Retrasos y algunas suspensiones de vuelos a causa del plante de los pilotos de Iberia

La mayor parte de los vuelos programados por Iberia durante la jornada de ayer sufri¨® alrededor de una hora de retraso en la salida, a causa de la actitud que los pilotos de la compa?¨ªa mantienen desde el pasado s¨¢bado, de limitarse a cumplir con su funci¨®n a trav¨¦s de una estricta observancia de los reglamentos sobre navegaci¨®n a¨¦rea. A ¨²ltima hora de la tarde, por otra parte, permanec¨ªa abierto un circuito de contactos no oficiales entre la direcci¨®n de la compa?¨ªa y pilotos tendente a crear un clima favorable para negociar y zanjar el conflicto.

A las seis de la tarde de ayer Iberia hab¨ªa anulado cuatro vuelos nacionales -tres puente a¨¦reo Madrid- Barcelona y un Madrid-Reus-, de los 44 programados, de los cuales veintinueve salieron con un retraso medio de 58 minutos. En el tr¨¢fico internacional veintis¨¦is de los veintiocho vuelos programados sufrieron un retraso medio de 68 minutos.Para hoy las previsiones de alteraciones en el tr¨¢fico son similares a las de la jornada de ayer.

Plan Charlie 7

El plan operacional Charlie 7, dise?ado por el SEPLA (Sindicato Espa?ol de Pilotos de L¨ªneas A¨¦reas), que los pilotos ejecutan desde las cero horas del pasado s¨¢bado, es, en esencia, un recordatorio de normas contrastadas de aviaci¨®n.

Las primeras medidas del plan son recomendaciones al piloto durante su ejecuci¨®n. Por ejemplo: extremar la cortes¨ªa con el pasaje y con el personal de la compa?¨ªa; evitar molestias innecesarias a los pasajeros, despersonalizar la acci¨®n y avisar al sindicato urgentemente de cualquier incidente grave que pudiera presentarse.

En el terreno t¨¦cnico, el plan dise?a una serie de necesidades que el piloto debe exigir, como la solicitud de informaciones puntuales de meteorolog¨ªa y mapas.

Sobre embarque, el plan se atiene a las normas de la compa?¨ªa sobre embarques preferentes (inv¨¢lidos, familias con, ni?os) y solicita una escrupulosa vigilancia del equipaje de mano. Respecto a medidas de seguridad, el plan se remite a las actualmente en vigor. La petici¨®n de turbinas (puesta en marcha de los motores) se especifica que se realice una vez cerradas- las puertas y se solicita extremar las precauciones durante todo el vuelo.

Por ¨²ltimo, el plan se remite a la m¨¢xima actividad y descanso indicada en los horarios de la ALP (actividad laboral permitida).

La compa?¨ªa, por su parte, ha remitido a las distintas secciones una serie de normas ?con el fin de paliar en lo posible los efectos de la operaci¨®n C7?.

El contencioso origen de la situaci¨®n actual es un acuerdo, firmado el 29 de enero de 1980 entre el SEPLA y la compa?¨ªa, que prev¨¦ una regulaci¨®n de la prima por raz¨®n de viaje garantizada, a partir del 1 de enero del presente a?o y el incremento del 2,5% al 10%, de la hora base en las percepciones de las horas de actividad a¨¦rea en tierra.

Los pilotos de Iberia tienen unas determinadas horas de vuelo -desde que al avi¨®n le quitan las calzos hasta que se los vuelven a poner en otro aeropuerto- al mes (sesenta durante 1980). El pacto las reduce a 55. A partr de ese n¨²mero, las percepciones por hora de vuelo adicional sor, similares a la hora base.

Las horas de actividad en tierra se calculan restando las horas de actividad a¨¦rea (desde que el piloto firma a la llegada a la compa?¨ªa, 45 minutos antes de la hora programada para el vuelo. hasta treinta minutos despu¨¦s de poner los calzos tras el ¨²ltimo vuelo de la jornada) a las horas de vuelo. El 2,5 % de esa resta se computa como horas de vuelo y se paga como tal. El acuerdo eleva ese 2,5 al 10%, pero a¨²n no est¨¢ definido, porque hay discrepancia sobre el precio de la hora base.

La compa?¨ªa intenta absorber con el 11 % de incremento en tablas para 1981, aplicado a todos los colectivos, los mencionados acuerdos, a lo que se opone el colectivo de pilotos, que exige la puesta en pr¨¢ctica de lo firmado entre las partes.