Oreja y Ros¨®n presidieron los funerales
En medio de una gran tensi¨®n y sin incidentes destacables se celebr¨® aver en el Gobierno Civil de Guip¨²zcoa el funeral en memoria de los cuatro guardias civiles v¨ªctimas del atentado registrado en la noche del lunes en, Zarauz. Al funeral, de car¨¢cter restringido, asistieron el gobernador general del Pa¨ªs Vasco, Marcelino Oreja, el ministro del Interior, Juan Jos¨¦ Ros¨®n, que se neg¨® a hacer cualquier tipo de declaraciones, y el director de la Guardia Civil, g¨¦neral Aramburu.Alrededor del edificio del Gobierno Civil se hab¨ªa montado un impresionante dispositivo policial pocas veces visto. Unicamente los familiares y compa?eros de las v¨ªctimas y las autoridades pudieron acceder al sal¨®n del trono, donde, a partir de las 3.30 horas, se celebr¨® el acto religioso. A los informadores, al parecer por orden directa del ministro del Interior, se les prohibi¨® no s¨®lo la presencia en el acto religioso, sino incluso el acceso al edificio.
En su homil¨ªa, el capell¨¢n castrense pidi¨® a los gobernantes que una vez hecho el diagn¨®stico de la enfermedad que padece Espa?a ?no tengan ning¨²n reparo en poner el remedio, por doloroso que sea, ya que es preferible salvar al enfermo que dejarlo morir?.
?Porque?, a?adi¨®, ?ETA jam¨¢s puede llamarse militar, cuando la milicia es la religi¨®n de hombres honrados, y esos desalmados ni son hombres, ni son honrados, ni tienen religi¨®n. El apellido apropiado puede ser perfectamente el de asesina y si quieren tener dos, a?adir el de cobarde?.
Al t¨¦rmino del funeral, los f¨¦retros fueron conducidos a hombros de companeros al patio posterior del Gobierno Civil, donde estaba formacia una compa?¨ªa de la Guardia Civil y banda de m¨²sica. En este momento se escucharon gritos de ??Viva Espa?a?!, ??Viva la Guardia Civil?!, ??Vivan los heroes y muera ETA?!
A partir de este momento se produjeron algunas situaciones aisladas de verdadera tensi¨®n. Al salir del Gobierno Civil, una se?ora se dirigi¨® a escasos metros al ministro del Interior: ?A ver qu¨¢ le dice ahora a Su¨¢rez de todos estos muertos?. La mujer fue inmediatamente retenida e identificada. Uno de los hermanos de la v¨ªctima, que profiri¨® varios gritos contra ETA, lleg¨® a decir, preso de la emoci¨®n, ?aqu¨ª hace falta un nuevo Guernica?.
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