La AIE considera viable la reducci¨®n de importaciones
Los m¨¢ximos dirigentes de la Agencia Internacional de la Energ¨ªa (AIE), representante de los principales pa¨ªses consumidores de petr¨®leo, expresaron reiteradamente su confianza en una reducci¨®n del volumen global de sus importaciones de petr¨®leo durante 1980, seg¨²n los acuerdos adoptados por la ¨²ltima reuni¨®n ministerial, celebrada en Par¨ªs el pasado 10 de diciembre. En medios de la AIE se manten¨ªa hasta el ¨²ltimo momento la esperanza de que los precios reales del petr¨®leo se mantuvieran pr¨¢cticamente bloqueados durante los pr¨®ximos doce meses.
Aunque los objetivos de reducci¨®n de importaciones de petr¨®leo para el conjunto de los pa¨ªses que integran la AIE son muy modestos, ninguno de sus dirigentes se mostr¨® dispuesto a desvelar las inc¨®gnitas que subyacen sobre las posibilidades reales de alcanzarlos. Fuentes de la direcci¨®n de la Agencia reconocieron las escasas garant¨ªas de cumplimiento de los objetivos fijados, aunque valoraron positivamente el que por primera vez se hubiera alcanzado un acuerdo en tal sentido, y sobre todo que se incluyera la previsi¨®n de convocar una cumbre ministerial cada vez que un pa¨ªs miembro revisara sus objetivos.
Las posibilidades de contrarrestar las decisiones de la OPEP son, a juicio de los dirigentes de la AIE, muy escasas, aunque no nulas. En la ¨²ltima reuni¨®n ministerial se barajaron tres alternativas esenciales: reducir dr¨¢sticamente las importaciones (descartada por las consecuencias en materia de reducc¨ª¨®n del crecimiento e incremento del paro); adaptarse a las circunstancias del mercado, en producci¨®n y precios impuestos por la OPEP (tambi¨¦n descartada, por las graves consecuencias inflacionarias), y una tercera que se refiere a la adopci¨®n de pol¨ªticas energ¨¦ticas nacionales, mediante aprovechamiento de recursos, reducci¨®n de despilfarros y subvenciones y grav¨¢menes a los usos (altos o bajos) de energ¨ªa. Los acuerdos adoptados se incluyen en esta ¨²ltima alternativa, patrocinada por la direcci¨®n de la AIE. Las fuentes citadas recriminaron muy duramente la inhibici¨®n de los Gobiernos respectivos desde el inicio de la primera crisis energ¨¦tica, incapaces de abordar una pol¨ªtica energ¨¦tica coherente por las consecuencias de impopularidad pol¨ªtica y social que comporta.
Pese a todo, mediog pr¨®ximos a la direcci¨®n de la Agencia insisten en desdramatizar la incidencia real de las dos crisis petrol¨ªferas acaecidas en los ¨²ltimos a?os. Una serie de estudios realizados se?alan que el incremento real de los costes energ¨¦ticos para los consumidores (industriales y privados) apenas ha alcanzado el 23% desde 1973. El c¨¢lculo se ha realizado, al parecer, teniendo en cuenta las altemativas cambiarias y deduciendo la incidencia de los costos de refino y transporte en los precios finales de los derivados, entre otros factores. Para este mismo per¨ªodo, el precio de los crudos se ha incrementado, en t¨¦rminos nominales, en un 350%, y en t¨¦rminos reales, en un 130%, seg¨²n los mismos c¨¢lculos efectados por la AIE.
La evoluci¨®n del consumo de petr¨®leo en el ¨¢rea de la OCDE ha experimentado alteraciones al alza y baja, no precisamente relacionadas de modo directo con las dos grandes crisis. De acuerdo con los datos elaborados por la Agencia Internacional de la Energ¨ªa, los dos primeros a?os que siguieron a la primera crisis se caracterizaron por un descenso de los consumos (-1,25% en 1974 y -5% en 1975), registr¨¢ndose un importante incremento en el primer semestre de 1976 ( + 6 % para el conjunto del a?o), un nuevo descenso en 1977 (- 1 %) y con unos datos provisionales para 1978 (+ 1,5 %),que revelan un nuevo incremento del consumo.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.