La declaraci¨®n de la renta

Los abajo firmantes, profesionales en ejercicio de la econom¨ªa y el derecho, considerando la actual campa?a realizada por el Ministerio de Hacienda entendiendo solucionado el problema, y en ausencia de un debate clarificador sobre la materia, consideramos de inter¨¦s para el contribuyente insistir en el total amparo legal a la deducci¨®n de 10.000 pesetas por cada miembro de la unidad familiar a efectos del IRPF, en los t¨¦rminos en que se plante¨® la cuesti¨®n el a?o anterior desde esta misma secci¨®n.Por otra parte, quisi¨¦ramos hacer unas precisiones adicionales sobre las declaraciones a devolver presentadas en relaci¨®n con el a?o 1979, a pesar del tono triunfalista en que se ha manifestado en fechas pasadas el ministro de Hacienda, Garc¨ªa A?overos:

- A muchos contribuyentes no les ha sido devuelto ning¨²n importe ni notificada ninguna resoluci¨®n en relaci¨®n con su declaraci¨®n. Nos permitimos recordar que en este caso es posible deducir el importe no devuelto en la declaraci¨®n correspondiente al a?o 1980.

- No parece existir un criterio uniforme en la Administraci¨®n en cuanto a la admisi¨®n o rechazo de la deducci¨®n de 10.000 pesetas por cada miembro de la unidad familiar. En algunos casos se ha procedido a la devoluci¨®n, admitiendo tal criterio; en otros ha sido denegado, y en muchos se ha planteado el correspondiente recurso.

- Insistimos en la necesidad de considerar al inspector no como un juez que dictamina lo que es l¨ªcito o no, sino como tan s¨®lo un funcionario cuya misi¨®n consiste en comprobar los elementos de la declaraci¨®n tributarla y en indicar las modificaciones que, seg¨²n su criterio, deber¨ªan introducirse en la autoliquidaci¨®n que se hizo en su d¨ªa./ y nueve firmas m¨¢s.