El mercado de pescados de Mercamadrid podr¨¢ comenzar a funcionar para San Isidro
El recalce definitivo del mercado de pescados de Mercamadrid comenzar¨¢ en breve tiempo, una vez que sea firmado el contrato con la empresa que se va a encargar de realizar las inyecciones de hormig¨®n necesarias para que el edificio no se venga abajo. Una vez que las obras citadas hayan comenzado, su plazo de ejecuci¨®n es de cinco meses, tiempo que asegura la terminaci¨®n de las obras con plazo suficiente como para que el nuevo mercado sea inaugurado, como mucho, en las fiestas de San Isidro, tal como adelant¨® el ayuntamiento.
Las obras que ahora van a ser emprendidas se hicieron necesarias en diciembre del a?o pasado, fecha en la que aparecieron unas grietas en el suelo que hicieron pensar a los t¨¦cnicos en un peligro inminente para la estructura del edificio. La procedencia inmediata de esas grietas estaba en la mala calidad de los terrenos sobre los que se asientan los nuevos mercados centrales de Madrid y que ya fue advertida por la constructora de ese primer edificio, a partir del momento en que comenzaron las obras. Sin embargo, se improvis¨®, en aquel momento, una soluci¨®n barata y los problemas aparecieron meses despu¨¦s.La soluci¨®n definitiva se puso en marcha en el mes de febrero de 1980, en que comenzaron una serie de ensayos destinados a detectar exactamente el mal geol¨®gico del suelo y averiguar las soluciones que t¨¦cnicamente fueran posibles.
Esos ensayos han terminado hace unos d¨ªas -lo que indujo a pensar que hab¨ªan sido paralizadas las obras de recalce- y la reparaci¨®n de Mercamadrid entra ahora en su fase definitiva.
La m¨¢s dif¨ªcil decisi¨®n a tomar por los responsables de las obras fue la de cu¨¢l de las dos soluciones que hab¨ªan sido presentadas ser¨ªa la que, al final; ser¨ªa ejecutada.
Exist¨ªa un proyecto que contemplaba la puesta en funcionamiento de un procedimiento de cimentaci¨®n italiano, denominado palo de ra¨ªz, que consist¨ªa, fundamentalmente, en la introducci¨®n en el suelo de unos micropilotes de hormig¨®n que, una vez dentro, se expand¨ªan, formando una capa subterr¨¢nea que sustentar¨ªa el edificio. Sin embargo, el sistema hubo de ser recalizado, dado que encarec¨ªa extraordinariamente el costo.
El sistema adoptado, finalmente, consiste en la introducci¨®n de unos pilotes peque?os que, a diferencia del sistema anterior, no se expanden en el subsuelo. Sin embargo, el recalce por este procedimiento es reforzado con un n¨²mero no determinado de inyecciones de hormig¨®n que son las que ahora han de ser realizadas.
El coste total de esas obras de reparaci¨®n del mercado de pescados de Mercamadrid ascender¨¢ a una cifra oscilante -puesto que el precio es abierto, en funci¨®n de la mayor o menor cantidad de hormig¨®n necesaria- entre los setenta y los noventa millones de pesetas.
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