Hacienda ha reclamado la declaraci¨®n de la renta en 1979 a 400.000 contribuyentes que ya la hab¨ªan cumplimentado
M¨¢s de 400.000 espa?oles que hab¨ªan efectuado sus declaraciones de renta el pasado a?o quedaron ayer sorprendidos, y en algunos casos indignados, al recibir de la correspondiente Delegaci¨®n de Hacienda una carta en la que se les ?invita a que en el plazo de diez d¨ªas? presenten la declaraci¨®n por el impuesto sobre la renta de las personas f¨ªsicas de 1979, ?advirti¨¦ndoles que, si fuera positiva, deber¨¢n ingresar la cuota y el recargo reglamentarlo del 5%?.Hacienda reconoc¨ªa en la propia carta, en un segundo p¨¢rrafo, la posibilidad de que en algunos casos se tratase ¨²nicamente de subsanar errores en la declaraci¨®n efectuada: ?Ahora bien, si a su juicio, considerase no estar obligado a declarar, o bien existiese alg¨²n error, se le ruega encarecidamente rellene y env¨ªe el cuestionario (situado en la parte inferior de la carta) para practicar las oportunas rectificaciones, si ¨¦stas resultasen justificadas y procedentes?.
Hacienda ha remitido en los ¨²ltimos d¨ªas, seg¨²n puso de manifiesto en una nota oficial aclaratoria, 1.790.546 cartas a contribuyentes de toda Espa?a (351.174 en la provincia de Madrid) en los t¨¦rminos expuestos. El porcentaje de error estimado en las cartas remitidas a los madrile?os, que es al que se refiere la nota, se sit¨²a en el 20%, y de este porcentaje tan s¨®lo un 3% o un 5% -siempre seg¨²n Hacienda- es atribuible al propio Ministerio por la transcripci¨®n de los datos de las declaraciones a los soportes magn¨¦ticos para introducci¨®n en el sistema inform¨¢tico. El resto de los errores en las reclamaciones de Hacienda, entre un 15% y un 17% de las cartas enviadas, se debe a que el contribuyente no consigui¨® el n¨²mero del documento nacional de identidad de la esposa, o se equivoc¨® al transcribirlo o bail¨® alguna cifra al reflejar su propio documento de identidad, e incluso rellen¨® la declaraci¨®n con una escritura poco clara, que provoc¨® la confusi¨®n de quienes tienen que introducir los datos en el ordenador.
Otillo Fern¨¢ndez, responsable de la inform¨¢tica de Hacienda, insisti¨® sobre estos errores, de ¨ªndole humana fundamentalmente, en conversaci¨®n con EL PAIS. Hacienda hab¨ªa estimado ya, previamente a su env¨ªo, que un 24% de las 1.790.546 cartas remitidas a contribuyentes de toda Espa?a conten¨ªan errores en cuanto a reclamar la declaraci¨®n a quien ya la hab¨ªa realizado o a quien no estaba obligado a hacerla. No obstante, dijo, es fundamental el env¨ªo de estas cartas para subsanar los errores y completar la informatizaci¨®n de las contribuciones por renta de las personas f¨ªsicas. Los errores atribuibles a Hacienda, en muchos casos derivados de los caracteres confusos empleados por el contribuyente en su declaraci¨®n, no llegan al 5% -seg¨²n Otillo Fern¨¢ndez-, lo que es un porcentaje absolutamente admisible
Consecuencia del control inform¨¢tico
Estos errores han sido detectados precisamente por el funcionamiento correcto, aunque ¨¦l sistema est¨¢ saturado y trabaja al ciento por ciento, de los ordenadores de Hacienda, seg¨²n Fern¨¢ndez. Al cruzar las declaraciones con otras informaciones sobre percepciones del contribuyente (retenciones en n¨®mina, por ejemplo) han aparecido casos de mujeres casadas que trabajan y que no figuraban o figuraban con alg¨²n tipo de error en la declaraci¨®n conjunta de renta del cabeza de familia. Es notorio, por otra parte, como ya anunci¨® el ministro de Hacienda hace algunas semanas, que unos 400.000 contribuyentes se hab¨ªan equivocado en operaciones de suma y resta, voluntaria o involuntariamente, al efectuar sus declaraciones correspondientes a 1979.El mayor n¨²mero de errores un 30%, se ha registrado en Sevilla, y el menor, con un 18%, en Almer¨ªa, seg¨²n Otilio Fern¨¢ndez. El que haya surgido por primera vez este a?o este tipo de errores se debe, siempre seg¨²n el responsable de Hacienda, a que, por primera vez, se ha procedido al control inform¨¢tico del fraude.
Las inversiones previstas en este campo, 2.500 millones de pesetas hasta 1984, situar¨¢n nuestro sistema de recaudaci¨®n y control por ordenadores a la altura de los pa¨ªses m¨¢s avanzados, seg¨²n Fern¨¢ndez. El a?o pr¨®ximo, muy probablemente, el contribuyente recibir¨¢ ya de Hacienda la declaraci¨®n con sus datos y s¨®lo tendr¨¢ que rellenar los cap¨ªtulos relativos a ingresos y a gastos deducibles. El denominado balance fiscal lo har¨¢n directamente los ordenadores de Hacienda.
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