Una econom¨ªa en declive

El valor de la producci¨®n total generada en Asturias en el a?o 1975 ascend¨ªa a 345.306 millones de pesetas, de los cuales 231.155 millones proced¨ªan de la actividad industrial, 86.011 millones proven¨ªan de los servicios, y solamente 28.140 millones se originaban en el sector primario, seg¨²n datos del informe elaborado por la Confederaci¨®n Espa?ola de Cajas de Ahorros sobre ?La econom¨ªa asturiana ante la autonom¨ªa regional?.El producto interior bruto ascendi¨® en aquel a?o a 160.072 millones de pesetas. La procedencia sectorial del PIB est¨¢ fuertemente desequilibrada, dada la preponderancia del sector industrial sobre los dem¨¢s. En valores porcentuales, la industria origina el 51,9% del PIB, mientras que los servicios generan el 38,4%, y el sector primario tan s¨®lo el 9,7%.

La grave situaci¨®n del sector primario viene definida por el hecho de que para obtener el 9,7 % del PIB, ocupa al 26% de, la poblaci¨®n activa. Paralelamente, la participaci¨®n del sector primario en el PIB est¨¢ decreciendo en t¨¦rminos relativos, lo que revela el deterioro econ¨®mico del sector.

La actividad agraria ha venido caracteriz¨¢ndose por registrar un porcentaje muy alto de poblaci¨®n ocupada (algo m¨¢s del 25%) que, por el contrario, s¨®lo contribuye a la formaci¨®n de la renta provincial en una reducida proporci¨®n (menos del 10%).

El problema fundamental que aqueja al sector agrario asturiano y constituye su principal estrangulamiento es el de un minifundismo acentuado. Seg¨²n el censo agrario de 1972, en Asturias exist¨ªan 88.179 explotaciones agrarias y 811.242 parcelas, con una superficie media de menos de diez hect¨¢reas por explotaci¨®n, y de 1,1 hect¨¢reas por parcela, indicadores muy por debajo del conjunto nacional, que se sit¨²an en 18,1 y 1,7 hect¨¢reas, respectivamente, en el a?o mencionado.

No obstante la base estructural inadecuada, Asturias ocupa un destacado lugar como regi¨®n productora de leche, madera, manzana, ma¨ªz y patata. Sin embargo, la dedicaci¨®n regional a la producci¨®n l¨¢ctea no est¨¢ en relaci¨®n con el potencial con el que cuenta la zona. Tambi¨¦n en este subsector agrario destaca la fragmentaci¨®n productiva, siendo la caracter¨ªstica principal la abundancia de explotaciones lecheras que no pasan de estar constituidas por dos o tres vacas, cuya producci¨®n media anual de menos de 10.000 litros representa el 50% de las explotaciones lecheras censadas en la regi¨®n.

La inversi¨®n p¨²blica efectuada en la agricultura asturiana durante el cuatrienio 1968-1971 supuso solamente 286 millones de pesetas, cifra que viene a representar el 1,59% de la inversi¨®n del.conjunto del pa¨ªs en el sector y que sit¨²a a Asturias en trig¨¦simo lugar provincial.

Seg¨²n datos de la C¨¢mara de Comercio, la producci¨®n de leche en 1979 fue inferior a la de 1978 en un 1,2%, a la vez que las entregas a las centrales aumentaron en un 5,2%. La carne sacrificada en mataderos asturianos registr¨® un avance del 1,3%. Hay que destacar el incremento de la carne de bovino en un 9,5% y el descenso de la de porcino en un 7,5 %.

En el sector pesquero las cosas no marcharon mejor durante el pasado a?o. Los desembarcos en peso registraron una tasa anual negativa del 8,8 %. El valor de la pesca desembarcada se aproxim¨® a los 2.000 millones de pesetas.

Dentro del contexto econ¨®mico regional, la industria es el sector m¨¢s relevante, dado que en 1975 representaba el 52% del Valor A?adido Bruto asturiano. Su importancia se detecta tambi¨¦n en el hecho de que Asturias es la primera productora de hulla, acero, espato, fl¨²or, aluminio, zinc y energ¨ªa el¨¦ctrica.

No obstante, a lo largo de los ¨²ltimos a?os, la industria asturiana registra un ritmo de desarrollo sensiblemente inferior que el obtenido por el conjunto del pa¨ªs, alcanzando, en el per¨ªodo 1960-1975, una tasa de expansi¨®n del 13,6% anual acumulativo, frente 2, un 17,4% a nivel nacional. La reestructuraci¨®n de la miner¨ªa del carb¨®n y de la siderurgia, junto con el escaso grado de diversificaci¨®n de la estructura sectorial, constituyen la explicaci¨®n fundamental de ese menor ritmo de crecimiento.

El desequilibrio entre industrias b¨¢sicas e industrias transformadoras es el factor que caracteriza. al sector industrial asturiano.

Por lo que se refiere a la infraestructura viaria, Asturias contin¨²a siendo una regi¨®n aislada. Las comunicaciones por carretera Y v¨ªa f¨¦rrea se ven dificultadas enormemente por una orograf¨ªa dif¨ªcil, que tiene su m¨¢xima expresi¨®n en el puerto de Pajares.

En este sentido, el retraso que registran las obras de construcci¨®n de la autopista que comunicar¨¢ Asturias con Castilla, cuyo coste adicional por cada a?o que supere los plazos previstos oscilar¨¢ entre los 2.000 millones y los 4.000 millones de pesetas (v¨¦ase EL PAIS del pasado d¨ªa 8), constituye una nueva preocupaci¨®n para las esperanzas asturianas de ver comunicada su regi¨®n con el resto del Estado.

En el cap¨ªtulo de finanzas, la recaudaci¨®n impositiva creci¨® en 1979 a tina tasa del 22,5 %, mientras que los pagos presupuestarios lo hicieron al 24,9%. Del lado de los ingresos, destaca el crecimiento en un 28,6% del cap¨ªtulo de impuestos directos, que contrasta con el m¨¢s moderado del 13,7% de los impuestos indirectos.

Al concluir el a?o, los dep¨®sitos en las instituciones financieras arrojaban un saldo de 237.868 millones de pesetas, lo que supone un crecimiento anual de los mismos del 21,4%. Paralelamente, se produjeron cambios significativos en la estructura de dep¨®sitos, de forma que ceden terreno las cuentas a la vista y las de ahorro -las primeras en mayor medida que las segundas-, en beneficio de los dep¨®sitos a plazo que, tras un incremento del 30% en el a?o, llegan a representar el 40% del total de recursos ajenos de las instituciones financieras radicadas en Asturias.

En cuanto a la posible transferencia de fondos de la regi¨®n al resto del Estado, la falta de datos sobre las cifras provinciales de cr¨¦dito bancario distribuido no permite su determinaci¨®n.

S¨ª se puede asegurar, sin embargo, que los recursos invertidos por las cajas en fondos p¨²blicos vuelve, en parte, indirectamente a la propia regi¨®n a trav¨¦s del coeficiente de inversi¨®n obligatoria por la v¨ªa de las empresas p¨²blicas y compa?¨ªas el¨¦ctricas ubicadas en Asturias.

Asturias, sin embargo, no ha sido una regi¨®n desfavorecida por lo que se refiere a los intermediarios financieros que constituyen las entidades oficiales de cr¨¦dito. As¨ª, a finales de 1973, Asturias figuraba en segundo lugar en cuanto al saldo del cr¨¦dito oficial por persona, que se elevaba en dicha fecha a un 219,44% sobre la media nacional. Hay que tener en cuenta que entre las l¨ªneas de cr¨¦dito del Banco de Cr¨¦dito Industrial, principal entidad inversora en la regi¨®n, figuran los Polos de Desarrollo y la Acci¨®n Concertada, medidas de pol¨ªtica econ¨®mica ambas que han afectado a Asturias de manera notoria durante los ¨²ltimos a?os. Y, sin duda, donde m¨¢s privilegiada resulta Asturias es en la inversi¨®n p¨²blica realizada directamente por la Administraci¨®n central. As¨ª, en 1973, la inversi¨®n realizada en la regi¨®n representaba el 5,8% del total nacional, cuando en dicho a?o el valor a?adido bruto generado en Asturias significaba el 3,3 % del total nacional.