Falleci¨® Raoul Walsh, pionero de Hollywood y director de m¨¢s de 100 pel¨ªculas
Durante medio siglo cultiv¨® todos los g¨¦neros cinematogr¨¢ficos
Raoul Walsh, director norteamericano de cine, falleci¨® anteayer, en Los Angeles, a la edad de 88 a?os, a consecuencia de un paro card¨ªaco. El veterano cineasta cubri¨® toda la historia del cine norteamericano, desde la etapa pionera de David Wark Griffith hasta completar una extensa filmograf¨ªa de m¨¢s de un centenar de t¨ªtulos, entre las que destacan sus dos obras maestras, El ladr¨®n de Bagdad en la ¨¦poca muda (1924) y el espectacular western hist¨®rico La gran jornada, al inicio del cine sonoro (1930). Raoul Walsh, que tambi¨¦n cultiv¨® la m¨²sica y la pintura, fue colaborador habitual en los guiones que dirig¨ªa y se distingui¨® por ser uno de los grandes artesanos del viejo Hollywood, maestro en el arte de narrar con sencillez una historia cinematogr¨¢fica.
Raoul Walsh naci¨® en Nueva York, el 11 de marzo de 1892 (en 1889, seg¨²n otras fuentes), hijo de padre irland¨¦s y de madre espa?ola. Vivi¨® su infancia en Manhattan, donde conoci¨® de ni?o a numerosas celebridades, entre ellas al escritor Mark Twain, al actor Edwin Booth, hermano de John Wilkes Booth (asesino del presidente Abraham Lincoln) y al boxeador John L. Sullivan, campe¨®n del mundo de pesos pesados. Raoul Walsh pudo vivir al amparo de su Padre, jefe de un taller de moda masculina., pero prefiri¨®, de adolescente, partir para Cuba en un peque?o barco de su t¨ªo y regresar a Tejas para aprender el oficio de vaquero.La vida de Raoul Walsh -que France Presse eleva a la altura de las legendarias figuras de John Ford y de John Wayne- fue desde entonces una aventura en el sentido m¨¢s literal del t¨¦rmino. Pocos hombres pueden vanagloriarse de haber padecido un naufragio, domar caballos salvajes, llevar en sus brazos la cabeza de un decapitado, asistir a un m¨¦dico de pr¨¢cticas turbias, recorrer M¨¦xico al lado de Pancho Villa y de su ej¨¦rcito, encontrarse con Hitler y ser nombrado hermano de sangre de la tribu india de los navajos.
El veterano director inici¨® su vida art¨ªstica como actor de teatro en 1910 (su hermano George tambi¨¦n fue actor), despu¨¦s de asistir a un curso de arte dram¨¢tico con Paul Armstrong, y fue un profundo conocedor de la obra de Shakespeare. Su carrera cinematogr¨¢fica est¨¢ vinculada a una de las primeras firmas norteamericanas, la Biograph, donde debut¨® como actor a las ¨®rdenes de David W. Griffith , el patriarca del cine y el pionero del lenguaje narrativo cinematogr¨¢fico. Interpret¨® para Griffith el papel del asesino de Lincoln en una de las m¨¢s importantes y decisivas pel¨ªculas de toda la historia del cine: El nacimiento de una naci¨®n (1915). Altern¨® su trabajo como actor -interpret¨® tambi¨¦n a Pancho Villa en pel¨ªcula supervisada por Griffith- y ayudante de ¨¦ste, a quien no abandon¨® aun despu¨¦s de estrenarse como director, en 1916, con His return (Su retorno).
Raoul Walsh, alto, con un parche en el ojo derecho (que perdi¨® en 1929, mientras localizaba exteriores para una pel¨ªcula, cuando un conejo se precipit¨® contra el parabrisas de su coche), vestido con sombrero vaquero durante casi toda su vida, dirigi¨® en medio siglo de cine a la mayor¨ªa de las grandes estrellas del cine: Mary Pickford, Gloria Swanson, Marlene Dietrich, Humphrey Bogart, Douglas Fairbanks, James Cagney, John Wayne (quien precisamente debut¨® con Walsh en La gran jornada), Aland Ladd, Gregory Peck y un largo etc¨¦tera. Cultiv¨® todos los g¨¦neros y estuvo casado con las actrices Miriam Cooper y Lorraine Walker.
El viejo ?poeta, borracho y pendenciero ?, como se autodefini¨®, no perdi¨® nunca el sentido del humor a pesar de que vivi¨® los ¨²ltimos a?os de su vida completaniente ciego. ?Todav¨ªa puedo sentarme sobre una barandilla y disfrutar del canto de los p¨¢jaros?, dijo recientemente, ?gozar del perfume de las flores e incluso sorprenderme ante el paso de los agentes del fisco?. Raoul Walsh escribi¨® a sus ochenta a?os una novela picaresca, La ira de los justos, y pudo terminar su autobiograf¨ªa, titulada Cada hombre en su tiempo o Medio siglo en Hollywood, seg¨²n la traducci¨®n del editor franc¨¦s.
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