Un d¨ªa sin luz
Hacia las ocho de la ma?ana del pasado s¨¢bado, los abajo firmantes, vecinos del barrio del paseo de Extremadura, nos encontramos con que un cable de la instalaci¨®n el¨¦ctrica de nuestra zona se romPasa a p¨¢gina 12
Un d¨ªa sin luz
Viene de p¨¢gina 11pi¨®, sufriendo nuestros inmuebles el consiguiente corte de luz. Dos horas despu¨¦s de avisar a la compa?¨ªa, hacia las diez de la ma?ana, se present¨® una brigada, que se limit¨® a atar el cable con una cuerda alegando falta de material? para arreglar la aver¨ªa.
Desde entonces, y hasta las siete de la tarde, nos encontramos sin luz y sin posibilidad de tenerla, a pesar de que hacia las tres de la tarde se nos dijo que ya lo estaban arreglando, cosa que no era cierto, pues all¨ª no se ve¨ªa a nadie. Aunque cabe preguntarse si lo estaban arreglando por ?control remoto?.
Pero no acaba aqu¨ª la cosa. Hacia las seis de la tarde se nos in form¨® que, adem¨¢s del cable, se hab¨ªa roto una palomilla, pero que esta misma tarde se arreglar¨ªa todo
Once horas, ni m¨¢s ni menos fueron necesarias para un arreglo ?provisional? hasta el lunes, ayer, que nos volvimos a encontrar sin luz. Entre los afectados se encuentra un bar, que no pudo atender a sus clientes, dado que las bebidas estaban calientes, al no haber luz; una discoteca, que se vio obligada a pagar 6.000 pesetas a la cuadrilla que arregl¨® el problema, adem¨¢s de una botella de whisky para cada uno de sus componentes, y principalmente la cantidad de familias que no tuvieron luz en todo el d¨ªa.
Nosotros nos preguntamos sencillamente por qu¨¦ se producen estos hechos, incre¨ªbles, porqu¨¦ estos fallos ?de bulto? en los que salimos perdiendo quienes todos los meses, cumplidamente, pagamos unos recibos nada baratos.
Sencillamente, esperamos que hechos como los relatados no vuel.van a producirse, aunque la verdad es que no podemos dejar de pensar que volveremos a padecerlos, a la vista del trato y organizaci¨®n de la compa?¨ªa. /
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.