Los pintores espa?oles del Ermitage, de Leningrado, en el Prado

A partir de hoy, mi¨¦rcoles, y hasta finales de mayo, el Museo del Prado va a ser todav¨ªa un poco m¨¢s rico. Quienes tengan la suerte o la decisi¨®n de visitarlo en estos d¨ªas podr¨¢n contemplar, adem¨¢s de los fondos propios del Prado, una colecci¨®n de maestros espa?oles y holandeses que habitualmente se exhiben a muchos centenares de kil¨®metros: en Leningrado, en el Museo del Ermitage.

Quiz¨¢ esta primavera m¨¢s de un visitante de los much¨ªsimos que deambulan a diario por las salas inmensas del que es uno de los museos mas importantes de Europa -?los rusos se toman verdaderamente en serio la necesidad de culturizarse y van a los museos masivamente?, dice Jull¨¢n G¨¢llego, cr¨ªtico y profesor de Historia del Arte- echar¨¢ en falta a los Greco, Zurbar¨¢n, Murillo y Goya, que, junto a otros pintores espa?oles, han vuelto a su patria, aunque s¨®lo sea de visita.?Pedro el Grande inicia un coleccionismo que fue como una ventana abierta al Occidente?, dice G¨¢llego-, ?pero la verdadera creadora del Ermitage fue Catalina la Grande?. Catalina, a quien gustaba decir que no entend¨ªa de pintura, s¨ª que entendi¨® el modo de hacerse con una magn¨ªfica colecci¨®n de cuadros. Envi¨® agentes a toda Europa, atentos a comprar arte en cuanto se presentaba la ocasi¨®n, y as¨ª consigui¨® que pronto su palacio -el famoso Palacio de Invierno- fuera insuficiente para albergar la colecci¨®n. Mand¨® entonces construir junto al palacio un pabell¨®n que hab¨ªa de servir para representar comedias y guardar m¨¢s cuadros. Y sigui¨® comprando. M¨¢s tarde, en el siglo XIX, las colecciones se abrieron al p¨²blico y se construy¨® un nuevo palacete, el nuevo Ermitage.

Actualmente el Ermitage es un museo enorme y guarda unas colecciones extraordinarias. Tiene pintura italiana, espa?ola, flamenca, holandesa, francesa e inglesa, y adem¨¢s secciones de armas europeas, de arte oriental, de cultura rusa y verdaderos tesoros de joyas en oro. Y conservan gran parte del palacio tal como se usaba en los tiempos del imperio.

El a?o pasado, los que viajaron a la Uni¨®n Sovi¨¦tica fueron los cuadros espa?oles del Museo del Prado, concretamente los del siglo XVII. La exposici¨®n espa?ola se colg¨® primero en Leningrado, y m¨¢s tarde, en Mosc¨². Con la venida al Prado de los cuadros del Ermitage cumplen los sovi¨¦ticos su parte del compromiso de intercambio que firmaron ambos pa¨ªses en mayo del a?o pasado.

La colecci¨®n de Pedro el Grande

El Museo del Ermitage es, en palabras del director general de Bellas Artes, Javier Tussell, ?uno de los m¨¢s bellos de Europa, y conserva en sus palacios diversas e inmensas colecciones de arte y antig¨¹edades que ellas solas justificar¨ªan una visita a Leningrado?.Su historia comenz¨® con Pedro el Grande, en 1703, quien empez¨® a acumular obras de arte para su propio placer, afici¨®n que hered¨® m¨¢s tarde Catalina la Grande. Primero llen¨® de cuadros su propio palacio, y m¨¢s tarde mand¨® construir el pabell¨®n Ermitage, que dio nombre a todo el conjunto muse¨ªstico. En el siglo XIX, abierto ya al p¨²blico, se sigui¨® enriqueciendo hasta llegar a ser hoy, seg¨²n un cr¨ªtico, ?un museo magn¨ªfico, no s¨®lo por lo que contiene, sino por lo que puede verse desde sus ventanas. Leningrado esuna de las ciudades m¨¢s bellas de Europa, y lo que rodea al Ermitage es lo m¨¢s bello de Leningrado?.

Esta exposici¨®n de fondos del Ermitage en el Prado forma parte de un plan general que nuestro primer museo ha emprendido de intercambios internacionales con otros grandes centros similares de mundo. En principio, la exposici¨®n del Ermitage es una de las m¨¢s importantes de este plan, debido a la primera magnitud de las obras expuestas, que en nada desmerecen de las mejores del fondo habitua del Prado. Y, por ¨²ltimo, se persigue tambi¨¦n con estos intercambios que el p¨²blico espa?ol pueda conocer de primera mano la gran cantidad de obras de la pintura espa?ola que se encuentran dispersas en el mundo en muchos museos.