Tres federaciones regionales demandan a la Espa?ola

Las federaciones regionales castellana, catalana y valenciana presentar¨¢n demanda judicial contra la espa?ola por presuntas irregularidades de ¨¦sta en la convocatoria de elecciones en las regionales. El hecho no tiene precedentes en el deporte espa?ol y pone de relieve que el complicado mundo federativo del yudo a¨²n no ha recuperado la tranquilidad.La base fundamental de la queja est¨¢ en la convocatoria de elecciones en las regionales enviadas sin fecha, y en la cual se conced¨ªa un plazo de tres d¨ªas para proponer nombres para lasjuntas electorales; pasado dicho plazo, ser¨ªa la propia Federaci¨®n Nacional la que designase las juntas electorales, que tienen amplias facultades. La Federaci¨®n Nacional considera que la falta de fecha en la convocatoria es un error administrativo sin importancia, y fija como fecha de la misma el d¨ªa de la publicaci¨®n de la noticia en los diarios deportivos Marca y As. Los demandantes interpretan esto como una artimana de la nacional para formar las juntas electorales, controlar las elecciones y colocar al frente de las regionales a los hombres que m¨¢s le interese.

Por otra parte, la convocatoria ofrec¨ªa otro punto oscuro. Se adjuntaba a la misma un extracto de los estatutos con los art¨ªculos relacionados con la forma de efectuar las votaciones, y si en el art¨ªculo 33 se puede leer que en ning¨²n caso se admitir¨¢ el voto por correspondencia o delegaci¨®n, en el 34, al hablar de la forma de hacer el recuento, se admite la existencia de votos llegados por correo. Tanto el CSD como la Federaci¨®n Espa?ola justificaron esto como un error administrativo. Tambi¨¦n justificaron as¨ª la diferencia entre la redacci¨®n de dicho art¨ªculo 34 en el extracto citado y la que tiene en los estatutos, de los que se supone que es fotocopia. Por ¨²ltimo, tambi¨¦n llam¨® seriamente la atenci¨®n a los demandantes el hecho de que en la fotocopia de los estatutos eriv lada a las regionales est¨¦n sin sellar por el Consejo las cinco ¨²ltimas hojas, cuando se supone que deber¨ªan estarlo todas, pues en caso contrario no cabe asegurar la aprobaci¨®n del texto por parte del Consejo Superior de Deportes.