Las compa?¨ªas el¨¦ctricas amenazan con cortar el suministro al Ayuntamiento de M¨®stoles
Unos cien millones de pesetas adeuda el Ayuntamiento de M¨®stoles a las compa?¨ªas Uni¨®n El¨¦ctrica e Iberduero por el suministro de energ¨ªa el¨¦ctrica a las dependencias municipales de la localidad y que la Corporaci¨®n no ha abonado en los ¨²ltimos a?os. Las comunicaciones para la ejecuci¨®n de los, pagos han sido realizadas a trav¨¦s del Gobierno Civil y de la Delegaci¨®n Provincial de Industria, y en ellas se amenaza con el corte de fluido si no se realiza el pago. Mientras tanto, el Ayuntamiento se?ala que dichas compa?¨ªas no han abonado las tasas que les corresponden por distintos conceptos al municipio y que la Administraci¨®n central le adeuda al municipio unos setecientos millones de pesetas.
?Nos informan que, si no efectuamos los pagos correspondientes, nos cortar¨¢n el suministro y no volver¨¢n a darnos m¨¢s servicio?, se?al¨® a EL PAIS Bartolom¨¦ Gonz¨¢lez, alcalde de M¨®stoles, quien manifest¨® que las comunicaciones son una serie de amenazas y condicionamientos hechos a un Ayuntamiento con grandes problemas de financiaci¨®n. ?Todos los ayuntamientos tienen grandes deudas en estos momentos, y nosotros no somos una excepci¨®n?, indic¨® el alcalde, que confirm¨® la deuda de unos cien millones. ?Casi simult¨¢neamente nos han llegado dos comunicaciones: una de Uni¨®n El¨¦ctrica, a trav¨¦s del Gobierno Civil, y otra de Iberduero, a trav¨¦s de la Delegaci¨®n de Industria. En ambas nos amenazan y condicionan. Sin embargo?, a?adi¨®, ?tenemos que se?alar que estas compa?¨ªas el¨¦ctricas est¨¢n obligadas a pagar unas tasas a los municipios y por lo menos desde hace cinco a?os no las pagan?.Las dos comunicaciones llegaron a la alcald¨ªa hace poco m¨¢s de un mes, y en ellas se notificaba al Ayuntamiento las medidas que se podr¨ªan tomar si no se efectuaba el pago. Seg¨²n ¨¦stas, se proceder¨ªa a impugnar los presupuestos municipales si la deuda contra¨ªda con ellas no se inclu¨ªa en los mismos; a la supresi¨®n del suministro a todas las dependencias municipales, siempre que no representase un peligro para el orden p¨²blico y, en caso de corte del fluido, la acci¨®n ser¨ªa de forma definitiva, ya que las compa?¨ªas no acceder¨ªan a suministrar energ¨ªa para ferias ni para ampliaci¨®n de servicios hasta que no fuese abonada la deuda.
?Lo que hasta ahora no se ha dicho es que estas compa?¨ªas recurrieron primero a la Delegaci¨®n Provincial de Hacienda y ¨¦sta fall¨® en su contra?, se?al¨® asimismo el alcalde, al tiempo que expresaba los motivos que originan las deudas. ?Tenemos que hacer grandes esfuerzos?, a?adi¨®, ?para efectuar el pago de las n¨®minas, para conseguir el mantenimiento de los colegios, para pagar los numerosos servicios municipales de una poblaci¨®n cercana a los 200.000 habitantes, mientras el Estado nos est¨¢ abonando nuestra participaci¨®n en los impuestos con arreglo al censo de 1975, es decir, cuando cont¨¢bamos con unos 65.000 residentes. Finalmente, la Administraci¨®n nos debe cerca de setecientos millones que no acaba de pagarnos?.
Un hecho habitual
Al recabar las versiones de las dos compa?¨ªas el¨¦ctricas, EL PAIS se encontr¨® con la ausencia de los responsables del tema. Tras remitir a sus oficinas de Bilbao, en Iberduero se?alaron que la persona conocedora del problema no estaba localizable. Sin embargo, a pesar de la ausencia del experto en el tema, en Uni¨®n El¨¦ctrica se?alaron a este peri¨®dico que efectivamente se hab¨ªa comunicado el caso a la Delegaci¨®n de Industria, pero que no se hab¨ªan dado los pasos necesarios para proceder al corte de suministro. A su vez, dichas fuentes confirmaron la deuda del Ayuntamiento mostolense e indicaron que no han sido descartadas las acciones para proceder a la suspensi¨®n de dicho suministro. Finalmente es de se?alar que una de las personas de la compa?ia que convers¨® con este peri¨®dico dijo textualmente: ?Esto es un hecho bastante habitual, ya que nos deben de todos los lados?. Por su parte, fuentes del Gobierno Civil se?alaron que no es justificativo decir que no se tiene dinero para no pagar, pero que el Gobierno Civil no puede tomar parte en el caso y s¨®lo actuar¨¢ como mediador y garantizar¨¢ los servicios m¨ªnimos.
Respecto a las deudas de la Administraci¨®n central con el municipio de M¨®stoles, Bartolom¨¦ Gonz¨¢lez se refiri¨® a la que se le est¨¢ planteando en estos momentos, ?que es muy peque?a en comparaci¨®n con el total, pero puede servir de ejemplo?. Seg¨²n el alcalde, ante la falta de centros escolares en algunos barrios c¨¦ntricos del pueblo, se ha tenido que llevar a muchos ni?os al colegio del Parque Coimbra, situado a seis kil¨®metros del casco urbano. ?Como no les da tiempo a venir a comer a casa a los ni?os all¨ª escolarizados, el Ayuntamiento?, indica el se?or Gonz¨¢lez, ?consigui¨® que la Delegaci¨®n Provincial de Educaci¨®n les abonase la comida. Pues bien, desde el comienzo de curso no hemos recibido un duro, hemos tenido que adelantar al contratista unas 600.000 pesetas al final del primer trimestre, y ya se le deben al suministrador de los comedores otra cantidad similar. Para colmo, en la Delegaci¨®n Provincial no se ponen al tel¨¦fono ni te atienden, y los ¨¢nimos est¨¢n un poco excitados y podr¨ªan producirse problemas de orden p¨²blico?.
Enlazando con este tema, el alcalde se?al¨® que el pr¨®ximo curso no habr¨¢ en M¨®stoles ni?os sin escolarizar, pero muchos de los que tienen puesto escolar lo tienen en p¨¦simas condiciones. Indic¨® que la ense?anza preescolar no existe en M¨®stoles y los ochocientos alumnos de la formaci¨®n permanente de adultos s¨®lo cuentan con dos profesores en la actualidad. Precisamente en este ¨²ltimo campo es donde el alcalde pone m¨¢s ¨¦nfasis. Se?ala Bartolom¨¦ Gonz¨¢lez que a la formaci¨®n permanente de adultos asisten gran cantidad de muchachos en edades comprendidas entre los catorce y los diecis¨¦is a?os. ?Es fundamental?, indica el alcalde, ?que esos muchachos tengan cubierto su tiempo, pues la desocupaci¨®n es una de las fuentes de la delincuencia. Antes ten¨ªamos nueve maestros y nos los han reducido a tres. La baja de uno de ellos nos ha dejado casi sin clases?.
Hasta ahora, una buena parte de los ni?os de M¨®stoles asist¨ªan a clase en locales improvisados, tales como centros deportivos y barracones, impropios para la actividad que deber¨ªa desarrollarse en ellos.
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