Bolivia y la droga
Pocas veces un pa¨ªs ha sido denigrado en forma tan implacable y planificada como lo es ahora Bolivia. En la edici¨®n de EL PA?S correspondiente al d¨ªa de hoy aparecen, en grandes espacios, tres art¨ªculos que se refieren fundamentalmente al tr¨¢fico de drogas, sin descuidar tampoco de especular sobre asuntos pol¨ªticos.Con respecto al narcotr¨¢fico -ya lo dije alguna vez en la Prensa de Madrid-, nadie puede negar su existencia en Bolivia, como tampoco se puede negar que todo ello est¨¢ alentado y financiado por poderosos sistemas trasnacionales del tr¨¢fico de drogas. Precisamente esta es la situaci¨®n que trata de afrontar el actual Gobierno boliviano.
El Gobierno se est¨¢ esforzando al m¨¢ximo en esta lucha. Ha recurrido a todos los medios legales para detener el negocio ?l¨ªcito de los estupefacientes. Los propios miembros de las fuerzas armadas de Bolivia que fueron acusados de mantener contactos con el narcotr¨¢fico han renunciado a sus cargos para defenderse de las sindicaciones.
Sin embargo, la campa?a de difamaci¨®n contin¨²a. Ahora ya no son los coroneles Arce, Coca o Salom¨®n los involucrados en el negocio inmoral, sino que, seg¨²n lo publ¨ªcado por EL PA?S, entran tambi¨¦n en escena el propio presidente de la Rep¨²blica, el ex presidente Hugo B¨¢nzer, el general Natusch, el coronel Rico Toro y otros m¨¢s. En resumidas cuentas, lo que se trata de hacer ver a las claras es que todas las fuerzas armadas bolivianas tienen que ver con el narcotr¨¢fico, y eso es calumnioso, falso e inaceptable.
Dicen, se?or director, que las verdades a medias son peores que las mentiras. Los periodistas Monique Leciere y Fran?ois Fallareau, han armado un tinglado incre¨ªble de datos, acciones, personajes y testimonios que a cualquiera dejan pasmado. Pero, por ejemplo, al involucrar al general B¨¢nzer en la fabricaci¨®n de coca¨ªna afirman que aquello lo saben por ?fuentes no confirmadas?. Creo sinceramente que si no existen fuentes veraces de informaci¨®n resulta inmoral y poco responsable lanzar una acusaci¨®n de semejante envergadura. No sabemos tampoco qu¨¦ fuentes les habr¨¢n surtido de noticias para expresar que el presidente, general Luis Garc¨ªa Meza, enviaba mensajes a la Mafia aconsej¨¢ndole d¨®nde podr¨ªan operar con entera libertad. Ser¨¢n, seguramente, esas mismas ?fuentes no confirmadas?.
La verdad de todo esto, se?or director, es que existe una premeditada campa?a que tiende primero a cercar y luego a derribar al Gobierno del general Garc¨ªa Meza. ?Acaso el narcotr¨¢fico es una novedad en el pa¨ªs? El mismo se?or Angel Santa Cruz, periodista del diario bajo su digna direcci¨®n, afirma que en 1979 ?la coca¨ªna dej¨® en Bolivia ilegalmente mil millones de d¨®lares?. En 1979 gobernaron Bolivia el democr¨¢tico general David Padilla y el constitucional doctor Walter Guevara Arze. Sin embargo, parece que en 1979 nadie se preocupaba del narcotr¨¢fico..., ni los norteamericanos, ni los europeos, ni los izquierdistas bolivianos, que ahora reciben, aportes econ¨®micos y ayuda extranjera ilimitada para atentar contra su pa¨ªs en la b¨²squeda desesperada por el control del poder./
Embajador de Bolivia.
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