La historia de un planeamiento urban¨ªstico nunca terminado
La historia del planeamiento madrile?o no arranca, como muchos pudieran pensar, con el Plan General de 1963. Desde 1860 esta ciudad cuenta con diversos intentos, m¨¢s o menos afortunados, m¨¢s o menos ajustados a la realidad, de planificar su crecimiento y su desarrollo. Estos han sido los puntos culminantes de ese intento de planificar Madrid:1860. Plan Castro. Este plan de ensanche tiene por encima de todo un alto significado cultural en cuanto propuesta global de un sistema de ocupaci¨®n del espacio por parte de la burgues¨ªa como clase en ascenso. El proyecto contempla con notoria ingenuidad como horizonte de planificaci¨®n un per¨ªodo de cien a?os. El proyecto para la ?otra ciudad?, es decir, la ciudad para las clases populares emergentes, el plan del extrarradio, que deber¨ªa haber complementado de modo inmediato al plan de ensanche, se dilat¨® una y otra vez.
1909. Proyecto de urbanizaci¨®n del extrarradio de N¨²?ez Gran¨¦s. Constituye un intento de abordar lo que el Plan Castro hab¨ªa dejado pendiente. Palabras muy expresivas extra¨ªdas de un informe realizado en 1931:
?Sin embargo, el ayuntamiento, que ve¨ªa c¨®mo avanzaban las edificaciones en el extrarradio y que se estaba desarrollando Madrid en un n¨²cleo sin urbanizaci¨®n, donde no hab¨ªa m¨¢s que estercoleros y lugares inmundos y abandonados, ve¨ªa, al mismo tiempo, que el ensanche no crec¨ªa; porque yo no llamo crecimiento del ensanche a lo que desde 1860, en que se hizo el plano del mismo, hasta la fecha (1931), se ha realizado, pues muy cerca de la tercera parte est¨¢ sin construir y sin urbanizar?.
El proyecto de N¨²?ez Gran¨¦s no lleg¨® a pasar de los papeles y fue sucedido por diversos intentos que tampoco llegaron a cristalizar.
1933. Plan de Extensi¨®n Municipal. Es el resultado de un dilatado y trabajoso per¨ªodo cuyos precedentes m¨¢s significativos pol¨ªtica y culturalmente son el estudio titulado ?Informaci¨®n sobre la ciudad? (1929), el concurso internacional del mismo a?o y los informes de los t¨¦cnicos municipales sobre las propuestas de dicho concurso y sobre las bases para el Plan de Extensi¨®n de 1933.
El plan se sit¨²a en una posici¨®n ciertamente avanzada en relaci¨®n con la cultura urban¨ªstica europea del momento. En los informes municipales que preceden al plan se pone especial ¨¦nfasis en los problemas de la realidad metropolitana emergente y en los problemas de gesti¨®n y coordinaci¨®n. El plan se prolonga en las ordenanzas municipales de 1935.
1939. Plan Besteiro. Constituye la primera propuesta de planificaci¨®n regional para Madrid, que naturalmente no pasa a tener ning¨²n valor normativo y que cierra el per¨ªodo de planeamiento de la etapa republicana.
1939-1946. Plan Bidagor. Es el precedente inmediato del vigente Plan General. M¨¢s all¨¢ de las declaraciones altisonantes que aparecen como envoltura ideol¨®gica del plan, es una propuesta que empalma sustancialmente con las del per¨ªodo republicano. Es un plan, en sustancia, de ordenaci¨®n de lo existente y, por consiguiente, bastante realista. En la ley que acompa?a al plan pueden encontrarse los principios que posteriormente, en 1956, formar¨¢n cuerpo en la primera ley de R¨¦gimen del Suelo de este pa¨ªs. Se crea un ¨®rgano de gesti¨®n, la comisar¨ªa, que depende de la Administraci¨®n central y que constituye el precedente, aunque peculiar, de la posterior Coplaco.
1963. Plan General de Ordenaci¨®n del Area Metropolitana. Formalmente es una revisi¨®n del Plan General de Bidagor, pero, de hecho, tanto por su ¨¢mbito como por el tratamiento y alcance de las propuestas constituye un plan enteramente nuevo. Aunque el marco legal de este plan es la ley del Suelo de 1956, constituye una figura de planeamiento no estrictamente encajable en las presentes en dicha ley (Plan General, para el Municipio de Madrid, y Plan Metropolitano, esquema director para los dem¨¢s).
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