Calvo Sotelo recibir¨¢ ma?ana a Carlos Garaikoetxea

La serie de contactos que hoy inicia el presidente del Cobierno vasco Carlos Garaikoetxea, con todas las fuerzas parlamentarias -que dan de algun¨¢ forma continuidad a las conversaciones mantenidas entre diferentes partidos durante la pasada semana- es acaso un elemento esperanzador en el ambiente pol¨ªtico de Euskadi, en el que ayer reinaba incertidumbre ante la escalada de violencia de los ¨²ltimos d¨ªas y ante el temor a las posibles medidas especiales que anuncia el G¨®bierno para el Pa¨ªs Vasco. La actitud de Herri Batasuna ante la invitaci¨®n del Gobierno vasco a participar en la ronda de conversaciones, junto a los dem¨¢s partidos pol¨ªticos, era ayer una inc¨®gnita.Poco despu¨¦s del entierro del teniente coronel Ram¨®n Romeo Ro taeche, la tarde del domingo fue pr¨®diga en reunio'nes y encuentros bilaterales entre representantes pol¨ªticos ¨¢l m¨¢s alto nivel. As¨ª, mientras el delegado del Gobierno para el Pa¨ªs Vasco, Marcelino Oreja, era recibido por Carlos Garai koetxea, en el palacio de Ajuria Enea, la oficina de Prensa del Go bierno aut¨®nomo se adelantaba a facilitar a los medios informativos la entrevista que el lendakari man tendr¨¢ ma?ana, mi¨¦rcoles, en Madrid con el presidente Leopoldo Calvo Sotelo, as¨ª como el turno de consultas que Carlos Garaikoetxea realizar¨¢ hoy con todos los partidos parlamentarios vascos. En la mis ma tarde del domingo, el Gobierno aut¨®nomo celebr¨® una reuni¨®n con car¨¢cter de urgencia en la que se abord¨®, como ¨²nico tema, las consecuencias que podr¨ªa tener la aplicaci¨®n de medidas excepcionales antiterroristas en el Pa¨ªs Vasco.

Ante la perspectiva del encuentro entre los dos presidentes, la reuni¨®n prevista para el mi¨¦rcoles del pleno de la comisi¨®n mixta de transferencias queda aplazada para la pr¨®xima semana. En esa misma ma?ana el delegado del Gobierno para el Pa¨ªs Vasco, Marcelino Oreja, el ministro Rodolfo Mart¨ªn Villa y Manuel Broseta participar¨¢n en una sesi¨®n de trabajo con el consejero del Gobierno vasco Mario Fern¨¢ndez. Todos ellos se incorporar¨¢n a las once de la ma?ana a la reuni¨®n con Calvo Sotelo y Garaikoetxea.

En la ses¨ª¨®n que mantendr¨¢n los dos presidentes se cree que Leopoldo Calvo Sotelo informar¨¢ oficialmente a Carlos Garaikoetxea de las medidas excepcionales que el Gobierno central ha adoptado en el Pa¨ªs Vasco para erradicar el terrorismo. Despu¨¦s de un intercambio de impresiones. el presidente del Gobiemo central pedir¨¢ colaboraci¨®n al Gobierno vasco en la aplicaci¨®n de las medidas.

Previamente a la convocatoria de la presidencia del Gobierno vasco a todos los partidos pol¨ªticos, las fuerzas de la izquierda vasca hab¨ªan mantenido ya contactos, durante la pasada semana, a fin de concretar un programa de acci¨®n un¨ªtario de lucha contra la violencia.

Situaci¨®n extremadamente grave

El partido socialista, el partido comunista y Euskadiko Ezkerra coincid¨ªan en valorar la situaci¨®n pol¨ªtica de extremadamente grave. Mientras el secretario general de los socialista , Txiki Benegas, se?al¨¢ba que a¨²n hoy ?es posible luchar contra el terrorismo?. Roberto Lertxundi, en nombre del partido coniun¨ªsta, aplaud¨ªa la posibilidad de configurar una pol¨ªtica de concertaci¨®n entre la izquierda. Por su parte, el dirigente de Euskadiko Ezkerra, Mario Ona¨ªnd¨ªa, que valor¨® muy positivamente las conversaciones mantenidas entre los tres partidos, se mostraba muy pes¨ªmista despu¨¦s de los ¨²ltimos atentados contra las Fuerzas Armadas.

El Part¨ªdo Nac¨ªonal¨ªsta Vasco -que fue recibido ayer excepcionalmente por Carlos Gara¨ªkoetxea, en un adelanto de la ronda de entrev¨ªstas que el lendakar¨ª niantendr¨¢ hoy con las fuerzas parlamentarias- celebrar¨¢ un encuentro, ma?ana, mi¨¦rcoles. con el Part¨ªdo Socialista de Euskadi, a fin de discutir la plataforma de siete puntos que ¨¦ste dio a conocer la pasada semana.

En el espectro de las fuerzas no parlamentarias cabe destacar la actitud de decid Ida condena de algunos partidos en relaci¨®n a la violencia. En tal tes¨ªtura estar¨ªa LK, que en un significativo comunicado se?ala que las libertades pol¨ªticas de Euskadi se encuentran en capilla.

Por su parte, Herri Batasuna, que tambi¨¦n ha sido convocad.o por el presidente del Gobierno vasco, junto a los dem¨¢s partidos pol¨ªticos, gtiardaba ayer un silencio sepulcral.

EE: "Dad una oportunidad a la paz"

A ¨²ltimas horas de la tarde de ayer, la coalici¨®n Euskadiko Ezkerra difund¨ªa un manifiesto cuyo t¨ªtulo: ?Dad una oportunidad a la paz? -id¨¦ntico al de una famosa canc¨ª¨®n de Los Beatles- resume el sentido de la campa?a que organizar¨¢ en los pr¨®ximos d¨ªas.

?La paz es posible. La paz es necesaria para que la colectividad de los ciudadanos tome las riendas de sus destinos. La paz es revolucionaria?. Tales son las consignas que abren el manifiesto. M¨¢s adelante, el texto entrecomilla dos frases: ?Torturar es pecado; matar es pecado?. Ambas afirmaciones ?las tendr¨¢ que recortar la izquierda desde su ¨¦tica al servicio de una convivencia igualitaria y solidaria : Queremos construir una Euskadi independiente y socialista; pero no a cualquier precio, no sobre la base del terror y el asesinato. Porque queremos construir una civilizaci¨®n nueva, la izquierda cree en la fuerza de sus argumentos, de su raz¨®n. La fuerza sin argumentos es la reacci¨®n ?.

Por ello, ?ante el intento de bipolarizaci¨®n entre el hostigamiento de ETAm al Ej¨¦rcito y el del Batall¨®n Vasco Espa?ol a ETAm?, EE hace un llamamiento a las dos organizaciones terroristas citadas para que ?detengan su locura y su espiral que lleva a la dictadura?; al pueblo vasco, para que ?se oponga al intento de ser arrastrado por otros al suicidio colectivo?; al Gobierno vasco para que ?marque con energ¨ªa una direcci¨®n pol¨ªtica contra los que atentan contra la democracia?; al Gobierno espa?ol para que ?no caiga en la tentaci¨®n de agudizar la represi¨®n indiscriminada a trav¨¦s de las medidas de excepci¨®n?, y, en fin, a todos los partidos y sindicatos para buscar salidas negociadas que desdrarnaticen la situaci¨®n y conduzcan la democratizaci¨®n sin caer en la estrategia del miedo o la autoderechizaci¨®n.?.