El Parlamento autoriza al INI a comprar Minas de Figaredo

Los diputados de la Comisi¨®n de Industria del Congreso cumplieron ayer el tr¨¢mite de autorizar el traspaso de Minas de Figaredo al Instituto Nacional de Industria (INI), de acuerdo con la propuesta formulada por el Gobierno. El tr¨¢mite parlamentario -la Comisi¨®n estaba dotada de competencia plena- fue cubierto sin debate en contra de esta nueva nacionalizaci¨®n de p¨¦rdidas privadas.

S¨ª hubo, en cambio, discusi¨®n respecto a la segunda parte de la propuesta gubernamental, para incluir en la ley de Presupuestos de 1981 una partida destinada a subvencionar las p¨¦rdidas de este ejercicio, a raz¨®n de 2.500 pesetas por tonelada, como l¨ªmite m¨¢ximo. Este punto fue contestado por los parlamentarios comunistas, quienes solicitaban que no se establecieran l¨ªmites a la subvenci¨®n. La enmienda, apoyada por el Grupo Socialista, fue derrotada por los votos mayoritarios de UCD.La tramitaci¨®n parlamentaria del traspaso de Minas de Figaredo al sector p¨²blico supone de hecho un intento de implicar a todos los partidos de la oposici¨®n en esta nueva socializaci¨®n de p¨¦rdidas privadas, solicitada, por cierto, un¨¢nimemente por todas las fuerzas pol¨ªticas y sindicales, decidida por el Gobierno el 16 de noviembre del pasado a?o.

La entrada de Minas de Figaredo en el Instituto Nacional de Industria (INI) se ha producido, como era de esperar, sin que se hayan clarificado los datos esenciales respecto a la realidad actual de la empresa y sus expectativas de inmediato futuro. Ayer, ante la Comisi¨®n del Congreso comparecieron el director general de Minas y el delegado provincial de Industria en Asturias, adem¨¢s de representantes del comit¨¦ de empresa de la minera asturiana. Los datos aportados fueron sensiblemente inferiores a los ya publicados por los medios informativos. Dicho de otro modo, no a?adieron nada a lo poco sabido. Revelaron, eso s¨ª, la previsi¨®n de p¨¦rdidas para este a?o -1.729 pesetas por tonelada producida-, que resulta ser bastante inferior al tope calculado por el Gobierno para la subvenci¨®n y que los comunistas pidieron se elevara indefinidamente.

El delegado de Industria en Asturias aport¨® una cifra, en cierto modo sorprendente: el pasivo de Minas de Figaredo era de s¨®lo 465 millones de pesetas, frente a un activo de 2.122 millones de pesetas. Es de suponer que estas cifras correspondan a la declaraci¨®n de suspensi¨®n de pagos presentada por la sociedad, porque el simple examen contable efectuado por t¨¦cnicos del INI determin¨®, al parecer, una deuda de m¨¢s de ochocientos millones de pesetas, s¨®lo para los d¨¦bitos a la Seguridad Social y al Banco Espa?ol de Cr¨¦dito, y el n¨²mero de acreedores de Minas de Figaredo rebasaba en aquellos momentos los dos centenares.

Disparidad de cifras aparte, lo cierto es que la situaci¨®n real de la empresa reci¨¦n encajada al INI permanece en el m¨¢s riguroso de los secretos. El nuevo propietario de la sociedad minera asturiana efectu¨® el pasado a?o un estudio de viabilidad de Minas de Figaredo, cuya conclusi¨®n final fue ocultada incluso a la mayor parte de los directivos del Instituto, por indicaci¨®n expresa del Gobierno. Los resultados del estudio indicaban una m¨¢s dudosa viabilidad para la empresa asturiana y desaconsejaba rotundamente su integraci¨®n en Hunosa, que era la f¨®rmula inicialmente pretendida por las centrales sindicales y los partidos de izquierda.

La historia de Minas de Figaredo se encuentra estrechamente ligada a la de Hunosa, limitando fisicamente la mayor parte de sus pozos respectivos. El nivel salarial de los trabajadores de Figaredo (absentismo superior al 40%) es aproximadamente un 30% inferior al de los de Hunosa, pero ya el comit¨¦ de empresa de la sociedad reci¨¦n nacionalizada adujo ayer ante los diputados del Congreso la necesidad de ir a una pronta equiparaci¨®n salarial.