Orgullo y soledad

Salto al vac¨ªoDirector: Marco Bellocch¨ªo. G¨²i¨®n: Marco Bellocchio, Piero Natoli, Vicenzo Ceram.. Fotograf¨ªa: Beppe Lanci. M¨²sica: Nicola Piovani . Int¨¦rpretes: Michel Piccoli, Anouk Aim¨¦e, Michele Placido, Gisella Burinato, Antonio Piovanelli, A nna Orso. Dram¨¢tico. Italia-Francia. Local de estreno: cine Azul

La locura parece ser tema predilecto de Marco Bellocchio en sus ¨²ltimos. filrnes. Realizador de Matti da slegare, encuesta sobre los manicomios, ahora vuelve con un largometraje de ficci¨®n que incluye personajes de parecida ¨ªndole.

Nos presenta a dos hermanoos muy bien interpretados, por Michel Piccoli y Anouk Aim¨¦¨¦, unidos y enfrentados a un tiempo por un v¨ªnculo de orgullo y soledad, aparte de los puramente familiares.

La presentaci¨®n de ambos, en la vieja casa familiar, es un ejemplo de eficacia. Apenas unos instantes y ya los rasgos de uno y otro se definen de mcdo muy cinematogr¨¢fico, sin necesidad de los acostumbrados di¨¢logos que todo lo preparan y explican. La evoluci¨®n de los protagonistas se halla dada entre el sarcasmo y la iron¨ªa que recuerdan los primeros relatos del autor y una especial o particular poes¨ªa qu¨¦. desde un principio aparece en los momentos mejores. La obsesi¨®n por el suicidio que ronda la casa, el recuerdo de los ni?os en los mismos salones sombr¨ªos donde se acecha la pareja, el contrapunto vivo de la cr¨ªada, vienen dados con gran sabidur¨ªa, as¨ª como la amistad di Marta con ella.

Una t¨¦cnica tan dif¨ªcil como inteligente, basada casi siempre eri la ausencia de planos generales, resuelve en el reducido espacio de unas cuantas habitaciones los problemas que plantea ofrecer al espectador una imagen del encierro interior en el que Marco y Marta se debaten. Lo que fuera sucede resulta s¨®lo complementario, incluso demasiado l¨ªterario, como el tercer personaje en discordia, con su teatro junto al r¨ªo y su desaf¨ªo a una sociedad quejuzga irrecuperable. En ¨¦l se reconoce tambi¨¦n al autor de Pugni in tasca, menos humano y m¨¢s artificioso, que a veces casa mal con el resto de la,historia. Salvo en tales momentos, los di¨¢logos se hallan muy por encima de intentos similares, as¨ª como la m¨²sica, que, junto a la fotograria excelente, va marcando, desde principio a fin, este relato de seres enfrentados por la locura y la raz¨®n cuando no por un l¨®rdido ego¨ªsmo donde, como tantas veces sucede, la vida se acabar¨¢ rompiendo por el lado m¨¢s d¨¦bil cuando la soledad cumple su ¨²ltimo y definitivo plazo.