Estreno de "Gary Cooper, que est¨¢s en los cielos", de Pilar Mir¨®
Anoche se estren¨® Gary Cooper, que est¨¢s en los cielos, tercer largometraje de Pilar Mir¨®, con gui¨®n de ella misma y del reciente premio Planeta, Antonio Larreta. ?Es un gui¨®n escrito con anterioridad al verano de 1978?, declara la autora, ?pero cuando lo termin¨¦, pas¨® lo de siempre: el proyecto qued¨® aplazado. En esta ocasi¨®n, el aplazamiento se debi¨® a la propuesta de un tema interesante: la cr¨®nica de un ?error judicial? que ocurri¨® en la provincia de Cuenca hace setenta a?os ..., pel¨ªcula de la que de momento prefiero no hablar, por absoluto agotamiento?.
?Tras todos los incidentes que esta segunda pel¨ªcula acarre¨®? (El crimen de Cuenca, por supuesto, t¨ªtulo que Pilar Mir¨® pretende ya hasta eludir), ?y viendo la creciente crisis de la industria cinematogr¨¢fica espa?ola, no vi m¨¢s soluci¨®n para afrontar un nuevo rodaje que abordando alguna de las f¨®rmulas inventadas ya o por inventar a¨²n de autoproducci¨®n. La operaci¨®n, en resumen, se ha llevado de la siguiente forma: el coste de la pel¨ªcula roza los veintid¨®s millones de pesetas, que han sido sufragados en un 35% por Incine, el 15% por Jet Films y el 50% restante por la productora que he tenido que crear (Pilar Mir¨®, PC), que, a su vez, se compone de aportaciones en met¨¢lico, aportaciones en trabajo y letras diferidas... Obviamente, si la distribuci¨®n de la pel¨ªcula no se hace con un cierto cari?o, si su exhibici¨®n se reduce a cubrir la obligada cuota de pantalla, si el 50% que no me pertenece se da por bien invertido s¨®lo para obtener autom¨¢ticamente la importaci¨®n de tres pel¨ªculas extranjeras, no creo que el espectador tenga tiempo para enterarse que Gary Cooper, que est¨¢s en los cielos, puede conectar con ¨¦l mucho mejor, a mi juicio, que cualquier pel¨ªcula americana -pese a sus estrellas y superproducciones-, simplemente porque le estamos contando una historia que ocurre aqu¨ª y ahora ?.Cuando se habla con Pilar Mir¨® de la significaci¨®n del t¨ªtulo de su pel¨ªcula queda un momento callada, como si pretendiera no responder. Pero finalmente relata algunos de los recuerdos y de los miedos de su infancia: ?Pero cada vez que ve¨ªa una pel¨ªcula de Gary Cooper el mundo cambiaba. S¨®lo ¨¦l pod¨ªa llegar en el ¨²ltimo momento y, tendi¨¦ndome la mano, subirme a la grupa de su caballo. S¨®lo ¨¦l era lo suficientemente ¨ªntegro para acabar con una mirada con el miedo que me produc¨ªan mi padre, las monjas y las am¨ªgdalas ?.
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