Tres j¨®venes belgas secuestraron un autob¨²s escolar con nueve ni?os

Durante nueve horas, toda B¨¦lgica se mantuvo ayer en un estado de gran tensi¨®n a la espera del desenlace de un secuestro espectacular y disparatado. Tres j¨®venes. franc¨®fonos, de diecis¨¦is a veinti¨²n a?os, secuestraron a las 7.30 horas un autocar escolar con nueve ni?os y dos adultos, y exigieron poder emitir a todo el pa¨ªs, a trav¨¦s de la televisi¨®n y la radio, un mensaje sobre el paro y la injusticia social.

El secuestro termin¨® a las 17.15 horas en los pasillos de la RTBF (televisi¨®n franc¨®fona), cuando la polic¨ªa consigui¨® detener a los secuestradores sin provocar un solo herido. Los tres j¨®venes -dos hermanos de diecis¨¦is y dieciocho a?os y un amigo de veintiuno, los, dos mayores en paro- decidieron realizar una acci¨®n espectacular para llamar la atenci¨®n sobre la crisis social que atraviesa B¨¦lgica. Armados con, al menos, un rifle Winchester y abundante munici¨®n, secuestraron un autob¨²s que se dirig¨ªa, vac¨ªo, a recoger escolares de la zona de Vielsam, a unos 160 kil¨®metros, de Bruselas. Los j¨®venes obligaron al conductor, un hombre de 59 a?os, padre de seis hijos, a dirigirse al aparcamiento de un colegio y obligaron a subir a nueve ni?os y ni?as, de doce a diecis¨¦is a?os, as¨ª como a una vigilancia. Un profesor de Historia, que observ¨® el secuestro, se ofreci¨® para reemplazar a la mujer y su oferta fue aceptada.Secuestradores y secuestrados se dirigieron al edificio de la emisora de televisi¨®n franc¨®fona, donde les esperaba ya un fuerte despliegue policial. El primer ministro, Wilfried Martens, informado del suceso, convoc¨® el ?Gabinete de crisi?, y en un despacho de la propia RBTF, los ministros de Justicia y del Interior, el fiscal del Reino y el comandante en jefe de la gendarmer¨ªa dirigieron, con enormes precauciones, las negociaciones. Martens asegur¨® a los padres de los ni?os, llegados urgentemente a Bruselas, que se actuar¨ªa con ?extrema prudencia?, sobre todo, despu¨¦s de que los tres j¨®venes efectuaran algunos disparos contra los coches estacionados en las proximidades del autob¨²s.

Mientras se preparaba un estudio especial de la televisi¨®n -o al menos as¨ª se les hizo creer a los secuestradores-, polic¨ªas con chalecos antibalas cercaron el autob¨²s, y cuando, cerca de las cinco de la tarde, se anunci¨® a los tresj¨®venes que todo estaba dispuesto para su ?mensaje?, la polic¨ªa ya hab¨ªa preparado varias ?trampas? en los pasillos de la televisi¨®n, de forma que, eligieran el trayecto que eligieran, todo estuviera previsto.

Sin disparar un solo tiro y sin provocar un solo herido, los gendarmes lograron apresar a los secuestradores y liberar a los ni?os.