Abogados, te¨®logos, feministas y partidos de izquierda se muestran a favor del divorcio
Los debates sobre el divorcio que han tenido lugar a lo largo de la semana en la Fundaci¨®n Hogar del Empleado, organizados por su gabinete de estudios y asesoramiento, han puesto de relieve el descontento de los partidos de izquierda y los grupos de mujeres con el proyecto elaborado por UCD y la afirmaci¨®n del partido del Gobierno de que el texto ?es bueno, equilibrado y protege a la familia?, en boca de la diputada canaria Mar¨ªa Dolores Pelayo. Ni ¨¦sta ni su compa?era de partido Rosa Posada pudieron rebatir, no obstante, las diferentes cr¨ªticas que se hac¨ªan a las l¨ªneas generales del proyecto desde diversos sectores. En m¨²ltiples ocasiones las preguntas de los asistentes a las ucedistas no fueron siquiera respondidas.
La calificaci¨®n del texto gubernamental regresivo ha sido frecuente, en los debates y llev¨® a Jos¨¦ Folguera, representante del Partido de los Trabajadores, a preguntar en uno de los debates si ?no est¨¢ queriendo el Gobierno elevar a la categor¨ªa de patol¨®gico lo que a nivel de calle es simplemente normal?. No obstante, no todos los participantes lo vieron tan regresivo. Jos¨¦ Manuel Gonz¨¢lez P¨¢ramo, vocal nacional de Alianza Popular, anunci¨® la intenci¨®n de su grupo parlamentario de presentar una enmienda a la totalidad y, ?como sabemos que seremos derrotados?, un paquete de enmiendas parciales ?para hacer la ley menos mala?.El se?or Gonz¨¢lez P¨¢ramo hab¨ªa comenzado su intervenci¨®n diciendo un sonoro no al divorcio y proporcion¨® a los asistentes numerosas cifras, seg¨²n las cuales el divorcio en Espa?a ?es un problema minoritario ? y ? la criminalidad familiar en Espa?a es baja; adem¨¢s, de cada cien austr¨ªacos, diez o doce son hijos ileg¨ªtimos, mientras que en Espa?a los porcentajes son de 1,6% en el campo y 1,9%, en las ciudades?.
El divorcio ha sido calificado durante estos d¨ªas de muy diversas maneras: desde ?cirug¨ªa que aplica la sociedad?, como dijo Mar¨ªa Dolores Pelayo; ?derecho exclusivo de la persona a tener su afectividad gratificante?, en boca de Mar¨ªa del Carmen Mestre, que habl¨® en la jornada dedicada al punto de vista de las mujeres; ?simple y llanamente un derecho democr¨¢tico que se regula y se usa o no?, seg¨²n Paloma Gonz¨¢lez, a ?te has arrugado, te salen varices y ya no te quiero?, como dijo el representante de Alianza Popular, quien tambi¨¦n mencion¨® en reiteradas ocasiones el punto de vista del Episcopado espa?ol, ?mal social de consecuencias irreparables?.
La pata episcopal
Uno de los temas que suscitaron controversia, al margen del proyecto gubernamental, fue la indisolubilidad del matrimonio. ?Cuando los obispos meten su pata episcopal?, dec¨ªa en la sesi¨®n del martes el te¨®logo Jos¨¦ Mar¨ªa Gonz¨¢lez Ruiz, can¨®nigo de la catedral de M¨¢laga, dicen que la indisolubilidad del matrimonio es de derecho natural, pero yo quiero citar una carta de Pablo VI a la 59 sesi¨®n de la Semana Social de Francia, en abril de 1972, donde dijo, al referirse al matrimonio, que ?un compromiso de car¨¢cter definitivo parece imposible e incluso contrario a la raz¨®n?.
Gonz¨¢lez Ruiz aludi¨® al cap¨ªtulo 19 de san Mateo, donde se dice que Jesucristo se mostr¨® contrario al repudio de la mujer. ?Cristo lo hace?, afirm¨®, ?porque es un tremendo feminista y, dada la situaci¨®n de la mujer de entonces, el hombre pod¨ªa repudiarla, porque no era m¨¢s que una cosa ?. Tambi¨¦n cit¨® la primera carta de san Pablo a los corintios, en la que habla de determinados casos en los que es posible la ruptura del v¨ªnculo matrimonial. ? La Iglesia de los primeros siglos y luego los orientales?, dijo, ?comprendieron que la indisolubilidad del matrimonio es una utop¨ªa a la que hay que tender, pero que a aqu¨¦l hay que ponerle remedio si no resulta. ?
Jos¨¦ Mar¨ªa Gonz¨¢lez Ruiz coment¨® las recientes declaraciones del obispo de Orihuela-Alicante, Pablo Barrachina, sobre la ilegitimidad de cualquier divorcio, sea de personas cristianas o no, y a?adi¨®: ?Monse?or Barrachina sabe mucho de matar rojos, como ¨¦l mismo me contaba una vez, pero sabe poco de la Iglesia.?
Gonz¨¢lez P¨¢ramo no se manifest¨® en la misma direcci¨®n. Dijo que la uni¨®n matrimonial tiende por s¨ª misma a lo eterno y se bas¨® en ?fundamentaciones antropol¨®gicas, del estudio del hombre?. ?El divorcio?, remach¨®, ?entra como remedio y acaba la gente cas¨¢ndose sabiendo que cuando se canse lo puede dejar. Es, en definitiva, un mal con el que se intenta superar otro mal.?
La Iglesia y los tribunales eclesi¨¢sticos recibieron duras cr¨ªticas de la mayor parte de los participantes. El padre Mariano Gamo afirm¨® que ?la Iglesia intenta mantener un ejercicio monopol¨ªstico del matrimonio desde el punto de vista ideol¨®gico y de defensa del orden social establecido. A ella le cabe dar o no la amnist¨ªa a los casados y tiene competencia omn¨ªmoda en el terreno matrimonial en este pa¨ªs. Creo que la Iglesia deber¨ªa preocuparse m¨¢s por tener el aut¨¦ntico liderazgo en defender el amor dentro del matrimonio y no s¨®lo el monopolio ideol¨®gico; deber¨ªa recortar sus competencias jur¨ªdicas en el tema matrimonial y entreg¨¢rselas al poder civil. Adem¨¢s, pienso que tendr¨ªa que introducirse en la catequesis del matrimonio la catequesis del divorcio, como un episodio m¨¢s?.
Jos¨¦ Mar¨ªa D¨ªez Alegr¨ªa centr¨® su intervenci¨®n en ?una especie de esc¨¢ndalo?: ?Oponi¨¦ndose tanto la Iglesia a la disoluci¨®n de los matrimonios?, dijo, ?no se entiende que haga por la v¨ªa de las nulidades lo que prohibe a los dem¨¢s?. Calific¨® el ensanchamiento de las causas de nulidad como un deseo de la Iglesia de mantener sus poderes sociales, y dijo que ?es mas congruente la ley civil que una legislaci¨®n eclesi¨¢stica enfocada, cada vez m¨¢s, a estudiar la profundidad existencial al dar el s¨ª, sin que haya causas jur¨ªdicas que se puedan constatar. La Conferencia Episcopal?, sigui¨® D¨ªez Alegr¨ªa, ?ha hablado en t¨¦rminos profundamente negativos de una posible ley civil del divorcio. Si fueran coherentes con la indisolubilidad del matrimonio, dir¨ªan: "quien haya fracasado, que se aguante." Pero luego les entra una misericordia y ensanchan las causas de nulidad?.
Gonz¨¢lez Ruiz puntualiz¨®: ?Si todo parece tan claro, ?d¨®nde est¨¢ el conflicto? Varios profesores de la Universidad Gregoriana han hecho un estudio sobre el clero occidental: el 75 por ciento es neur¨®tico, el 15 por ciento necesita ayuda psiqui¨¢trica y s¨®lo el 10 por ciento est¨¢ sano. Conclusi¨®n: la instituci¨®n eclesial est¨¢ neur¨®tica. ?
Nulidades a domicilio
Junto a opiniones como la de Ana Mar¨ªa P¨¦rez del Campo, presidenta de la Asociaci¨®n de Mujeres Separadas, sobre la legislaci¨®n can¨®nica, a la que calific¨® de ?caduca, desfasada e inquisitorial?, hubo otros momentos de los debates en los que se narraron hechos que sorprendieron a algunos de los asistentes. ?Se?ores?, dijo el diputado socialista Antonio Sotillo, ?en un hotel de Madrid, un obispo africano cat¨®lico anula actualmente matrimonios por 300.000 pesetas en pocas horas?.
Dentro del proyecto de divorcio presentado por el Gobierno a las Cortes, varios puntos centraron las cr¨ªticas de la izquierda y las mujeres. El principal de ellos, el mutuo consenso, que no se recoge en el proyecto ucedista, ?pese a ser el que no implica traumas, el que hace que el divorcio sea pac¨ªfico ?, seg¨²n dijo Ana Mar¨ªa P¨¦rez del Campo. Mar¨ªa Dolores Pelayo, la diputada de UCD, opin¨®, en cambio, que ?el matrimonio es un acuerdo de voluntades, pero esa voluntad, una vez contra¨ªdo, trasciende al Estado y a la sociedad, por lo que ya no puede romperse por mutuo disenso?.
Este punto del divorcio consensual es uno de los que hace al PSOE discrepar con el proyecto elaborado por UCD, junto con la necesidad de un proceso de separaci¨®n previo al divorcio y las ?desorbitadas facultades? que se le dan al juez para dar o denegar el divorcio, seg¨²n expuso el diputado socialista Antonio Sotillo, quien asegur¨® que su partido no iba a ceder con un texto as¨ª (v¨¦ase EL PAIS del 7 de marzo). Junto a estas manifestaciones, Mar¨ªa Dolores Pelayo matiz¨® la omn¨ªmoda posibilidad del juez diciendo que ?dentro de la reforma del poder judicial tenemos previsto establecer los jueces de familia, asesorados por diversos especialistas?. Ya Ana Mar¨ªa P¨¦rez del Campo, presidenta de las Mujeres Separadas, hab¨ªa informado que hay en la actualidad un juzgado que est¨¢ utilizando asistentes sociales que proporcionan al juez datos muy estimables en cada caso, y que esto entronca con la petici¨®n del proyecto de divorcio de siete organizaciones feministas de que se cree un Tribunal de la Familia. Dentro de estos jueces espec¨ªficos, el representante de Alianza Popular anunci¨® que, entre sus enmiendas al proyecto gubernamental, pedir¨ªan que se estableciera la figura del defensor matrimonial o defensor del v¨ªnculo.
Buena o mala fe
Virgilio Zapatero, dirigente del Grupo parlamentario Socialista, a?ad¨ªa el viernes, al iniciarse el estudio del proyecto del Gobierno por parte de este grupo, un nuevo punto de desacuerdo del PSOE: la exigencia de culpabilidad de uno de los c¨®nyuges. La cr¨ªtica a este punto se ha hecho desde diversos sectores, que encuentra poco serio que se huya de los t¨¦rminos culpable e inocente para encubrirlos en el ¨¢mbito de la ?buena o mala fe ? de los c¨®nyuges.
Uno de los ataques hechos al proyecto de ley gubernamental es porque no prev¨¦ ninguna norma que obligue al c¨®nyuge que deba pagar las pensiones a hacerlo. Rosa Posada, secretaria pol¨ªtica del gabinete de Adolfo Su¨¢rez, afirm¨® que ?hemos trabajado en la posibilidad de incluir una disposici¨®n adicional octava para crear, dentro de la Seguridad Social, algo como un Fondo de Garant¨ªa Familiar, que satisfar¨¢ los alimentos, dentro de los l¨ªmites que reglamentariamente se fijen. El Fondo de Garant¨ªa Familiar se subrogar¨¢ las condiciones de acreedor. Quien no cumpla incurrir¨¢ en mora y la suma debida se incrementar¨¢ en un 20 por ciento, sin perjuicio de los intereses?.
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