Fern¨¢ndez Posse

Acabo de leer, en EL PAIS del 26 de los corrientes, el catastr¨®fico y, por otra parte, vago discurso, desde luego no pronunciado ?en nombre del Rey?, del capit¨¢n general de la VIII Regi¨®n Militar, teniente general Fern¨¢ndez Posse. El texto todo del ofrecimiento al se?or Santiago no deja de ser sorprendente, pero lo m¨¢s asombroso es el p¨¢rrafo en que textualmente dice: ?No me explico c¨®mo algunos espa?oles, que pretenden ostentar la patente de dem¨®cratas, pertenezcan o simpaticen con partidos cuya ideolog¨ªa es el gobierno totalitario e imperialista, a base de un ¨²nico partido y una enorme carencia, en consecuencia, de libertades democr¨¢ticas?.Yo pienso que a un hombre p¨²blico y representativo, como es un capit¨¢n general, debe exig¨ªrsele un m¨ªnimo de coherencia en sus palabras, porque es innegable que el p¨¢rrafo entrecomillado est¨¢ en tremenda contradicci¨®n con el elogio que, en otro momento de su discurso, hace del general Franco, personaje que encarna el paradigma de lo que el general Fern¨¢ndez Posse dice no explicarse.

Quiz¨¢ en esta Espa?a nuestra muchos problemas podr¨ªan solucionarse si los espa?oles de toda condici¨®n tuvi¨¦semos un m¨ªnimo de memoria hist¨®rica.