Acuerdo de principio para negociar la reestructuraci¨®n de Hunosa
Un anticipo de 4.000 pesetas al mes a cuenta del convenio colectivo y el comienzo inmediato de las obras de reprofundizaci¨®n del pozo Barredo, hasta ahora amenazado de cierre, consiguieron desbloquear la situaci¨®n creada entorno al comienzo de las negociaciones sobre el plan de reconversi¨®n de Hunosa.Las centrales sindicales se negaban a sentarse a negociar por los dos motivos citados y porque se muestran en desacuerdo con la elaboraci¨®n unilateral de los objetivos de la sociedad para el trienio 1981-1983 por parte de la Administraci¨®n. CC OO incluso cuestion¨® la facultad del INI, ¨²nico accionista de Hunosa, para fijar tales objetivos, mientras que el SOMAUGT propugna una negociaci¨®n a dos niveles: de los sindicatos con la Administraci¨®n para establecer los objetivos y de los sindicatos con la direcci¨®n de la empresa para acordar los medios dirigidos a su consecuci¨®n.
Pese a las diferencias de criterio a¨²n existentes, las centrales sindicales desconvocaron la huelga, anunciada para hoy y ma?ana, y accedieron a iniciar unas conversaciones con la direcci¨®n de Hunosa, que tienen todav¨ªa el car¨¢cter de previas al comienzo de la discusi¨®n propiamente dicha, del plan de reconversi¨®n.
La direcci¨®n de Hunosa entreg¨® ayer a los representantes sindicales parte de la informaci¨®n relativa a la reestructuraci¨®n que se pretende aplicar en la empresa p¨²blica hullera durante el trienio 1981-1983. Dicha informaci¨®n coincide plenamente con la adelantada por EL PA?S (17 y 19-2-1981).
La Administraci¨®n plantea la necesidad de definir las acciones y compromisos necesarios para el mantenimiento de esta empresa productora de energ¨ªa, mediante la ruptura con la l¨ªnea anterior que la ha conducido progresivamente a una elevaci¨®n excesiva de los costes de producci¨®n y unas crecientes p¨¦rdidas anuales con cargo al Tesoro p¨²blico.
Por otra parte, la producci¨®n subterr¨¢nea registr¨® un descenso del 21,5 %entre 1975 y 1980. Mientras la plantilla se redujo en un 8,2%, los rendimientos del interior descendieron en un 15,7%. Los costes por tonelada de carb¨®n en pesetas corrientes se elevaron a 218%.
Otras dificultades, referidas en el documento de la Administraci¨®n, aluden al exceso del personal pasivo, a la conservaci¨®n de minas improductivas, a la amortizaci¨®n de instalaciones inservibles, a ciertos servicios sociales y a los enormes gastos financieros, consecuencia de la deficiente estructura del capital.
En 1984, el coste por tonelada de carb¨®n subterr¨¢neo extra¨ªdo no deber¨¢ superar las 9.450 pesetas constantes. Hunosa tratar¨¢ de producir entre tanto la mayor proporci¨®n posible de hulla coquizable.
Una vez pactado el plan de reconversi¨®n entre los representantes de los trabajadores y la direcci¨®n de Hunosa, ser¨¢ sometido a la aprobaci¨®n de la Comisi¨®n Delegada del Gobierno para Asuntos Econ¨®micos. A partir de este momento, el Estado aportar¨¢ las ayudas econ¨®micas necesarias durante los a?os 1981, 1982 y 1983 hasta alcanzar el r¨¦gimen establecido para 1984. De esta forma, Hunosa podr¨¢ hacer frente a sus compromisos este ejercicio, para el que inicialmente cuenta con 16.000 millones de pesetas, asignados en los Presupuestos Generales del Estado, cifra muy escasa a la vista de los 18.000 millones de pesetas perdidos en 1980.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.