El Ayuntamiento de Alcobendas suspende licencias en el Soto de la Moraleja

El Ayuntamiento de Alcobendas decidi¨®, en el curso de la sesi¨®n plenaria que celebr¨® anteayer, suspender por el curso de un a?o las licencias de construcci¨®n existentes en el pol¨ªgono urban¨ªstico del Soto de la Moraleja, junto a la N-1, y en el barrio de Salamanca de la citada localidad. Los motivos de las suspensio no son, sin embargo, distintas en los dos casos. Mientras en el de Soto de la Moraleja lo que se intenta con la suspensi¨®n de licencias es evitar un excesivo macizamiento, en el caso del barrio de Salamanca existen una serie de irregularidades que se pretende estudiar por si constituyeran infracciones urban¨ªsticas, a la vez que se trata de evitar un crecimiento desmedido del mismo.

Los terrenos sobre los que se asienta la urbanizaci¨®n del Soto .de la Moraleja eran propiedad, en su inicio, de un tal se?or Gomendio, muy conocido en Alcobendas y, seg¨²n fuentes municipales, muy bien relacionado con miembros de anteriores administraciones.Al principio de los a?os sesenta fue promovido y aprobado un Plan parcial para el Soto de la Moraleja, que consistia, fundamentalmente, en su divisi¨®n en parcelas entre los 10.000 y los 25.000 metros cuadrados. En esas parcelas s¨®lo pod¨ªan construirse, de acuerdo con ese plan parcial, viviendas unifamiliares, lo que equival¨ªa a decir que la densidad de vivienda en la zona deber¨ªa ser muy baja, cosa, adem¨¢s, en consonancia con el aspecto residencial de lujo que quer¨ªa d¨¢rsele a la urbanizaci¨®n.

Sin embargo, al cabo de los a?os, parece ser que el se?or Gomendio pas¨® por unos momentos apurados. Para salvar su particular crisis econ¨®mica fueron promovidas unas normas complementarias que significaban la posibilidad de construir, en algunas de las parcelas previstas en la urbanizaci¨®n, en volumen, y en altura, lo que equival¨ªa, en la pr¨¢ctica, a multiplicar por cien la edificabilidad de la zona.

Sin embargo, esas normas complementarias fueron denegadas por Coplaco, que entrevi¨® las posibilidades de macizamien to que se le daban al Soto con ta les normas.

Pero, cuando la operaci¨®n parec¨ªa detenida, las normas en cuesti¨®n fueron aprobadas, parece ser que por intervenci¨®n direc ta del que en aquel tiempo ocu paba la Subsecretar¨ªa de la Vivienda. Como consecuencia de esa aprobaci¨®n, hoy aparecen, junto a la zona de los chal¨¦s de alto standing, pisos de aut¨¦ntico lujo en donde no deber¨ªa haberse macizado la construcci¨®n con bloques de cuatro plantas en lugar de los chal¨¦s primitivamente planificados.

Para evitar ese macizamiento, el Ayuntamiento de Alcobendas pretende revisar el planeamiento existente para el Soto -es decir, las normas complementarias-. Para que ese estudio sea posible, la Corporaci¨®n municipal se acoge al art¨ªculo 117 del Reglamento de Planeamiento, que prev¨¦ tal posibilidad.

Tambi¨¦n en el barrio de Salamanca

El mismo art¨ªculo ser¨¢ utilizado por el Ayuntamiento de Alcobendas para suspender las licencias de construcci¨®n en el barrio de Salamanca, una zona antigua de esa localidad en la que, entre las casas bajas existentes han ido apareciendo, a lo largo de los a?os, m¨¢s de una construcci¨®n de cinco alturas -las m¨¢ximas permitidas hasta ahora-, si bien no en todos los casos tal aparici¨®n pueda estar ajustada a derecho.Seg¨²n parece, un bloque del citado barrio, enclavado en la calle de Aldama, fue construido sobre una zona calificada como verde, no se ha respetado la zona de protecci¨®n de la N-I -cien metros- y el edificio m¨¢s cercano a esa autopista se encuentra a ochenta metros; se ha construido un edificio de cinco plantas en una calle de menos de quince metros, etc¨¦tera.

Todas estas irregularidades han dado lugar a un barrio congestionado, sin servicios, en el que, si no se suspenden las licencias, podr¨ªa llegarse a un macizamiento peligroso para el equilibrio urbano.