Profundas divergencias entre el PNV y la oposici¨®n en el Ayuntamiento de Bilbao

El Ayuntamiento de Bilbao se enfrenta a la m¨¢s grave crisis desde su constituci¨®n en abril de 1979. La actuaci¨®n del PNV, minor¨ªa mayoritaria en la corporaci¨®n, y muy en especial la de su alcalde, el nacionalista Jon Casta?ares, al que toda la oposici¨®n acusa de autocr¨¢tico y antidem¨®crata, provoc¨®, el jueves, el abandono de la sala de plenos de la totalidad de los concejales de la oposici¨®n y uno de UCD, as¨ª como el encierro indefinido en la misma de los edites de Herri Batasuna, Partido Revolucionario de Trabajadores Vascos, LAIA y Convergencia Socialista Vasca (ESB). A iniciativa de Euskadiko Ezkerra, los partidos de la oposici¨®n municipal -excepci¨®n hecha de UCD- estudiar¨¢n en una reuni¨®n prevista para el lunes tina posible petici¨®n de dimisi¨®n del alcalde.

La actitud de todos los concejales de izquierda de abandonar la sala de plenos -en la que ¨²nicamente quedaron los concejales del PNV y dos de UCD- no obedec¨ªa a una reacci¨®n repentina, sino m¨¢s bien a una demostraci¨®n de una total disconformidad y ruptura, que va haci¨¦ndose cada vez m¨¢s insuperable, entre el PNV y su alcalde Jon Casta?ares y la oposici¨®n de izquierdas.Medio a?o despu¨¦s de su constituci¨®n, el Ayuntamiento de Bilbao (integrado por trece concejales -uno de ellos el alcalde del PNV, cuatro de HB, cinco de UCI), cuatro del PSE-PSOE y uno de LAIA, ESB y Euskadiko Ezquerra) conoci¨® su primera situaci¨®n realmente conflictiva cuando el alcalde se neg¨® a convocar un pleno extraordinario, solicitado por todas las fuerzas de izquierda, para elaborar una normativa provisional sobre regulaci¨®n de la participaci¨®n del movimiento ciudadano en el ayuntamiento.

El malestar entre la oposici¨®n municipal fue en aumento a lo largo de todo el presente a?o por la actuaci¨®n del alcalde en la confecci¨®n del orden del d¨ªa y la regulaci¨®n de los plenos, que aquella coincide en calificar de autocr¨¢tica. P¨²blicamente la oposici¨®n denunciaba la proclividad del alcalde, a la hora de confeccionar el orden del d¨ªa, para dejar a un lado asuntos que consideraba pol¨ªticos.

Esta actitud habr¨ªa inducido a Jos¨¦ Luis Ib¨¢?ez, concejal del PSOE, a presentar en el pleno del jueves pasado, por procedimiento de urgencia, una solicitud de que el pleno de la corporaci¨®n elabore un reglamento de sesiones de los plenos municipales, cuya inclusi¨®n, en forma de moci¨®n, en el orden del d¨ªa del citado pleno hab¨ªa sido desestimada por el alcalde en tres ocasiones. Todas las fuerzas de la oposici¨®n apoyaban la iniciativa socialista.

El propio Jon Casta?ares, en un ambiente tenso en el que se escucharon varios insultos, fue quien abander¨® la negativa a aceptar que el asunto se tratase en el pleno e incluso, como propon¨ªa otro concejal nacionalista, que pasase a la asesor¨ªa jur¨ªdica. Ya anteriormente, con el respaldo de los concejales de su partido y de dos de los cinco de UCD, hab¨ªa logrado rechazar el car¨¢cter de urgencia de una moci¨®n de LAIA, HB, PSOE, EE y ESP -que tampoco hab¨ªa sido incluida en el orden del d¨ªa- para la concesi¨®n de los permisos necesarios para la celebraci¨®n de la Asteburu Nagusia (Fin de Semana Grande), que desean organizar las comparsas como r¨¦plica a la tradicional Semana Grande de agosto, que organiz¨® este a?o el PNV en solitario.

Encierro por tiempo indefinido

Esta actitud del alcalde movi¨® a los concejales del PSOE, Euskadiko Ezkerra, Herri Batasuna, ESB y LAIA y uno de UCD -que hoy se califica como independiente- a abandonar el sal¨®n de sesiones. Los concejales de Herri Batasuna, que luego iniciar¨ªan un encierro indefinido en compa?¨ªa de los ediles de LAIA y ESB, antes de retirarse del sal¨®n de plenos leyeron un escrito en el que afirman que mantendr¨¢n esta actitud hasta tanto no se satisfagan sus peticiones de reconocimiento del derecho de los concejales a la presentaci¨®n de mociones, la realizaci¨®n de plenos extraordinarios, el compromiso de discutir la participaci¨®n ciudadana en un pleno y la elaboraci¨®n de un reglamento de plenos.Jos¨¦ Luis Ib¨¢?ez, concejal socialista, calificaba ayer la situaci¨®n creada en el Ayuntamiento de Bilbao como de crisis profunda y colapso. ?El PNV?, declaraba a EL PAIS, ?no ha entendido lo que es un ayuntamiento pluralista y democr¨¢tico. O esta situaci¨®n, que produce un creciente deterioro y falta de credibilidad en Casta?ares y en el PNV, cambia o no podremos continuar as¨ª ?.

Esta velada insinuaci¨®n del edil socialista sobre una posible petici¨®n de dimisi¨®n del alcalde si las cosas no cambian es, sin embargo, explicada por la representaci¨®n de Euskadiko Ezkerra en el Ayuntamiento bilba¨ªno. Con base en los mismos argumentos de Ib¨¢?ez, considera la actuaci¨®n de Casta?ares como antidemocr¨¢tica.

Por otra parte, y ese es otro aspecto clave de la crisis, la mayor¨ªa del PNV en la corporaci¨®n municipal de Bilbao se tambalea si se confirma el malestar de los concejales de UCD, que hasta la fecha han apoyado frecuentemente las posturas del PNV en los plenos, por la situaci¨®n creada por las actuaciones ?demasiado personales? del alcalde.

Jon Casta?ares, el protagonista principal de la crisis, no quiere hacer declaraciones. S¨®lo se le ha escuchado decir que la crisis tiene una soluci¨®n pol¨ªtica, ?que es la de que el ayuntamiento vuelva a ser un ¨®rgano de administraci¨®n y de gobierno del pueblo de Bilbao, y no un parlamento ni un departamento legislativo?.