Sam Nujoma: un socialismo a la angolana para Namibia

En los ¨²ltimos a?os, la ONU ha multiplicado los reconocimientos con car¨¢cter ?¨²nico y exclusivo? a determinados movimientos de liberaci¨®n. Esta actitud, m¨¢s ideol¨®gica que democr¨¢tica, tiene su fundamento en la evoluci¨®n de la composici¨®n de la ONU y el equilibrio de fuerzas a favor de los pa¨ªses socialistas y del Tercer Mundo, que predomina hoy en la organizaci¨®n internacional. Esos reconocimientos recaen con frecuencia en grupos radicales, habitualmente residentes en el extranjero. En un edificio de tres pisos del centro residencial de Luanda tiene sus oficinas centrales el SWAPO de Sam Nujoma. El ?presidente?, como ya le llaman sus seguidores, representante ?¨²nico y exclusivo? del pueblo namibio, recibe en un despacho del segundo piso, relativamente confortable, dadas las circunstancias de Angola. Poderle entrevistar no fue f¨¢cil. Dos veces consecutivas fall¨® a la hora convenida. Al tercer intento el ?presidente? ya hab¨ªa llegado: su Mercedes 380 SL bloqueaba la entrada del edificio, mientras media docena de personas, con el cl¨¢sico aire distra¨ªdo del guardaespaldas, observaban a todo el que entraba y sal¨ªa.

Antes de ser introducido en su despacho es casi obligado hacer una antesala de hora y media, instructiva, desde luego, pues hay tiempo para leer los folletos C¨®mo viven los comunistas en la URSS y otros varios similares, ¨²nica literatura disponible en la salita de espera.Para entrar a ver al gran jefe el pobre periodista blanco ha de someterse a un riguroso registro que justifican porque ?Sur¨¢frica tiene puesto precio a la cabeza del "presidente"?. Para realzar este bien montado teatro para progresistas suecas, dos gorilas flanquear¨¢n al entrevistador durante toda la conversaci¨®n, por s¨ª acaso.

Barrer obst¨¢culos

Sam Nujoma, el hombre que se codea ya con todos los presidentes africanos, llegar¨¢, qu¨¦ duda cabe, a ser realmente presidente. Tiene todas las cualidades o, mejor dicho, la cualidad de cualidades para ello: su determinaci¨®n de barrer por todos los medios todos los obst¨¢culos a su paso.Su tarea, sin embargo, no ser¨¢ f¨¢cil. El SWAPO es un grupo apoyado fundamentalmente por los ovambos, que son el 46% de la poblaci¨®n de Namibia. Pero los ovambos est¨¢n divididos en siete tribus diferentes, las m¨¢s grandes de las cuales son las de los Kuanyamas y los ondongas. Para su desgracia, Sam Nujoma no pertenece a ninguna de las dos, sino que es gambera, una de las tribus m¨¢s peque?as. Para algunos, el futuro presidente ha cometido el error de recurrir con demasiada frecuencia a la liquidaci¨®n f¨ªsica de algunos importantes l¨ªderes ovambos, como el jefe Clemens Kapuuo, asesinado en diciembre de 1978. Entre esas tribus apegadas a las tradiciones, y m¨¢s fieles a los lazos familiares que a los ideol¨®gicos, esa faceta de Sam Nujoma no es precisamente popular.

Cuando Nujoma supo que no iba a ser el ?¨²nico y exclusivo? entrevistado de este reportaje sobre Namibia, mont¨® en c¨®lera y estuvo a punto de anular la entrevista.

Pregunta. ?Cu¨¢l es la posici¨®n del SWAPO con respecto a las ¨²ltimas propuestas de la ONU?

Respuesta. Desde que la ONU adoptara la resoluci¨®n 435, el SWAPO la ha apoyado. Nuestra posici¨®n es clara. Queremos cascos azules no s¨®lo en el norte de Namibia, en las fronteras con Angola y Zambia, de quienes no esperamos ning¨²n ataque, sino en las fronteras con Sur¨¢frica, para que impidan el asesinato y la tortura del pueblo namibio por las tropas surafricanas. Sur¨¢frica pide conservar veinte de sus bases en las zonas desmilitarizadas. SWAPO no ha solicitado ninguna base: una zona desmilitarizada es una zona desmilitarizada.

P. ?No quiere SWAPO ninguna presencia guerrillera en Namibia?

R. Eso es otra cosa. Yo hablo de zonas desmilitarizadas. Nuestra guerrillas est¨¢n en Namibia y nos quedaremos all¨ª. ocurra lo que ocurra. Si Sur¨¢frica no acepta esta ¨²ltima propuesta de la ONU, el pueblo namibio, bajo la direcci¨®n de SWAPO, intensificar¨¢ la lucha de liberaci¨®n nacional.

P. ?Cu¨¢l es su posici¨®n hacia los otros grupos nacionalistas de Namibia?

R. Yo no hablo en nombre de los otros. Usted ya les ha entrevistado ?por qu¨¦ no les pregunt¨® a ellos?

P. Pienso que su opini¨®n puede ser interesante para el futuro...

R. Entonces no me siga preguntando sobre ellos. Pregunte s¨®lo por la posici¨®n del SWAPO y le responder¨¦. Usted quiso ir a ver a los otros, eso es asunto suyo, pero no venga aqu¨ª a preguntarme sobre ellos. Esos partidos no me importan en absoluto. Cuando haya elecciones en Namibia, el pueblo decidir¨¢.

P. ?Aceptar¨¢ SWAPO el resultado de unas elecciones?

R. Naturalmente, puesto que aceptamos la resoluci¨®n 435 de la ONU. Esos partidos que usted ha entrevistado est¨¢n, sin embargo, del lado de los racistas boers.

P. Cu¨¢l es la ideolog¨ªa del SWAPO?

R. Nuestra ideolog¨ªa es combatir y echar al colonialismo de Namibia. Queremos sustituir las instituciones coloniales que suprimen pol¨ªticamente a nuestro pueblo y le explotan econ¨®micamente por instituciones populares, es decir, por un Gobierno del pueblo para el pueblo.

P. Dicen que el SWAPO es mayoritariamente ovambo y que los otros grupos rechazan su liderazgo.

R. El SWAPO que yo represento es namibio y tenemos apoyos entre los ovambos y los dem¨¢s grupos ¨¦tnicos del pa¨ªs. El d¨ªa que haya elecciones haremos campa?a en toda Namibia y obtendremos la mayor¨ªa de los votos.

R. ?Cu¨¢l es la posici¨®n del SWAPO con respecto a las compa?¨ªas extranjeras que operan en Namibia?

R. Desde nuestro punto de vista, esas compa?¨ªas operan legalmente. La mayor¨ªa de ellas emplea al namibio como mano de obra barata y paga salarios que no les permiten vivir como seres humanos. Supongo que ning¨²n pa¨ªs puede vivir hoy sin comerciar con otros. Despu¨¦s de nuestra liberaci¨®n tendremos necesidad de comerciar tambi¨¦n, pero nuestra actitud hacia esos que hoy pagan royalties a Sur¨¢frica por explotar a nuestro pa¨ªs estar¨¢ dictada por la actitud de ellos hacia nosotros ahora, y en verdad no podr¨¢n esperar que les demos un trato amistoso.