Subidas generalizadas
Ha comenzado la semana con unas sesiones de Bolsa casi euf¨®ricas, en las que la reacci¨®n que iniciaron pr¨¢cticamente en solitario durante la tanda anterior Energ¨ªas y Petr¨®leos, ha servido para contagiar al mercado de un ambiente festivo donde lo importante era comprar.La ca¨ªda real de la demanda de cr¨¦dito, que ya detectaron algunos indicadores econ¨®micos hace m¨¢s de un mes, y la consiguiente bajada en vertical de los tipos de inter¨¦s en el mercado interbancario contin¨²an apareciendo a ojos de buena parte de los expertos financieros como la causa de la reciente canalizaci¨®n de flujos compradores hacia los mercados de valores.
Se da, adem¨¢s, la circunstancia de que esta misma flexi¨®n en la demanda de cr¨¦dito est¨¢ obligando a las entidades bancarias, montadas desde antiguo en su salvaje estrategia de captar recursos ajenos sin importar demasiado el precio, a ofrecer financiaci¨®n a las empresas a plazos m¨¢s dilatados de los que ven¨ªan siendo habituales en los ¨²ltimos tiempos.
Esto resulta tremendamente importante para unas empresas, como son las de este pa¨ªs, fuertemente dependientes de la financiaci¨®n externa, y a las que la brevedad de los plazos de reposici¨®n de los fondos tomados ten¨ªa pr¨¢cticamente estranguladas.
As¨ª, este renacimiento de la demanda, que tal vez ayer se mostrase con alguna brusquedad, podr¨ªa ser -eso s¨ª, con todas las reservas- el inicio de un per¨ªodo en el que algunas expectativas de inversi¨®n pueden retomar la Bolsa como punto de referencia.
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