Los vertidos de aguas residuales en la sierra contribuyen a contaminar los r¨ªos cercanos al Tajo

Los vertidos de aguas residuales de las poblaciones son la causa fundamental del deterioro de la calidad de las aguas de los r¨ªos y embalses de la provincia. En menor medida, los vertidos de las industrias y del ganado tambi¨¦n contribuyen a aumentar este ¨ªndice de contaminaci¨®n, aunque la situaci¨®n no sea alarmante en la mayor¨ªa de los casos. La irresponsabilidad de ayuntamientos e industrias han permitido crear esta deficiente situaci¨®n. El resultado ha sido que r¨ªos como el Henares, el Jarama o el Lozoya presenten ¨ªndices de contaminaci¨®n muy altos en alguno de sus tramos, seg¨²n demuestran unos estudios realizados por la Comisar¨ªa de Aguas del Tajo, a pesar de su lejan¨ªa de los focos de emisi¨®n de residuos.

Los vertidos de aguas residuales de las poblaciones son la principal causa de la contaminaci¨®n de los r¨ªos y embalses de la provincia de Madrid. Esta consideraci¨®n es compartida por todos los responsables del medio ambiente de la zona: los responsables de la Delegaci¨®n Territorial de Sanidad, el Gobierno Civil y la Comisar¨ªa de Aguas del Tajo, coinciden en esta afirmaci¨®n y se?alan como otros factores determinantes de la contaminaci¨®n de las aguas. los vertidos de las industrias y del ganado.Tanto las poblaciones como las industrias, que vierten a los r¨ªos, no depuran debidamente sus aguas, lo que eleva considerablemente el ¨ªndice de contaminaci¨®n de ¨¦stos, raz¨®n por la cual la Comisar¨ªa de Aguas del Tajo est¨¢ realizando un programa de actuaci¨®n en colaboraci¨®n con los diferentes municipios para ?lograr paliar esta deficiente situaci¨®n?, como se?ala su comisario jefe, Fernando Mej¨®n, ?que no es caracter¨ªstica de esta zona, sino de toda Espa?a?.

Los responsables de la Secretar¨ªa de Estado para la Sanidad, aseguran que ?la contaminaci¨®n de los r¨ªos, en general, es un problema que requiere, para paliarlo, una infraestructura muy compleja, en muchos casos consistente en la instalaci¨®n de depuradoras de agua s residuales, y en un mantenimiento correcto de las mismas, que escapa a las posibilidades de la Secretar¨ªa de Estado, aunque quiz¨¢ sea la principal interesada en resolver el problema, como organismo oficial que es encargado de velar por la salud p¨²blica?.

Jos¨¦ Luis G¨®mez, delegado de Medio Ambiente del Gobierno Civil, afirma que ?la contaminaci¨®n existe realmente como en toda Espa?a, aunque no de forma alarmante, ya que la mayor¨ªa de los pueblos no depuran previamente sus vertidos ni tampoco las industrias que est¨¢n dentro de su t¨¦rmino municipal?.

Lo cierto es que tampoco est¨¢n realmente aclaradas las competencias de los responsables que deben supervisar la calidad del. agua. Por un lado, Sanidad se ocupa de controlar la potabilidad del agua para el abastecimiento, bien como consecuencia de denuncias o por iniciativa propia, debido a la repercusi¨®n que ello pueda tener en la salud p¨²blica; por otro, el Gobierno Civil y la Comisar¨ªa de Aguas del Tajo analizan la contaminaci¨®n ocasionada por los vertidos de aguas residuales en general.

Las poblaciones suelen verter, por medio de colectores, aguas abajo de sus t¨¦rminos, de tal forma que el problema se produce cuan do estos residuos llegan al pr¨®ximo pueblo, y as¨ª sucesivamente. De todas formas, gracias a la autodepuraci¨®n de los r¨ªos, la situaci¨®n no llega a ser alarmante, y por el momento, el agua que abastece a la poblaci¨®n es tratada debidamente para que sea potable y para que no exista por el momento morbilidad alguna atribuible a esta causa.

?Cuando el caudal del r¨ªo?, es veinte veces mayor al volumen del caudal contaminante?, se?alan los responsables de la Delegaci¨®n de Sanidad, ?se produce con facilidad un fen¨®meno de autodepuraci¨®n en muy pocos kil¨®metros, dependiendo, por supuesto, de la velocidad de la corriente, temperatura, etc¨¦tera. Cuando las condiciones no son id¨®neas, es conveniente suplir esta autodepuraci¨®n natural por una artificial, lo que requiere infraestructuras muy costosas de instalaci¨®n y mantenimiento?.

Ayuntamientos e industrias, los culpables

Los ayuntamientos y las industrias son los realmente culpables del deterioro de la calidad de las aguas ya que no tratan debidamente sus vertidos. ?Con el pretexto?, se?ala Mej¨®n, ?de que llevan muchos a?os haci¨¦ndolo, no se preocupan de la depuraci¨®n de las aguas, ni las sanciones que se les imponen son suficientes para paliar el problema, aun cuando sean instaladas depuradoras con dinero estatal?.

Las sanciones impuestas por la comisar¨ªa a los ayuntamientos no son pagadas generalmente. Muchas veces ¨¦sta ha sancionado siete veces en un mismo d¨ªa a un municipio ?sin que hayamos logrado nada?, manifiesta Mej¨®n, ?y adem¨¢s nosotros no contamos con los suficientes medios, ya que para 15.000 kil¨®metros de r¨ªos, ¨²nicamente tenemos veintiocho guardas, con el agravante de que no se pueden controlar f¨¢cilmente?.

Las industrias, o vierten directamente al r¨ªo sus aguas sin tratar, o vierten en los alcantarillados de la poblaci¨®n, de tal manera que ¨¦stas se unen a los residuos municipales, con lo cual es muy dif¨ªcil controlarlas. Jos¨¦ Luis G¨®mez se?alaba que ?fundamentalmente la contaminaci¨®n es debida a los residuos de las poblaciones y, en menor medida, a los vertidos de las industrias. En general?, prosegu¨ªa G¨®mez, ?esto ocurre en toda Espa?a y por eso estamos tratando de concienciar a los ayuntamientos sobre esta educaci¨®n civica, y aunando todos los esfuerzos para que t¨¦cnicamente se pueda resolver el problema en conjunto, y as¨ª los costes de depuraci¨®n sean m¨¢s econ¨®micos?.

?Tambi¨¦n la mayor¨ªa de los embalses de la provincia de Madrid est¨¢n eutrofizados?, se?ala Mej¨®n, ?es decir, que van perdiendo ox¨ªgeno y se van contaminando poco a poco?. En esta situaci¨®n est¨¢n los embalses de La Jarosa, Navacerrada, Navalmedio, La Pinilla, Puentes Viejas, Riosequillo, San Juan, Santillana, Valmayor, El Vell¨®n y El Villar.

?Por otro lado?, dice Mej¨®n, ?en Madrid solamente existen 143 plantas depuradoras de aguas, muchas de las cuales no funcionan o est¨¢n abandonadas por los ayuntamientos. Por ejemplo?, prosigue, ?en el t¨¦rmino de Alcal¨¢ de Henares hay trece depuradoras de diferentes industrias que han estado abandonadas durante alg¨²n tiempo, as¨ª como la del pol¨ªgono de Torrej¨®n de Ardoz, que sigue olvidada?.

?Tambi¨¦n, El Escorial y San Lorenzo del Escorial?, sigue Mej¨®n, ?durante los ¨²ltimos tres a?os han toreado al MOPU y le han estado tomando el pelo, ya que no pagaban las sanciones que les impon¨ªamos?.

Las urbanizaciones existentes por toda la provincia contaminan tambi¨¦n y no depuran, generalmente, sus aguas, lo que repercute directamente en la falta de calidad de las mismas. Tambi¨¦n las zonas donde se concentra el ganado son focos de contaminaci¨®n, ya que sus residuos van a los arroyos.

En cuanto a las sanciones, ?es poco pr¨¢ctico?, se?ala Jos¨¦ Luis G¨®mez, ?multar a los ayuntamientos; sin embargo, todos los responsables del asunto estamos tratando de mentalizarlos de forma que se solucione el problema, buscando unos presupuestos para depurar las aguas residuales, ya que en estos momentos, la mayor¨ªa de los pueblos de la provincia no tratan sus aguas debidamente?.

Por lo que se refiere a la calidad de agua para el abastecimiento de las poblaciones, los ¨ªndices permitidos no han sido sobrepasados, ya que tanto el Canal de Isabel II como CASRAMA tratan sus aguas para potabilizarlas. En cuanto a si hab¨ªa sido observado alg¨²n tipo de enfermedad en la poblaci¨®n, Sanidad se?al¨® que ?no hay ning¨²n

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aumento considerable atribuible a esta causa?. El control para evitar la aparici¨®n de estas enfermedades lo realizan en la provincia los farmac¨¦uticos titulares que dependen de esta delegaci¨®n. Estos env¨ªan semanalmente a la Direcci¨®n de la Salud un parte detallado de la cloraci¨®n o ausencia de ¨¦sta en su demarcaci¨®n, as¨ª como cualquier posible contaminaci¨®n. Estos partes semanales de enfermedades en la poblaci¨®n no reflejan actualmente morbilidad alguna atribuible a los vertidos de aguas residuales, aunque los responsables de la Delegaci¨®n de Sanidad no han facilitado datos de estos an¨¢lisis.

Henares, Jarama y Lozoya, en mala situaci¨®n

La mala calidad de las aguas de los r¨ªos Henares, Jarama y Lozoya est¨¢ perfectamente comprobada, seg¨²n se desprende de unos estudios realizados por la Comisar¨ªa de Aguas del Tajo durante el a?o 1980 y el principio de 1981. El m¨¢s reciente es el realizado en marzo del presente a?o sobre la contaminaci¨®n en la cuenca del r¨ªo Lozoya, con expresi¨®n de los vertidos que afectan a los embalses de los que se surte el Canal de Isabel II.

Tal informe se?ala que ?la cuenca del r¨ªo Lozoya tiene una extraordinaria importancia, por ser la que suministra el agua a los principales embalses del Canal de Isabel II, que, a su vez, abastece de aguas potables a Madrid y poblaciones de la provincia?. Entre las conclusiones m¨¢s importantes destacadas en el estudio es de se?alar que ?la contaminaci¨®n actual de los vertidos es posible que se aumente en un pr¨®ximo futuro. Las obras en proyecto para dotar a los pueblos de la cuenca de abastecimientos de aguas y redes de saneamiento ocasionar¨¢n mayores caudales de aguas residuales que, de no ser debidamente depurados, incidir¨¢n, con su contaminaci¨®n en mayor grado, en los embalses del canal?.

Del examen de los datos y an¨¢lisis realizados se desprende, seg¨²n consta en las conclusiones del informe, que las poblaciones con ganado vacuno estabulado arrojan unos ¨ªndices de contaminaci¨®n muy altos. Los escasos pueblos que disponen de estaci¨®n depuradora no prestan la atenci¨®n debida al funcionamiento y depuraci¨®n de la misma. ?La idea m¨¢s generalizada?, se?ala el estudio, ?cuando se dota de saneamiento a estos pueblos fue construir el colector final de gran longitud (de quinientos a 3.000 metros) para alejar de las respectivas poblaciones los malos olores, despreciando la contaminaci¨®n que producen a los usuarios de aguas abajo?.

El informe, realizado en enero de 1980, se?ala que el Jarama tiene, hasta la altura del puente de Algete, una escasa contaminaci¨®n que se va incrementando gradualmente con la incorporaci¨®n a su caudal de las aguas de los arroyos de la Vega, Valdebebas y Rejas, y alcanza la m¨¢xima contaminaci¨®n, en cuanto a carga org¨¢nica, en e

[ tramo comprendido entre el arroyo de Rejas y la presa de San Fernando.