Los "siete grandes" quieren comprar la L¨®pez Quesada y el Meridional

Aparte de la oferta por la L¨®pez Quesada y por el Meridional, cuyo concurso restringido se cerr¨® ayer a las dos de la tarde, los siete grandes tienen pensado hacer una segunda oferta de adquisici¨®n por el Promobank, una peque?a entidad que cuenta con diecisiete oficinas en la zona de Levante y que tambi¨¦n est¨¢ bajo administraci¨®n del Fondo de Garant¨ªa de Dep¨®sitos, seg¨²n se ha informado a EL PAIS.La decisi¨®n final de acudir al concurso restringido de la L¨®pez Quesada y del Meridional, cuyo cierre se hab¨ªa extendido ocho d¨ªas por expreso deseo de la banca espa?ola, fue adoptada en la ma?ana de ayer por los consejeros delegados de los principales bancos espa?oles, que durante las ¨²ltimas semanas han mantenido reuniones casi monogr¨¢ficas sobre la posible expansi¨®n de la banca extranjera en Espa?a por la v¨ªa de la compra de peque?os bancos espa?oles ya instalados.

Los bancos nacionales (Banesto, Central, Hispano, Popular, Vizcaya, Bilbao y Santander) presentaron su oferta global por los dos bancos en crisis pocas horas antes de cerrarse el concurso restringido. No est¨¢ claro, sin embargo, si este plazo se cerraba a las dos de la tarde, como manten¨ªa el Fondo de Dep¨®sitos, o a las doce de la noche, como parec¨ªa ser la opini¨®n del Banco de Espa?a. El caso es que la oferta fue anunciada por la ma?ana a la entidad que ostenta la mayor¨ªa de las acciones de los dos bancos y concretada por la tarde, en una reuni¨®n de los consejeros delegados los siete grandes con el gobernador y subgobernador del Banco de Espa?a.

La presentaci¨®n de esta ?oferta nacional? significa, seg¨²n algunas interpretaciones pr¨¢cticas, la eventual compra de las dos instituciones por parte de un pool bancario formado por los siete grandes de la banca espa?ola y el eventual rechazo de las dos ofertas que existen. Estas propuestas parten de la Banque Nationale de Paris (BNP), que habr¨ªa ofrecido unos 5.000 millones de pesetas por la L¨®pez Quesada, y una entidad nacional de primer orden que, curiosamente, tambi¨¦n participa en el consorcio bancario que ha ofertado a su vez por el Meridional.

Tras la presentaci¨®n formal de las propuestas, el Fondo de Garant¨ªa de Dep¨®sitos y su brazo t¨¦cnico, la Corporaci¨®n Bancaria, tendr¨¢n que dirimir todav¨ªa la conveniencia econ¨®mica de las ofertas presentadas, extremo ¨¦ste que podr¨¢ tardar entre seis y quince d¨ªas para quedar finalmente evaluado.

Aunque el alcance final de la propuesta econ¨®mica de los siete grandes era ayer desconocido, fuentes informadas se?alaron que ¨¦sta no era precisamente muy atractiva. No obstante, la oferta habr¨ªa mejorado por la tarde, en el curso de las reuniones mantenidas por los responsables de los grandes bancos en el Banco de Espa?a. En este sentido, medios gubernamentales indicaron que en el caso de igualar a las ofertas previas, el destino final de los dos bancos corresponder¨ªa a intereses nacionales, aunque ?s¨®lo fuera por patriotismo?.

Seg¨²n algunas fuentes, la presentaci¨®n de la oferta global de los grandes bancos no se hizo sin un relativo grado de apresuramiento y con las posiciones enfrentadas de los siete participantes. A este respecto, tanto el Hispano como el Vizcaya mostraron sus reticencias a acudir al concurso y alg¨²n consejero delegado ni siquiera firm¨® el acta. Otro punto sin decidir fue la forma jur¨ªdica y hasta t¨¦cnica de c¨®mo se har¨¢n cargo de las instituciones bajo gesti¨®n administrativa de la Corporaci¨®n Bancaria.

Sin embargo, EL PAIS pudo saber que los siete grandes no crear¨¢n una nueva entidad jur¨ªdica especial para adquirirlas entidades bancarias integradas en la UVI bancaria, sino que la adquisici¨®n se har¨¢ en nombre de los siete grandes bancos espa?oles (Banesto, Central, Popular, Vizcaya, Bilbao, Santander e Hispano). Queda por decidir, sin embargo, la f¨®rmula de aportaci¨®n por cada entidad del capital necesario para la adquisici¨®n y las personas encargadas de la gesti¨®n, as¨ª como el n¨²mero de personas que cada entidad destinar¨¢ a esta funci¨®n, o si s¨®lo lo har¨¢ una de ellas.

Tampoco est¨¢ claro el destino final de los dos bancos rescatados por laCor-poraci¨®n. Alguno de los asistentes habr¨ªa expresado su deseo de que los dos bancos sean sencillamente liquidados, mientras que otros argumentaron que ser¨ªa una contradicci¨®n acudir a la subasta si no se ten¨ªa la intenci¨®n de mantener en funcionamiento las dos instituciones.

La pugna con la banca extranjera

La decisi¨®n de las principales instituciones espa?olas de acudir al concurso restringido convocado por el Fondo de Garant¨ªa de Dep¨®sitos supone un duro golpe a las aspiraciones de la banca extranjera instalada en Espa?a de ampliar su campo de actuaci¨®n en nuestro pa¨ªs que, como se sabe, est¨¢ regulado por el Real Decreto 1.388/78.Hasta la fecha, s¨®lo el Barclay's Bank brit¨¢nico ha podido obviar este decreto mediante la adquisici¨®n, en concurso restringido, del Banco de Valladolid, otro de los bancos en crisis que fue saneado mediante la intervenci¨®n del Fondo de Garant¨ªa de Dep¨®sitos. Esta compra desencaden¨® una fuerte pol¨¦mica entre la banca espa?ola y el Gobierno, controversia que se ha prolongado durante varios meses y que no parece que quedar¨¢ zanjada con el cierre del concurso de las dos ¨²ltimas instituciones importantes que quedaban bajo gesti¨®n de la Corporaci¨®n Bancaria.

En este sentido, la interpretaci¨®n m¨¢s extendida es que la batalla por la L¨®pez Quesada el Meridional forma parte de un pulso pol¨ªtico sin precedentes entre el actual equipo econ¨®mico del Gobierno y parte de la banca nacional sobre la remodelaci¨®n del sistema financiero que se inici¨® el pasado enero.

Uno de los temas conflictivos, aunque no el ¨²nico ni el m¨¢s importante, se cifra en la sorprendente importancia que ha adquirido la banca extranjera instalada en Espa?a, al amparo del decreto de 1978, en los mecanismos de financiaci¨®n espa?oles. Aunque las limitaciones del decreto parecen obvias, algunos bancos tradicionales habr¨ªan expresado su, voluntad al Gobierno de que se busquen nuevas formas, si no de reformar el decreto, lo que parece fuera de lugar, de imponer limitaciones a la eventual expansi¨®n de la banca, de cara, sobre todo, a la eventual integraci¨®n en las Comunidades Europeas.

Las limitaciones se deb¨ªan concretar, seg¨²n algunas versiones, en el n¨²mero de sucursales autorizadas, mientras otros mantienen que lo que deber¨ªa restringirse es la relaci¨®n que existe entre su financiaci¨®n ajena interior y el monto de sus inversiones en valores y cr¨¦ditos a entidades espa?olas.

Asimismo, la banca nacional estar¨ªa a favor de un per¨ªodo prolongado de transici¨®n (entre ocho y diez a?os) para la libertad total de instalaci¨®n de entidades de cr¨¦dito extranjeras, una vez hayamos ingresado en la CEE.