dura experiencia hist¨®rica? y tambi¨¦n a ?las guerras, para las que el pasado es la experiencia del futuro?.

Nada ha ocurrido que los dirigentes sovi¨¦ticos no supieran de antemano. Por eso han aceptado con mejor tono del normal las decisiones de Bruselas. Bien es cierto que no faltan las frases previstas, sobre ?atentado para la paz? y ?mina bajo el edificio de la distensi¨®n?, pero son ataques menores de los que se pod¨ªan esperar. Valoran favorablemente la actitud sovi¨¦tica, que hace pocos d¨ªas decidi¨® retirar fuerzas militares de la RDA, en un gesto de buena voluntad, y se responsabiliza a la Organizaci¨®n del Atl¨¢ntico Norte de su decisi¨®n para instalar nuevas armas nucleares en Europa.

Ahora se inicia una nueva etapa. Los sovi¨¦ticos van a permanecer atentos para aprovechar las oportunidades de negociaci¨®n que les ofrezca Occidente. Mientras tanto, aguantan tranquilos y a la espera. Despu¨¦s, es seguro que buscar¨¢n cualquier ofrecimiento. El tiempo que a¨²n falta para la instalaci¨®n definitiva de nuevas armas nucleares en Europa (Pershing-2 y Cruise), el Kremlin va a aprovecharlo a su favor.