JaruzeIski: un militar de carrera nacionalista
El general Wojciech Jaruzelski, nombrado ayer por el Comit¨¦ Central del partido comunista nuevo primer ministro de Polonia, tiene 58 a?os. Originario de una familia de la peque?a nobleza polaca, una parte de la cual muri¨® tras ser deportada a la URSS durante la segunda guerra mundial, ¨¦l mismo emigr¨® a la Uni¨®n Sovi¨¦tica en 1940 para enrolarse all¨ª, tres a?os m¨¢s tarde, en el Ej¨¦rcito polaco formado en territorio sovi¨¦tico.Educado en la Escuela de Oficiales de Riazan (URSS), combati¨® en las filas de la divisi¨®n Dabrowski, antes de participar, una vez terminada la guerra, en la lucha contra las bandas antigubernamentales que subsist¨ªan en el este de Polonia.
En 1960, Jaruzelski se convirti¨® en el jefe del departamento pol¨ªtico de las fuerzas armadas polacas, siendo nombrado un a?o m¨¢s tarde viceministro de Defensa y jefe del Estado Mayor Conjunto. En 1964 ingresa en el Comit¨¦ Central del partido comunista y en 1968 es designa lo ministro de Defensa.
El nuevo jefe del Gobierno entr¨® en el partido comunista en 1947. Diputado de la Dieta (Parlamento) desde 1961, tiene reputaci¨®n de nacionalista. Seg¨²n los expertos occidentales, ha contribuido en gran medida a hacer de las fuerzas armadas polacas un Ej¨¦rcito homog¨¦neo, orgulloso de su bandera y respetuoso de sus jefes.
Miembro suplente del Bur¨® Pol¨ªtico en 1970, al a?o siguiente pas¨® a ser miembro de pleno derecho, llevando a cabo una carrera de militar y hombre de Estado.
Durante las huelgas del pasado mes de agosto, que originaron el nacimiento de los sindicatos independientes, Jaruzelski se habr¨ªa opuesto al uso de la fuerza contra los obreros, as¨ª como en los acontecimientos de diciembre de 1970 en los puertos del B¨¢ltico, que provocaron decenas de muertos. Al parecer, aquella posici¨®n le cost¨® hace once a?os un arresto domiciliario.
El 5 de septiembre de 1980, cuando Edvard Gierek, aquejado de una crisis cardiaca, es destituido de su cargo de primer secretario del POUP, el general Jaruzelski, seg¨²n informaciones que nunca han sido desmentidas, se escuda en su cualidad de soldado para negarse a tomar la direcci¨®n del partido, que recae en Stanislaw Kania.
Durante las fiestas de fin de a?o corrieron extra?os rumores sobre el ministro de Defensa: los sovi¨¦ticos habr¨ªan perdido su confianza en Jaruzelski. Sin embargo, unos d¨ªas m¨¢s tarde apareci¨® como vicepresidente del Frente de Unidad Nacional (FJN), etiqueta de la lista ¨²nica, bajo la cual se presentan los candidatos a las elecciones, siendo el primer ministro de Defensa en ocupar tales funciones. Se comienza a hablar de ¨¦l como futuro primer ministro, aunque Pravda, en su informaci¨®n sobre el reajuste en el FJN, olvida su nombre.
Contin¨²a apareciendo en todos los desfiles militares y mantiene una entrevista el 13 de enero, en la capital polaca, con el mariscal sovi¨¦tico Kullkov, jefe de las tropas del Pacto de Varsovia. Normalmente se sienta a la izquierda del primer ministro, Jozez Pinkowski.
Sus raras tomas de posici¨®n pol¨ªtica conocidas se centran en el tema de la unidad nacional pero el diario del deI ej¨¦rcito, Zolnierz Wolnosci, que l¨®gicamente representa las opiniones del Ministerio de Defensa, no ha cesado de hacer sonar la se?al de alarma a medida que se deterioraba en las ¨²ltimas semanas la situaci¨®n pol¨ªtica y social del pa¨ªs.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.