El Parlamento brit¨¢nico ha revocado 16.000 leyes arcaicas en 17 a?os
Casi nadie recordaba que en el Reino Unido est¨¢ prohibido comer chocolate en un tren, que un taxista no puede coger a un cliente en la londinense plaza de Bloomsbury o que los domingos es legal vender revistas, algo picantes, pero no biblias. Estas y muchas otras leyes ser¨¢n pronto revocadas.
Este proceso de revocaci¨®n de leyes arcaicas comenz¨® en tiempos de la reina Victoria de Inglaterra y desde 1965 han ca¨ªdo bajo la responsabilidad de una comisi¨®n de cinco personas, que termina de enviar un informe al Parlamento para la supresi¨®n de 121 leyes y 127 enmiendas. La tarea es, sin embargo, inmensa ya que esta comisi¨®n, en diecis¨¦is a?os, ha conseguido revocar m¨¢s de 16.000 leyes, algunas de las cuales databan de 1235.En este ¨²ltimo informe, la ley m¨¢s reciente -sobre monumentos hist¨®ricos- es de 1979 y la m¨¢s antigua data de 1727-un impuesto de dos peniques escoceses sobre cada pinta de cerveza consumida en Edimburgo-. La ley de 1806 que prohibe a un taxista coger a un cliente en la plaza de Bloomsbury, de Londres, reflejaba la baja categor¨ªa social que se atribu¨ªa a los coches de alquiler a principios del siglo pasado. Sin duda, algo obsoleto, aunque hay disposiciones m¨¢s curiosas: es ilegal comer chocolate en lugares p¨²blicos. En teor¨ªa, el d¨ªa de Navidad s¨®lo se pueden practicar los siguientes deportes: salto a pie o con p¨¦rtiga y tiro con arco. Seg¨²n la ley de juramentos profanos de 1745, ?un jornalero, un soldado raso o un marinero ser¨¢ multado con un chel¨ªn por cada palabrota; cualquier persona bajo la categor¨ªa de gentilhombre, con dos chelines, pero un gentilhombre con cinco chelines?.
Existen otras leyes m¨¢s importantes sobre juramentos: las de juramentos ileg¨ªtimos, que proh¨ªben pactos secretos. La de 1797 fue ideada por William Pitt, tras unos motines en la flota brit¨¢nica, para impedir as¨ª los acuerdos secretos entre marineros. La de 1812, para luchar contra el movimiento de ciertos sectores obreros que se dedicaban a romper m¨¢quinas, lo que se llam¨® luddismo, fue utilizada en 1840 para intentar frenar el naciente movimiento sindical.
Una ley antigua, que no ser¨¢ revocada, proh¨ªbe a los comercios el estar abiertos despu¨¦s de las ocho de la tarde o los domingos. Esta disposici¨®n es pol¨¦mica, pues muchos comerciantes quieren justamente abrir los domingos, pero el Parlamento brit¨¢nico decidi¨® recientemente no revocarla y, por tanto, sigue siendo ilegal para una madre comprar leche para su hijo en domingo. Siempre le queda el remedio de hacer algo legal y comprar whisky.
La ley sobre criminales lun¨¢ticos de 1800, a¨²n en v¨ªgor, establece complejos y arcaicos procedimientos para hab¨¦rselas con los locos que intentan forzar su adminisi¨®n ante la presencia de la reina, pues, entre otras cosas, un secretario de Estado tiene que confirmar esta locura. Tambi¨¦n una ley de 1918 prev¨¦ que los ni?os abandonados ser¨¢n protegidos por medidas sobre pensiones de guerra. Afortunadamente, ahora hay otra ley sobre ni?os necesitados.
Concepci¨®n del derecho
La concepci¨®n brit¨¢nica del derecho es muy diferente de las de la Europa continental, en especial por el papel destacado que se concede en el Reino Unido a las reglas consuetudinarias. Por una parte, existe la legislaci¨®n propiamente dicha, formada por las leyes que emanan del Parlamento, y los decretos, ¨®rdenes, reglamentos y regulaciones que provienen de los ministros, autoridades locales u otras autoridades, en funci¨®n de los poderes que les han sido atribuidos por el Parlamento.Por otra parte, existe el derecho consuetudinario. (o common law), que es la ley antigua del pa¨ªs, seg¨²n se deduce de la costumbre, interpretada por los jueces. Aunque nunca ha sido definida con precisi¨®n ni codificada, constituye la base del derecho, excepto cuando ha sido modificada por el Parlamento.
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