Custodia de explosivos

Todav¨ªa en la conmoci¨®n produc¨ªda por la noticia no sabemos qu¨¦ sea m¨¢s espectacular y alarmante, si el robo de las ocho toneladas de explosivo del llamado Goma 2, junto a los emplementos precisos para su activaci¨®n cuando los terroristas lo deseen, o si las condiciones insuficientes de seguridad y custodia en que se encontraban tan peligros¨ªsimos materiales.Al hablar de condiciones de custodia tanto queremos se?alar el concreto caso que hoy nos escandaliza y preocupa como la general norma reglamentaria que regula esta materia. Que fueran solamente dos guardas jurados el personal de seguridad adscrito a la custodia de tan importante arsenal es un extremo absolutamente irritante, sencillamente inadmisible. No sabemos si con tal n¨²mero la empresa cumpl¨ªa el reglamento o si lo infring¨ªa. Pero en este supuesto y en el anterior contemplamos y denunciamos una responsabilidad objetiva y clar¨ªsima de los poderes p¨²blicos. La normativa de seguridad para este tipo de industria y para este g¨¦nero de dep¨®sitos es, de un modo palmario, insuficiente.

Resulta muy duro comprender c¨®mo en la situaci¨®n actual, de una presi¨®n terrorista no menguada, el g¨¦nero de normas que se aplica a esta materia sea de tanta inocencia en las previsiones de riesgo que contienen como tan vuelta de espaldas a la evidencia de que toda potencial apropiaci¨®n de tales explosivos no solamente rebasa los l¨ªmites de la delincuencia com¨²n, sino que desborda lo que sea el m¨¢s com¨²n de los terrorismos.

26 de julio.