Exposici¨®n en Madrid de artesan¨ªa popular peruana

La pasada semana se inaugur¨®, en la librer¨ªa Fuentetaja Universal, de Madrid, una exposici¨®n de arte popular peruano seleccionada por el Museo Thomas, de Lima. Incluye la colecci¨®n de cer¨¢micas de distintas escuelas regionales, telas pintadas y estampadas, ra¨ªces y alfombras. Para presentar esta exposici¨®n ha venido la subdirectora del Museo Contempor¨¢neo de Arte Popular Peruano, Patricia Thomas, que ha explicado a EL PA?S algunas de las caracter¨ªsticas de la artesan¨ªa popular expuesta en esta muestra, toda ella de arte vivo y, actualmente, en venta.

?Tres grandes, sectores de la artesan¨ªa popular peruana?, dice Patricia Thomas, ?est¨¢n representadas en esta colecci¨®n, que no es m¨¢s que una avanzadilla de lo que queremos hacer. Se trata de artesanos vivos, que siguen produciendo figuras, vasijas, mates o telas como las que aqu¨ª se exponen. La idea es dar a conocer, de una manera- algo sistem¨¢tica, la artesan¨ªa de mi pa¨ªs, y auspiciar la posibilidad de que en un futuro pr¨®ximo pudi¨¦ramos traer lo m¨¢s representativo de la colecci¨®n Thomas, que pertenece al Museo Contempor¨¢neo de Arte Popular Peruano y que consta, sobre todo, de piezas antiguas, aunque hay muchas y muy estimables de artesanos actuales.?Aparte de las plater¨ªas, trabajos de cesta y plumas, que de momento no est¨¢n representadas, son tres los sectores de artesan¨ªa m¨¢s importantes del Per¨². El primero, el de los tapices,alfombras y telas pintadas; los que est¨¢n colgados en la librer¨ªa Fuentetaja Universal responden a dos tipos bien di ferenciados: las copias de tapices precolombinos y otros de creaci¨®n actual. Los primeros son particularmente curiosos por la tem¨¢tica y los colores: figuras de aspecto misterioso, personajes bic¨¦falos, guerreros terribles, dragones y serpientes -esa figura tot¨¦mica en tantas zonas de Latinoam¨¦rica- son un ment¨ªas a la supuesta no necesidad de la invenci¨®n fant¨¢stica en el continente latinoamericano. Fantas¨ªa, color, abstracci¨®n y simbolismo, que recuerdan a esos tapices pintados de las castas de herreros y forjadores africanos, debieron tener en su momento, significaciones religiosas, m¨ªticas y sociales. Tambi¨¦n siguen perviviendo, en la cer¨¢mica, algunas figuras tot¨¦micas, muy estilizadas, como determinados osos, cuya funci¨®n -dice Patricia Thomas- estaba relacionada con la protecci¨®n de los ganados, y que actualmente se conserva sin que se conozca su significado exacto, como una necesidad de la decoraci¨®n en botijos, candelabros y vasijas.