Una parte importante de las actividades culturales y deportivas se desarrolla en edificios del extinguido Movimiento

Todos aquellos edificios procedentes de la extinguida Secretar¨ªa General del Movimiento han pasado a ser utilizados para actividades deportivas, juveniles o de la tercera edad, desde la transferencia de la propiedad de estos inmuebles al Ministerio de Cultura, decisi¨®n adoptada en Consejo de Ministros el 30 de diciembre de 1977.A partir de esta fecha comenzaron a retirarse los conocidos emblemas que ostentosamente se exhib¨ªan en las paredes de los edificios, y los portadores de camisas azules recogieron sus yugos y flechas para trasladarse a las sedes de sus propias asociaciones y partidos a cantar sus apolillados himnos y, vivir de los recuerdos de sus haza?as b¨¦licas.

Un total de 1.399 edificios, 369 de ellos arrendados, repartidos por toda Espa?a, quedaron a disposici¨®n de las delegaciones provinciales de Cultura para cubrir las necesidades de cada pueblo o provincia. En Madrid, concretamente, los 69 inmuebles existentes, entre la capital y la provincia, tienen una utilizaci¨®n diaria y no queda ninguno por adjudicar para cualquier actividad.

Ram¨®n G¨®mez de la Cuesta, subdirector general de Inmuebles y Obras del Ministerio de Cultura, asegura que el rendimiento y utilizaci¨®n de los edificios es de un ciento por ciento. El uso ha correspondido en un 80% a Juventud y Desarrollo Comunitario, y el resto a servicios de las delegaciones de Cultura y a Deportes.

?No se han planteado ningunas directrices ni establecido propiedades?, asegura G¨®mez de la Cuesta, ?porque se ha preferido que cada delegaci¨®n provincial, a la vista de las necesidades, les diera un destino determinado?

Problemas jur¨ªdicos cuatro d¨¦cadas despu¨¦s

La procedencia originaria de algunos de estos inmuebles -entre ellos el de Alcal¨¢, 44, propiedad de la familia de la reina Fabiola- ha planteado serios problemas en cuanto a la determinaci¨®n de la propiedad de los edificios, problemas que han surgido ahora cuando despu¨¦s de cuatro d¨¦cadas quienes ahora reivindican la propiedad no dijeron nada. ?La situaci¨®n jur¨ªdica de algunos edificios es poco clara, y en estos momentos estamos intentando dejar las cosas claras, pero muchos papeles de propiedad se perdieron. Luego, algunos fueron afectados a organismos aut¨®nomos y no hay quien se aclare?.Sin embargo, pese al total rendimiento de los inmuebles y al control sobre ellos que el Ministerio de Cultura asegura tener, en Madrid se ha producido alg¨²n caso de abandono total de valiosos edificios.

Un conocido ejemplo es el del Migrans, de San Blas, antigua escuela de mandos de Jos¨¦ Antonio, convertido primero en centro cultural, pero que por el abandono del Ministerio y mala gesti¨®n de las entidades juveniles en cuyas manos qued¨®, est¨¢ hoy convertido en poco menos que un basurero y uno de los focos de delincuencia m¨¢s denunciados por las asociaciones de vecinos del distrito.

Otros muchos permanecieron largos meses cerrados, con el consiguiente, deterioro e indignaci¨®n por parte de entidades juveniles, feministas o vecinales que no encontraban un hueco en el que reunirse, aunque tambi¨¦n hay que reconocer una cierta desidia por parte de las administraciones locales frente al tema. As¨ª las cosas, el panorama actual muestra que, del millar largo de edificios, son ahora escenarios de tertulias de ancianos, actividades de car¨¢cter familiar y, sobre todo, centros de la juventud, a los que diariamente asisten cientos de muchachos, cuyas pretensiones est¨¢n m¨¢s encaminadas al deporte y al entretenimiento propios de su edad que a cantar himnos marciales o a asimilar ideas de dominios imperiales.

Seg¨²n el inventario actual del Ministerio de Cultura, los inmuebles ubicados en la capital son utilizados para -y por este orden- el desarrollo de actividades deportivas (ajedrez, b¨¦isbol, motorismo e instalaciones deportivas en general), asociaciones juveniles, entidades femeninas, educaci¨®n de adultos, escuela de aeromodelismo, centros de informaci¨®n, centro de c¨¢lculo y albergues para la tercera edad.

De los centros instalados en la provincia de Madrid, la mayor¨ªa situados en los pueblos de la sierra, pr¨¢cticamente la totalidad es utilizada como albergues de la juventud, y cuentan con la asistencia casi diaria de ni?os procedentes de distintos colegios madrile?os, que acuden a estos locales para practicar deporte y realizar actividades propias de su edad.

Los principales edificios

Palacio de los Deportes, en la avenida de Felipe II; parque de San Juan Bautista (instalaciones deportivas); cuartel de la Monta?a (hoy, instalaciones deportivas); Almagro, 28 (artesan¨ªa comunitaria); Hernani esquina a General Moscard¨® (colegio Cardenal Cisneros); Montesquinza, 42 (centro social), San Bernardo, 24 (Consejo de la Juventud y centro juvenil); Alonso Cano, 99 (gimnasio); Barquillo 19 (Delegaci¨®n de Deportes de Madrid); Santa Cruz de Marcenado (albergue de juventud) y Serrano, 3 (aula de tercera edad). Las federaciones de Beisbol, Ajedrez, Motorismo y F¨²tbol tambi¨¦n est¨¢n ubicadas en edificios que fueron propiedad de la extinguida Secretar¨ªa General del Movimiento. En la Ciudad Universitaria se encuentran las instalaciones del INEF. En los pueblos de Navacerrada, Paracuellos del Jarama, Cenicientos, Cercedilla, Colmenar Viejo, San Lorenzo del Escorial, Rascafr¨ªa, El Pardo, El Escorial y Pozuelo de Alarc¨®n diecis¨¦is edificios revertieron igualmente al Ministerio de Cultura y fueron dedicados principalmente a campamentos y albergues para la juventud.