Juan Pablo II regres¨® ayer a Roma fuertemente impresionado por su viaje a Brasil

Juan Pablo II regres¨® ayer a Roma fuertemente impresionado por el impacto humano de su visita a Brasil. En la conversaci¨®n mantenida con los periodistas se?al¨® que ten¨ªa que reflexionar a fondo tras la experiencia vivida, e hizo elogios de la Iglesia brasile?a por su vivencia de la realidad concreta de ese pa¨ªs. Los observadores consideran que la visita va a tener consecuencias no s¨®lo en Brasil y en la Iglesia de Latinoam¨¦rica, sino en la manera de pensar del Papa.

?Imagino que estar¨¦is del Papa hasta la coronilla?, dijo ayer por la ma?ana Juan Pablo II a los informadores que le acompa?aron en su avi¨®n desde Manaus a Roma, poco despu¨¦s de aterrizar en el aeropuerto de la capital italiana.El Papa estaba tan rendido despu¨¦s de su viaje a Brasil que se qued¨® profundamente dormido y tuvieron que despertarle momentos antes de aterrizar en Roma. Por eso vino a saludarnos a los periodistas que le acompa?amos cuando el avi¨®n estaba ya parado en el aeropuerto de Roma. ?Estoy muy cansado?, dijo, ?pero vosotros lo estar¨¦is m¨¢s. En realidad, para vosotros estos viajes son m¨¢s duros. A m¨ª me lo organizan todo. Vosotros trabajais con ansia, corriendo siempre, luchando con los telex y con los tel¨¦fonos. En poco tiempo ten¨¦is que seguirme, leer los peri¨®dicos, analizar, hacer la s¨ªntesis y sufrir sin saber si os va a llegar la cr¨®nica al peri¨®dico?.

El saludo del Papa se convirti¨® en una conferencia de prensa al margen del protocolo. De cuando en cuanto ven¨ªan a decirle que ten¨ªa que irse. ??Por qu¨¦ me llaman??, dec¨ªa riendo. En el aeropuerto llevaban esper¨¢ndole m¨¢s de media hora, sin saber lo que estaba ocurriendo, las autoridades que hab¨ªan ido a recibirle. Dijo que la experiencia que supon¨ªa su visita a Brasil le obligaba a reflexionar mucho: ?Ha sido?, dijo, ?un impacto humano enorme. Algo sorprendente. Y he encontrado una Iglesia vital, din¨¢mica, porque vive su empe?o en contacto con la realidad concreta de los problemas humanos, sobre todo de los m¨¢s pobres?.

Cuando se le pregunt¨® qu¨¦ sent¨ªa al volverse a encontrar en Roma despu¨¦s de una experiencia tan fuerte, respondi¨® algo que fue comentado como muy importante, por los representantes de la prensa internacional all¨ª presentes. ?S¨ª; despu¨¦s de un viaje as¨ª, uno se pregunta qu¨¦ es esta Roma?, contest¨®. Naturalmente, quer¨ªa decir ?este Vaticano?. Hay quien asegura que estos viajes est¨¢n cambiando radicalmente el modo de vivir y de actuar del Papa. A Juan Pablo II se le ha llamado durante este viaje, que ¨¦l mismo ha calificado de ?marat¨®n?, la ?enc¨ªclica social viajera?.

Asegur¨® que por ahora no har¨¢ otros viajes: ?Tres en dos meses son bastantes. Ahora necesito reflexionar? y, bromeando, a?adi¨®: ?Tengo tambi¨¦n que esperar para saber lo que me vais a decir?.

Despu¨¦s de haber anunciado que se iba a Castelgandolfo a descansar, dijo a los periodistas: ?Si ven¨ªs a visitarme podr¨ªamos seguir esta conversaci¨®n para profundizar con vosotros todo lo que hemos vivido en este viaje?.

A quien deseaba hacerle preguntas demasiado empe?adas respondi¨®: ?He dormido mucho y no tengo la cabeza para pensar demasiado. Ahora lo importante es reflexionar?.