Cae el Gobierno conservador de Joe Clark en Canad¨¢

El gobernador general de Canad¨¢, Ed Schreyer, disolvi¨® ayer el Parlamento federal y convoc¨® nuevas elecciones legislativas para el pr¨®ximo 18 de febrero, despu¨¦s de que el Gobierno conservador del primer ministro Joe Clark perdiera un voto de confianza en la C¨¢mara de los Comunes.

La inesperada ca¨ªda del Gobierno Clark, que apenas llevaba seis meses en el poder, estuvo motivada por la pol¨ªtica de austeridad presupuestaria y altos precios de los productos energ¨¦ticos que acababa de anunciar el primer ministro. La C¨¢mara de los Comunes vot¨® contra Clark por 139 votos de censura frente a 133 favorables, lo que oblig¨® a la dimisi¨®n del Gabinete.La ausencia de tres parlamentarios del Partido Progresista -conservador- de Clark, y el voto negativo de cinco diputados del Partido de Cr¨¦dito Social -derecha-, que h¨¢st¨¢ ahora siempre: hab¨ªan apoyado al Gobierno, contribuyeron a que Clark quedara en minor¨ªa frente al voto negativo de los liberales. El primer ministro present¨® su dimisi¨®n al gobernador general, jefe de Estado que representa a la reina de Inglaterra, y ¨¦ste fij¨® las nuevas elecciones para la fecha indicada.

El triunfo de los propresistas-conservadores en las elecciones del pasado mes de mayo supuso la salida del poder, despu¨¦s de ejercerlo durante once a?os ininterrumpidos, del liberal Pierre Trudeau, y la llegada de un l¨ªder joven (cuarenta a?os), aunque sin carisma especial, como es Clark. En los ¨²ltimos seis meses, la imagen del primer ministro conservador se ha deteriorado de forma notable, pero la imposici¨®n de un impuesto sobre el precio de la gasolina fue el detonador de la votaci¨®n de confianza en la C¨¢mara de los Comunes de Ottawa.

Hace s¨®lo unas semanas que el veterano Trudeau dimiti¨® como, jefe del Partido Liberal y comenz¨® la lucha intestina por la sucesi¨®n, inicialmente prevista para marzo, en el congreso de su partido. Pero la inesperada convocatoria de elecciones federales puede llevar a nuevo a la arena pol¨ªtica a Trudeau. Los ¨²ltimos sondeos de opini¨®n p¨²blica indican una mayor¨ªa favorable de nuevo a los liberales, desbancados del poder en mayo pasado.

La cuesti¨®n de Quebec

Pero las nuevas elecciones para el Parlamento de Ottawa pueden avivar tambi¨¦n la divisi¨®n entre las comunidades angl¨®fona y franc¨®fona, como ocurri¨® en las anteriores. Los franc¨®fonos de Quebec dieron su voto a los liberales, mientras que las provincias angl¨®fonas se inclinaban hacia los conservadores.

Todo ello se complica con el refer¨¦ndum que debe celebrarse en Quebec la primavera pr¨®xima, en el que se plantear¨¢, de manera m¨¢s o menos expl¨ªcita, la cuesti¨®n secesionista. El primer ministro provincial de Quebec, Ren¨¦ Levesque, present¨® un programa de lo que define como ?soberan¨ªa asociada?, que fue tachado de independentista por el Gobierno federal.

Poco antes de que el Gabinete Clark fuera derribado, el Tribunal Supremo de Canad¨¢ declaraba anticonstitucional la pol¨¦mica ley 101 de la provincia de Quebec, que declar¨® el franc¨¦s ¨²nico idioma oficial, con las consiguientes protestas de la comunidad angl¨®fona. La decisi¨®n del alto tribunal puede ayudar, en ¨²ltima instancia, a los nacionalistas, que la han presentado ya como un caso de injerencia en los asuntos provinciales de una corte dominada por los angl¨®fonos.

El primer ministro Clark ha encabezado uno de los Gobiernos m¨¢s breves de la historia de Canad¨¢ y en estos momentos parece dif¨ªcil que los conservadores puedan volver al poder, despu¨¦s de que su pol¨ªtica fiscal y econ¨®mica haya sido tan duramente criticada y su gesti¨®n no haya suavizado en absoluto el creciente problema de Quebec.