Ayuda militar norteamericana a T¨²nez para evitar la desestabilizaci¨®n del r¨¦gimen de Burguiba

Estados Unidos, preocupado por los sucesos del domingo pasado en la ciudad tunecina de Gafsa, ha acordado facilitar a T¨²nez helic¨®pteros y tanquetas para ayudar al r¨¦gimen del presidente Burguiba, seg¨²n han afirmado fuentes diplom¨¢ticas norteamericanas. Por su parte Francia, que ha enviado a T¨²nez tres nav¨ªos de guerra, ha aportado tambi¨¦n aviones Transall de transporte y helic¨®pteros. Mientras tanto, T¨²nez ha decidido retirar su embajador en Libia y ha pedido al embajador de este ¨²ltimo Estado en T¨²nez que abandone este pa¨ªs.

Fuentes norteamericanas, consultadas por The New York Times en Washington, no concretaron ayer el n¨²mero de aparatos y veh¨ªculos blindados ofrecidos a T¨²nez. Estas fuentes calificaron la ayuda de ?modesta? y que se hab¨ªan limitado a conceder lo que los tunecinos hab¨ªan pedido a la Administraci¨®n norteamericana. Estas peticiones habr¨ªan sido planteadas por el jefe del Estado Mayor del Ej¨¦rcito tunecino, que se encuentra en Washington.Seg¨²n las fuentes oficiales norteamericanas, esta ayuda constituye un intento de demostrar a Libia que Washington est¨¢ dispuesto a proteger la integridad e independencia tunecinas. Seg¨²n las citadas fuentes norteamericanas, el ataque lanzado contra Gafsa supon¨ªa un intento para debilitar al r¨¦gimen de Burguiba. Tras calificar de ?modesta? la ayuda a T¨²nez, los funcionarios norteamericanos afirman que, en esta ocasi¨®n, ?el simbolismo es tan importante como las armas?.

Mientras tanto, el Gobierno tunecino ha decidido llamar a su embajador en Libia, como primera medida de protesta por lo que considera complicidad libia en el ataque de un numeroso comando a la ciudad de Gafsa, y ha pedido al embajador libio en T¨²nez que se traslade a su pa¨ªs. Un portavoz del Gobierno precis¨®, sin embargo, que no se trataba de una ruptura de relaciones y que la citada medida respond¨ªa a los primeros indicios revelados por la encuesta en curso. Libia, por su parte, ha rechazado las acusaciones tunecinas de estar implicada en los acontecimientos de Gafsa.

Apoyo log¨ªstico franc¨¦s

Por su parte, los responsables militares franceses siguen al minuto la evoluci¨®n del conflicto libio-tunecino, seg¨²n informa desde Par¨ªs nuestro corresponsal Feliciano Fidalgo. Adem¨¢s de los tres barcos de guerra que, el domingo ¨²ltimo, zarparon de Tol¨®n y se dirigieron hacia las costas mediterr¨¢neas, Francia ha aportado una ayuda log¨ªstica a T¨²nez, adonde ha enviado tres aviones de transporte y helic¨®pteros. Nadie duda en Francia que Libia fue el ?cerebro? de la operaci¨®n de Gafsa, destinada a derrocar el r¨¦gimen de Burguiba y, ello, como una primera etapa de desestabilizaci¨®n de la cuenca mediterr¨¢nea.Entre Francia y T¨²nez no existe un acuerdo de defensa, pero s¨ª varios de cooperaci¨®n militar. Seg¨²n estos ¨²ltimos, Francia forma t¨¦cnicos tunecinos y puede prestarle consejeros y material b¨¦lico. En virtud de estos acuerdos, desde el mismo momento en que el comando integrado por tunecinos formados en Libia atac¨® la ciudad minera de Gafsa, las autoridades francesas, solicitadas por las tunecinas, dieron orden de despegue a tres aviones de transporte Transall y a dos helic¨®pteros de maniobras Puma. De momento, los responsables militares galos indican que T¨²nez, con sus propios medios, debe ser capaz de controlar la situaci¨®n. Cabe pensar, se considera en Par¨ªs, que el Gobierno franc¨¦s aumentar¨ªa su contribuci¨®n, con hombres y con armas, si el Ej¨¦rcito tunecino lo necesitara.

El despliegue instant¨¢neo de la ayuda log¨ªstica francesa a T¨²nez se explica, en los medios oficiosos parisienses, de esta manera: el Gobierno franc¨¦s le concede al ?incidente? de Gafsa una importancia sustancial, porque el golpe fallido del comando que atac¨® la ciudad al sur de T¨²nez es considerado como una ?advertencia? del dirigente libio Gadafi, que nunca ha renunciado a la realizaci¨®n de sus ?sue?os regionales? de dominaci¨®n desde que fall¨® la fusi¨®n de su pa¨ªs con T¨²nez en 1974.

Francia, seg¨²n el presidente Val¨¦ry Giscard d'Estaing, est¨¢ decidida a ?mantener la estabilidad pol¨ªtica en el Mediterr¨¢neo; es decir, la independencia y la seguridad de los Estados, particularmente las de T¨²nez?. Los intereses econ¨®micos y pol¨ªticos galos en esta regi¨®n ser¨ªan afectados profundamente de modificarse el statu quo actual.